19 diciembre 2007

Informa Pisa: ya vale para todo

Un veterano profesor de Economía con un dilatado itinerario ideológico de amplio espectro nos ilustró hace unos días en la prensa regional con sus opiniones sobre el sistema educativo. Opina, supuestamente, apoyado por la doctrina PISA, que vivimos un retroceso cultural y le falta al respeto en la cara a la mayoría de la juventud española que no encaja en sus cánones, los tilda de airados y desarmados intelectualmente. Me extraña mucho que un profesor universitario esté sólo en contacto con especímenes que respondan a esta descripción, no sé qué le queda al educador del tutelar de menores. Pero les perdona la vida, "son víctimas del sistema", un sistema educativo que recibe demasiados impuestos para sufragar sus gastos. Olvida el pequeño detalle de que los tan denostados impuestos también pagan los salarios de los profesores universitarios integrados voluntariamente en el sistema público, funcionarios de este Estado supuestamente dotado de una Hacienda insaciable y derrochador por naturaleza. Creo que tergiversa con ganas los resultados afirmando que PISA achaca los males presentes al nivel socioeconómico familiar, cuando el informe aporta datos suficientes para demostrar que son los niveles culturales familiares los que en cierta medida condicionan el éxito, usando indicadores como el número de libros que haya en la casa del chaval (más o menos de 500). Si este dato no tiene componente económico...No se trata de demonizar nada, pero tampoco de comparar lo incontrastable, es decir, el modelo familiar de la posguerra, el del desarrollismo, o el actual siguen caminos muy distintos y, por ejemplo, el papel de la madre puede seguir siendo el de ama de casa vigilante de los deberes de la criatura, pero también puede ser trabajadora a turnos en una planta industrial, nuestro prócer parece añorar también el conservadurismo de roles. No es menos grave en mi opinión, la afirmación de que los males de la sociedad llegan cuando los jóvenes dejan de estar reprimidos y se les ofrece permisividad -menos mal que no dice libertinaje- y se les deja votar. Cuesta creer que se está tratando de limitar el derecho al voto por falta de años. Termina su argumentario con una larga diatriba contra el sistema, centrándose ahora en al falta de evaluación de los alumnos, cuando en realidad quiere decir selección, expulsión del sistema de los que no den su talla. Normalmente no se dice qué se hará con ellos o si la calle los educará mejor. Reclama evaluación exterior para los centros y medir los resultados de los profesores. Idea atrayente sin duda, que podría aplicarse también a quien yo me sé. Pero lamentablemente no da pistas claras sobre el método, salvo las propias leyes del mercado. Sólo un profundo desconocimiento de la realidad puede llevar a que se proponga medir la productividad y pagar por resultados a un profesor de educación especial. Y ojo que no niego la posibilidad de que haya diferencias salariales en función de la dedicación, medida y acreditada por los medios más objetivos; de lo contrario a todos los docentes habría que dejarles escoger a sus alumnos en función de sus potenciales buenos resultados para garantizar así mejor salario, lo contrario es -por lo menos- jugar con las cartas marcadas.

14 diciembre 2007

Informe Pisa: hoy puede ser un gran día, pero verás como...

Viene uno y lo jode. Así rezan carteles y azulejos en toda suerte de locales. Algo así puede estar pasando con el tan cacareado mamotreto. Vamos por el tercer Informe PISA, que de esta vuelta trata de analizar los conocimientos científicos de nuestros alumnos. En este mismo periódico hace tres años comenté ampliamente mi opinión sobre la validez de este tipo de estudios. Seguramente sí, sigo estando de acuerdo al cien por cien con, lo que decía hace tiempo. De lo que sí estoy seguro es de que se trata de un informe técnico, hecho por técnicos y destinado a ser leído y analizado por técnicos. No es que quiera restarle capacidad de estar informada a la opinión pública, ni que quiera hurtar las verdades del porquero de Agamenón a la sociedad, a los padres ni a los políticos en general; pero sí creo que todos deben tener claro que todos los resúmenes, comentarios, encuestas callejeras, sesudos análisis..., insisto aún, siguen siendo mercantilistas y solapados, es decir, interpretan cuatro números con criterios economicistas y del informe sólo se leyeron la solapa.Baste un par de detalles, en los países de nuestro entorno la información sobre el PISA, no voy a decir que pase desapercibida, pero que es cierto que se usa de una forma más racional, es una verdad del tamaño de una vaca. En los lares de nuestros vecinos el PISA no es un arma arrojadiza y menos electoralmente; son los mesurados sociólogos, los aburridos pedagogos los que analizan unas pruebas más o menos objetivas. Aquí no, aquí vamos comentario sobre comentario, tertulia, sobre tertulia sacudiéndonos cantazos a diestro y siniestro en los occipitales, en los abdominales e incluso más abajo.Si para algo me sirve la historia esta es para repensar otra vez más que los traspasos educativos no están funcionando todo lo bien que nos prometimos. Ya tenemos sistemas sanitarios y educativos autonómicos diferentes y no sé yo que me da en la nariz para sospechar que la descentralización administrativa hubiese sido suficiente para garantizar derechos lingüísticos y no ahondar en diferencias que demuestran injusticias. Fíjense que es el MEC el que se somete a las pruebas del renombrado informe, pero sólo son diez las comunidades autónomas las que se dejan evaluar. Aquí empiezan las competitividades fuera de tono. Por ejemplo, a cuento de qué los andaluces han de quedar como los más dejados de la mano de la ciencia y los castellanos viejos, los más avanzados. Supongo que tendrá algo que ver la densidad de población escolar, el nivel de penetración del alumnado inmigrante... No olviden que son 20.000 chavales y chavalas de 15 años, un puñado de directores y ningún profesor, los evaluados, los que deciden que la escuela marcha o es un fracaso.De aquí en adelante pongan a remojo todos los titulares que les caigan ante los ojos, sepan, pues que cuando hablemos de una media de 500 puntos en el informe, una diferencia de 10 o 20 es considerada indiferente, por no decir estadísticamente despreciable. Aquí las cosas, educativamente, van todo lo bien que pueden ir gastando lo que se gasta, que no es mucho.

04 diciembre 2007

Novedades duras

La movilización se refuerza siempre en campaña electoral y ya llevamos mucho tiempo dentro de esa piscina a la que nos han lanzado a todos a chapotear con mayor o menor éxito. Hay nadadores federados que compiten legalmente, pero también hay submarinos, tiburones, fanecas bravas y escarapotes. Incluso hay algunos que nadan con traje de neopreno, otros con un mísero flotador y los demás con el simple bañador.La temperatura que desprenden los cuerpos y objetos allí a remojo sube y sube de forma que el líquido elemento-ambiente se calienta de tal forma que ya parece estar climatizado sin gastar un mísero kilovatio y sin que el termostato tenga posibilidad de regular nada.Empezó la cosa con las beatificaciones masivas, nada que objetar al contenido religioso del acto. Sí he de decirle al Gobierno español que no me gustó, allí postrado, rendido. Esto es recibir cargas de profundidad en plenas aguas extraterritoriales.Los presupuestos generales del Estado contemplan el aumento de la asignación a la Iglesia católica hasta el 0.7% detraído de los servicios a todos los ciudadanos. Esto es nadar con traje de buzo y guardar la ropa de la liturgia a buen recaudo. Aquí y en Roma. También podría ser actividad pirata en las aguas turbulentas y electorales.Los tiburones del papel prensa y las ondas episcopales siguen a la carga y cada vez nos sorprenden más con su inestimable imaginación, con su providencial inspiración de desconocida procedencia, pero con fines como los de los pescadores desalmados, con malas artes y siempre aprovechando el río revuelto. Por fin el jesuita portavoz de la Conferencia Episcopal, desobedeciendo las instrucciones de su congregación, alcanzó el obispado; antes con el poder de la palabra el daño era doloroso, pero pasajero, como el de la faneca brava, ahora con poder real podemos echarnos a temblar y escapar de sus fauces como del hambre.En medio de todo esto vemos a monseñor Blázquez, con cara de bonachón, que no deja de recibir bofetadas del "fuego amigo". Se atreve a poner en cuestión en una homilía el papel de la Iglesia católica en el golpe del 36, pero no se crean que pidió perdón como se dijo, simplemente sembró la duda de que pudo haber habido injusticias por ambos bandos, que el apoyo de la jerarquía católica no tendría que haber sido tan brutal en la colaboración con la represión... El caso es que el bueno del presidente de los obispos sólo tuvo el apoyo explícito de uno de los suyos, como para echar cohetes y tener la sensación de que resistes con mísero flotador rodeado por la Sexta Flota. La guinda la pone el ex alcalde Francisco Vázquez, que en un reciente artículo recuerda al intrigante Tarancón coronando al rey Juan Carlos hace 32 años y haciendo gala de la lucha de la Iglesia por las libertades. No pueden caber tantas inexactitudes en tan poco espacio y no sé a quién le quiere hacer un favor, al Rey o a la Iglesia.

27 noviembre 2007

En público: aquí estoy yo, para que me vean y sepan de lo que soy capaz

Recuerdo a un viejo sindicalista contar que sí, que todo su trabajo había sido muy productivo, que las condiciones laborales de sus compañeros habían medrado a fuerza de lucha y tesón, pero que lo que de verdad había hecho más por los trabajadores en este país había sido el anís Castellana y el coñá 103, en forma de solysombra madrugador antes de subirse al andamio, en público. Cualquier jovenzuelo, de los de hace treinta y tantos, con sus dieciocho recién estrenados, se preparaba para examinarse del permiso de conducir; en la puerta de aquel descampado en el que tenía que hacer el aparcamiento, arrancar en rampa o acertar con la curva marcha atrás, seguramente recuerda que había un pequeño quiosco que se hacía de oro despachando copas de Fundador desde buena mañana; a veces era el propio profesor de la autoescuela el que invitaba y le infundía ánimos para acercarse a la terrible prueba con el valor suficiente -con el gaznate engrasado por un par de copazos- y demostrar su ¡aquí estoy yo para lo que me echen! Y quien quiera verlo que lo vea.Bajar a la mina con un análisis de sangre en perfecto estado de revista pocos lo recuerdan y subirse a un barco del Gran Sol, así, por la buenas era caso excepcional, en público. Todo el que se haya acercado cualquier madrugada de invierno a la llegada del pescado a las lonjas habrá observado que las mujeres que estibaban las cajas desde los barcos o desde los camiones siempre tenían a su lado, sin perderla de vista una botella de gaseosa que, lógicamente, no contiene ese refresco dulzón, sino el alcohol suficiente para demostrar a cualquiera y en cualquier momento con quien se la está jugando. No es que me quiera centrar ahora en la apología del ex presidente Aznar increpando a los que le hacen sospechoso de llevar su liberalismo hasta el extremo de saltase el código de la circulación, pero es su modo de rebeldía, de hacerse ver, sacando fuerzas de flaqueza, como el rey que manda callar, así, de malas maneras, que aquí mando yo y no hay nada más que hablar, en público.No sé la razón por la cual nos rasgamos tanto las vestiduras ante hechos perpetrados en público, a sabiendas que son delictivos, que son susceptibles de castigo legal y que todos los propagamos a los cuatro vientos. El salvaje que pateó a la chica inmigrante delante de la cámara del metro era consciente de que lo hacía en público y de que su hazaña le convertía en semihéroe de la comunidad, no necesita más estímulo externo, alcohol, drogas... lo que fuere, para autoconvencerse de que iba a ser el rey del mambo.Cualquier mozalbete descontrolado por quienes deben controlarlo y ponerle límites, sabe que su paliza propinada ante un móvil grabando le produce las mismas descargas de adrenalina que los garrafones que se servían en las cantinas cuarteleras. No creo que haya que buscar causas muy profundas para encontrar razones para superar la baja autoestima y los mecanismos de proyección para superarla, en público.

20 noviembre 2007

¡Ay Bolonia!, ¿Hay Bolonia?

No me lo creerán pero para muchos lo de Bolonia no es más que la salsa del espagueti y para los cultitos de turno es donde da doctrina Umberto Eco y la sede del Real Colegio de España donde estudian dos años los llamados bolonios, beneficiarios de las becas instituidas por el Cardenal Albornoz para las que es necesario cumplir y acreditar los requisitos derivados de aquella voluntad fundacional: ser varón, español, católico, de conducta irreprensible, menor de treinta años, licenciado en España con muy buenas calificaciones, no padecer enfermedad ni defecto físico o psíquico incompatible con el ejercicio de las funciones correspondientes y no ser funcionario público. Pero hoy Bolonia es algo más que todo eso, es lo que se está llamando desde hace ya años el Espacio Europeo de Educación Superior (EEES), pero ¿qué es? Lo que llega a la opinión pública es que dentro de un par de años ya no habrá licenciados, que habrá graduados -y que nadie me haga chistes fáciles con Dustin Hoffman-, que habrá máster y doctores. La culpa fue del Uruguay y su Ronda, siguió el informe Delors -Enseñar y aprender: hacia la sociedad cognitiva- hasta que al fin unos pocos rectores y ministros europeos se pusieron de parto y nació el EEES. ¿Para qué? Seguramente con un buen fin, hacer realidad la acreditación de la formación y de las capacidades profesionales, la movilidad de profesores y estudiantes. ¿Quién estaba detrás?, sin duda la comercialización de servicios (GATS) promovida por la Organización Mundial de Comercio, la mundialización de la que tanto hablamos y de la que tanto oímos.Pero la madre del cordero tiene que ver con el hecho de que la Unión Europea (UE) no tiene capacidad para legislar en materia educativa y hay que buscar la triquiñuela que permita saltarse ese pequeño escollo legal mediante acuerdos como el que nos ocupa para después adaptarlo a la legislación de cada dominio rectoral. A partir de ahí pasen y vean, licenciaturas que saltan de cinco cursos, a tres, a cuatro, así, sin red. Cocinado todo sin debate, negociación, acuerdo de ningún tipo con ningún interlocutor representativo, sólo los rectores sazonan el guiso, eso no es forma de cocinar.Por otra parte estos cambios afectarán al resto del sistema educativo, empezando por la forma de acceso a la universidad y aquí sólo se entera el que tiene la sartén por el mango.Las condiciones de trabajo de los profesores, su captación para el sistema se deja en manos, también, del mercado. Si algo se parece más al régimen semifeudal de las subcontratas de la construcción es la variedad de la fauna y flora que puebla las múltiples variedades de los puestos de trabajo que se pueden desempeñar en una universidad, desde el mandarín plenipotenciario hasta el meritorio más pringado en forma de beca cutre, pasando por todo tipo de situaciones funcionariales, laborales y mediopensionistas que soportan obligados por la necesidad todos aquellos que no han sido cooptados por la empresa privada, que paga bien después de hacerte sufrir bien; afortunadamente también quedan los que en realidad piensan que lo que ha invertido la sociedad en su formación merece que ser devuelto en forma de dedicación a la institución.

14 noviembre 2007

De privatizaciones y `botellones´

Quién te ha visto y quién te ve y sombra de lo que eras
Miguel Hernández
Ilustres nacionalistas coruñeses de todo pelaje y condición que siempre han lanzado sus palangres para la captura de votos entre el personal de más tierna edad, desde los viejos tiempos a los más modernos de la oposición municipal y espesa, se encuentran ahora con la enjundiosa tarea de dar solución al problema del botellón; pero una solución de gobierno, no una de estas saliditas demagógicas de las de disparar a corner.El asunto es que hay que quitar a la marabunta de la ciudad vieja y sus aledaños y trasladar ruido, bebidas, música, basura y mozalbetes a otro sitio. El problema es complicado, los ediles han de contentar a los vecinos protestotes, que -por cierto- pertenecen a asociaciones, coordinadoras y demás entes con gran influencia de su propia clientela; pero, claro, el voto juvenil es el voto juvenil y no es deseable dejarlo a merced de la abstención asocial, ni de desalmados demagogos izquierdistas que quieran faenar en esos caladeros. Dura faena esta de depender del voto, siempre desagradecida.Se han oído voces que parecían salidas de un concurso de monólogos de humor para participantes que hubieran fumado previamente sustancias de variada composición, por ejemplo, se ha hablado de proyecciones de cine de arte y ensayo, supongo que subtituladas, gratuitas y en horario noitebus, ¡buena idea! Por lo menos 150 jóvenes estarán fuera de la circulación. También escuché el rumor de no sé qué de unas tortillas, no sé si se trataba de proponer reparto gratuito de las mismas, de un concurso de elaboración o de una de guerra de lanzamiento del plato betanceiro por excelencia, bien, vamos bien, ese es el camino, están locos estos romanos.También, y cambiando un poquito de tema -mas no de personajes-, podríamos seguir hablando de nuestros próceres nacionalistas en el gobierno gallego. Después de bramar y bramar contra toda privatización, contra toda fundación pública, ahora comprobamos que desde diferentes ámbitos de su responsabilidad presupuestaria se disponen a privatizar servicios delicados que por su carácter, complejidad y rigurosidad no deberían ser puestos en manos de la empresa privada. Es decir, y hablando más claro, la atención a los dependientes, mayores, minusválidos... su cuidado está sujeto a un presupuesto público, si concedemos el servicio a una empresa privada, ésta que lógicamente no trabaja por amor al arte costeará el servicio y se reservará, como está mandado, el beneficio empresarial, eso sí, sin haber arriesgado un duro de su capital. Ese beneficio empresarial puede salir de las condiciones laborales de sus empleados o de la calidad del servicio a los usuarios, adivinen de dónde sale, seguro que de ambas partes. ¡Sombra de lo que eras!Otro día podremos dedicarle más atención, pero simplemente pongan atención cuando lean SEAGASA (Medio Rural), SOGASERSO (Vicepresidencia), GALESCOLAS (Vicepresidencia), AGADIC (Cultura), INSPECCIÓN DE VERQUIDOS (Medio Ambiente)...

07 noviembre 2007

Acelga y grelo

No sigan leyendo los que busquen divulgación sobre las virtudes dietéticas de las verduras ni los que indaguen sobre recetas originales.Les quiero hablar de lo que algunos conocen, dentro de poco se convocará un concurso de méritos para que los profesores de instituto puedan ser catedráticos. Pues bien, si la leen, verán que allí se les exigirá cierta experiencia y antigüedad, se les premiarán sus cargos, sus investigaciones, publicaciones, titulaciones, master, doctorados... todo parece lógico hasta que llegamos al punto clave del apartado correspondiente a la titulación de gallego, el candidato ha de estar en posesión del Celga 4 ¿Cómo que no sabe usted qué es el Celga 4? ¿Lo dice así, a pecho descubierto? Sin el Celga 4 no se puede andar por el mundo, amigo mío, es usted un imprudente.El bueno del Certificado de Lingua Galega se obtiene habiendo cursado 150 horas de cursillos cutres o superando el correspondiente examen. De nada sirve que el candidato lleve 15 o 20 años por Galicia adelante, pisando toxo, entendiéndose y haciéndose entender por sus congéneres, seres humanos alumnos, padres, colegas. Ahora el mayor freno es el titulín de marras, es más, el concurso de méritos es tan aséptico y objetivo que el candidato no ha de demostrar ser un buen profesional, que no tortura psicológicamente a sus alumnos, que no está permanentemente subido al pedestal de su orgullo distanciador del que aprende. Nada de nada, papeles y más papeles. Después de verse preventivamente excluido de la convocatoria, al candidato se le quedó cara de acelga (a-celga, sin celga) como al protagonista de aquella vieja película de Pepe Sacristán.A ver cómo se buscan la vida nuestros "acelga" o qué solución les dan nuestros intelectuales del país encantados de la vida como están con estos nuevos anuncios de los supermercados que nos animan a vivir en gallego o a verse gallego.Supongo que los aprendices de delincuente de Boiro que pateaban y grababan al compañero, por su edad ya tendrán el Celga 2 o el 3 y se les notaba que vivían la paliza en la lengua del país, energúmenos; el otro casi la muere, también en la lengua del país. Quizá les haga falta menos celga y más educación para la ciudadanía.Yo creo que la solución pasa por reconvertir a los acelga en grelo, es decir, que previa reeducación pasen a formar parte del "Grupo de Ensinantes Lingüísticamente Óptimo".Hubo un tiempo en el que se puso de moda el término disléxico, se usaba con alegría, se decía "es un poco disléxico", incluso en las aulas, sin diagnóstico previo, los chiquillos llegaban a insultarse, "disléxico, más que disléxico". Con el término autista, pasó algo parecido. Ahora sólo nos queda que los claustros se dividan entre los acelga y los grelo, que se increpen sin pudor.Ni que decir tiene que aquel logroñés, eminencia de la biología, que este verano se enamoró de una farmacéutica gallega, lo lleva claro si quiere ser catedrático en un instituto gallego. Tiene Internet para rato si ella no se marcha a vender paracetamol a los riojanos. El carné de identidad no les sirve para nada.

30 octubre 2007

El Nobel del `marketing´

Al Gore: "Sería estúpido pensar que las emisiones no van a tener efecto". Hace más de treinta años muchos nos despachamos a gusto diciendo que la autopista del Atlántico era una "navallada" para el país. Hoy nos ponemos colorados sólo con recordarlo; muchos no sabían qué era el CO2 y hoy siguen sin saberlo entre peaje y peaje. Todo sigue igual. Aquí todo blas se siente con derecho de echar la lengua a paseo para pontificar sobre algo inocuo como la selección de futbolistas, como para sentar cátedra sobre la capa de ozono y el efecto de la laca para el pelo sobre la misma. Quizá el hecho de haber estado y seguir estando tanto tiempo bajo el influjo de chamanes de distintos credos tenga su importancia; siempre se pensó por estos lares que el mejor científico era el que ardía en la hoguera.Pero de un tiempo a esta parte, y estos días en plena ebullición, se confunde la demostración científica, el debate técnico con las encuestas electorales. Ahora parece ser que si votas a la derecha no hay cambio climático ni calentamiento del planeta y si votas a la izquierda al mundo le quedan dos telediarios, somos así de frívolos y si nos dan por el palo nos ponemos burros a reventar. A poco leído que esté, cualquier bachiller sabe que el globo que habita sufrió a lo largo de su dilatada vida calentamientos y enfriamientos como para aburrirse, que no hay dinosaurios, que nadie lleva cuenta de los tsunamis y que vaya usted a saber dónde estaba la Atlántida. Otra cosa no habrá habido, pero cambios...En cuanto el primer forofo del primer mundo predica apoyándose en una misteriosa presentación en Power Point y con un documental supersecreto, la moda está servida. Cuatro datos estadísticos bien escogidos, dos chorros de morbo y unas gotas de demagogia forman un cóctel de atractivo, imposible de rechazar por cualquier ser bienintencionado. Todo para procurar que se evite la desertificación y para que llueva en Almería a toque de corneta. No sé cuáles serán las razones oscuras que han llevado a este cómplice de abundantes bombardeos a ser elevado a los más elevados altares del ecologismo con la complicidad de todos los progres biempensantes. Otra cosa es que el resto de los estudios científicos no tengan los altavoces necesarios y que sus conclusiones no sean tan rimbombantes, porque no vaticinan catástrofes inmediatas.También es cierto que cuando este bendito de Al Gore mandaba en USA no estaba tan eufórico con Kioto, y que en todas las escuelas se enseña a apagar las luces, a cerrar los grifos. Todos sabemos que hay que consumir menos petróleo y más sol, que la sostenibilidad es un bien imprescindible y no por eso hemos de pasmar ante este ecologista sobrevenido al que engordamos la cuenta corriente cuando el MEC le compra su DVD al doble de lo que cuesta en los quioscos y que hacerse mensajero de su quijotada costará una pasta gansa que de alguna forma pagaremos. Que le den el Nobel del marketing o algo así. Yo era un tonto y lo que he visto me ha hecho dos tontos (R. Alberti)

28 octubre 2007

Meirás, Pardo Bazán y `La tribuna´ (y II)

Como el martes pasado, seguimos hablando de Pardo Bazán para comentar el otro detalle que nos quieren colar de rondón los coruñesistas de toda la vida con sus alabanzas a La tribuna, la obra con espacio coruñés, la Fábrica de Tabacos, su obrera Amparo, su marco histórico, la revolución del 1868, las reivindicaciones de clase... ¿Qué nos encontramos? Casticismo puro, más modernito que La gaviota de Fernán Caballero, sí, pero costumbrismo basado en la observación del inferior, de las obreras explotadas sin haber tenido nunca intención de escribir una obra de apoyo al proletariado femenino coruñés. No nos engañemos suponiendo veleidades izquierdistas, la condesa dice: "Es absurdo el que un pueblo cifre sus esperanzas de redención y ventura en formas de gobierno que desconoce [la República] y a las cuales por lo mismo atribuye prodigiosas virtudes y maravillosos efectos". Ahora bien también nos la quieren colar con las veleidades feministas de la señora y, en concreto en La tribuna. Amparo se nos presenta como una precoz líder sindical contra la explotación de sus compañeras; todo muy rico y muy abundante si no profundizamos en las reflexiones que se destilan en la obra. Por ejemplo, se nos explica cómo el puesto de trabajo poco menos que se hereda de madre a hija, que no se llega a saber muy bien si es una ventaja o una maldición; el caso es que la sociedad coruñesa poco menos que celebra la entrada de una niña en la Fábrica con el mismo boato que una boda: "El día en que recogió el nombramiento, hubo en casa del Barquillero la fiesta acostumbrada en casos semejantes, fiesta no inferior a la que celebrarían si se casase la muchacha: Mandó la madre decir una misa a Nuestra Señora del Amparo, patrona de las cigarreras...". Otro asunto espinoso, los malos tratos, no pretendo que la condesa hubiese redactado proyectos de ley de igualdad ni contra las palizas a las mujeres -no creo que ella recibiese ninguna, pero saber, sabía que las había- pero vean cómo se explica en la novela en cuestión el hecho de que una compañera de Amparo robase tabaco para que su marido no le pegase y sus compañeras se solidarizasen robando para ella: "Robar no estaba bien hecho, claro que no, pero también hay que ponerse en situación de cada uno: ¿Cómo se había de gobernar la infeliz, si su marido la tundía y hacía picadillo con ella? ...en fin no era razón de dejar morir de hambre a los chiquillos de la Rita". Pero la moraleja de verdad, la que no nos deja lugar a dudas sobre el papel y la intención de la condesa es la relación de Amparo con Baltasar, el jovenzuelo burgués del que se enamora, que la deja embarazada y sola. La líder no es embaucada, se nos presenta como una trepa vulgar y corriente que abandona sus ideales pensando sólo en su interés particular. Evidentemente el final no es de cuento de hadas, el ascenso social por esa vía es imposible, también para la Pardo Bazán, a Amparo le queda el buen recibimiento de sus compañeras cuando llega sola y abandonada. Cada uno en su sitio, como tiene que ser, faltaría más.

16 octubre 2007

Meirás, Pardo Bazán y La tribuna (I)

Está bien esto de que por culpa de las Torres de Meirás, se hable de Franco, de Pardo Bazán y los Cavalcanti -sus dueños reales-, a fin de cuentas se habla de memoria, histórica por supuesto. Estos días pasados se airearon los métodos confiscatorios de las fuerzas de ocupación en el 36 para quedarse con las Torres y dárselas al dictador, de las supuestas intenciones de devolver a la comunidad sus viejas propiedades; por mí que compensen a las víctimas, dejen el caserón para la visita, que no les suelten un duro a sus ocupantes, que me llega con un reportaje por la tele. Me interesa hablar un poco más de sus antiguos dueños. Aprovechando todos los pisuergas se toca y retoca la figura literaria de la condesa de Pardo Bazán y las ascuas y las sardinas revolotean sin control. Que no hay que quedarse en las frivolidades de sus coqueteos con Galdós es absolutamente cierto, sobre todo porque las cartas privadas no han de ser públicas ni publicadas. Si le llamó ratoncito mío es cosa de ambos y al resto nos importa bien poco. Que la señora tenía gran cultura, pretendía estar a la última, que estaba muy viajada y estudiada, también es cierto; pero detengámonos en un par de detalles. Por un lado se trata de vendernos su producto como el no va más del progresismo de la época y aquí quizá convenga un ratito de reflexión. Los que pasan el Rubicón racionalista y progresista de la segunda mitad del XIX son, sobre todo, los naturalistas franceses, Zola y compañía. Ella los lee y publica La cuestión palpitante para dejar claro que es buena católica y que los del norte se pasan varios pueblos describiendo las entretelas de la sociedad; que sí, que es cierto que existen, pero que para qué vamos a contar la retórica de alcantarilla, los temas soeces y groseros, ya sabemos que el pueblo hace lo que hace a oscuras. Quizá por eso Zola le responda: "Lo que no puedo ocultar es mi extrañeza de que la señora Pardo Bazán sea católica ferviente, militante, y a la vez naturalista; y me lo explico sólo por lo que oigo decir que el naturalismo de esa señora es puramente formal, artístico y literario". Queda claro que Zola es un caballero francés y que podría despacharse a gusto diciéndole a las claras que le parece una hipócrita con todas las letras. Quizá hablando claro y pronto, a la señora condesa no le apetecía que las cosas cambiasen tanto y tan deprisa y lo dejó bien explicado: "No solamente entre las cigarreras, sino entre todas las obreras española, ha cundido bastante la idea republicana, muy propia para lisonjear teóricamente esa sed de justicia que, en efecto posee en alto grado la plebeya. Mas por un contraste que también tiene su explicación, la obrera republicana de España sigue siendo devota, haciendo novenas y costeando funciones a sus predilectos santos y vírgenes..." Muchas intenciones descriptivas de los males de las obreras, pero poca intención de que sus condiciones mejorasen ni de que se librasen de sus corsés ideológicos. adogil@terra.es

09 octubre 2007

Algo se mueve

El martes pasado les comentaba el veto y el despido de Cristina Peri Rossi de los medios de comunicación públicos en Cataluña. Como todos los que nos hemos hecho eco de tal fechoría he recibido amable respuesta colectiva en la que se anuncian novedades, aguardamos las buenas nuevas. Si han seguido los acontecimientos habrán visto que el presidente autonómico, Montilla, ya recula y sólo los recalcitrantes nacionalistas, disfrazados de republicanos progres siguen dando la matraca, esto es que algo se mueve. Seguimos por aquellos lares y les cuento sin acritud que ya hay problemas con el inglés. Bien, tranquilos, no es que los nacionalistas catalanes no quieran aprender inglés, que para algo Pujol es un gran políglota -pese a que su castellano sea bastante pobre- , de lo que se trata es de que para ejercer como maestro en Cataluña hay que superar todas las barreras lingüísticas que los sucesivos gobiernos autónomos han querido ir imponiendo. De aquellos polvos vienen estos lodos: hay que extender la enseñanza del inglés a los tres años y no hay maestros suficientes. Para ser profesor de inglés en las Escuelas de Idiomas no llega con saber inglés. Los filólogos recién licenciados en cualquier universidad no pueden enseñar inglés... El conflicto laboral, por lo menos la polémica laboral, están servidos. Los mentideros dicen que por este lado algo también se mueve. En las universidades de por allí también cuecen habas de este tipo, a un señor de Sevilla con la Selectividad aprobada, nadie le puede negar la matrícula en una universidad catalana; pero como ese señor no es tonto se preocupará de saber qué le van a exigir, en qué lenguas le darán clase, cuánto tiempo dispone para aprenderla y quién se la enseñará. No sé si sus ansias se dirigen a no recibir Erasmus del resto de Europa, pero si siguen por la vía estrecha se encontrarán pulcros e inmaculados con un ADN impoluto. No creo que lleguen a morir de un ataque de éxito, moverán pieza. Como ven se pueden hacer tonterías desde muy diferentes sitios y situaciones, se pueden hacer limpiezas lingüísticas por doquier, que el bípedo inteligente siempre sabrá burlarlas; vamos hombre, eso ya desde que dejó de apañar frutos de los árboles y de cazar a pedradas. Pero puestos a seguir con las majaderías no se pierdan la de Sarkozy jugando al CSI, mandando chupar esa especie de bastón de limpiar las orejas y que no le cruce la frontera ningún cromosoma ilegal contaminante. Y no podría faltar la última, la del vídeo del las Juventudes Socialistas tratando de demostrar que la asignatura de Educación para la Ciudadanía es necesaria; menos mal que de ellos no depende la tal materia, que si llega a ser por sus chuscas ocurrencias entre una chica, buena ciudadana, y un chico pijo malcriado jugando al pasapalabra, nos quedábamos como estábamos. Algo más se moverá por ahí y dejarán el vídeo para mejor ocasión para no ponerse a la altura de Esperanza Aguirre.

02 octubre 2007

Pártase usted la cara para esto

Cristina Peri Rossi es uruguaya, estudió Biología y se licenció en Literatura Comparada, la leo desde que llegó a España, exiliada después de haber publicado sus primeros libros en Montevideo (1963), perseguida por la dictadura militar que convirtió aquella pequeña Suiza, el pequeño país de oficinistas de Benedetti, en un lugar donde la represión de las botas de media caña duró hasta 1985. La recuerdo en la revista Triunfo desde 1972 y ahí también fue incómoda para la dictadura franquista, hubo de exiliarse, otra vez, a París unos años hasta que se acogió a la nacionalidad española.Se nacionaliza. ¿Qué estoy diciendo? ¿Dejó de ser uruguaya? ¿Es española? ¿Es catalana? Fortuna la trajo salvando la vida para que nos contase sus cuentos y nos leyese sus poemas. El mercado laboral la llevó a trabajar en TV3 y Cataluña Radio. Todo muy bien hasta que se dieron cuenta de que hablaba en castellano, tardaron en darse cuenta, pero cuando lo hicieron ya tenía la carta de despido en sus mismas narices. Cabe que se pregunten si la echaron por hablar en castellano o por lo que decía en castellano ante un público que sin la menor duda entiende las dos lenguas. Pueden solucionar su duda con una moneda, a cara o cruz; pero... no sé yo, si Cristina Peri Rossi bailase sardanas a discreción ante el auditorio podría seguir sin ser víctima, esta vez, de la represión nacional-identitaria. La despiden por una resolución del consejo de Administración de la CCRTV por la cual se transmite una comunicación verbal a los técnicos que elaboran el programa El oficio de vivir en la cual se dice que se pueden admitir todo tipo de colaboradores que hablen en cualquier lengua menos en castellano. Pasen y vean. Luchen ustedes contra un par de dictaduras para esto. La recuerdo defendiendo a capa y espada los derechos de los catalanoparlantes, para que ahora vengan y le digan literalmente que no le pagan si habla en castellano, que si publica un libro, van a mirar a ver si la invitan a que lo presente.Pero no todo van a se malas noticias, también las hay buenas, no vaya a ser que nos deprimamos. Una buena noticia es que han decidido repartir libros en los cuarteles de policía en Galicia. No voy a ser yo el que diga que no se han de repartir libros; allí, en los garitos de carretera y hasta en los confesionarios, faltaría más; pero -siempre hay un pero- lo que no me explico es la razón que lleva a las autoridades competentes a decidir lo que han de leer los guardias y en que lengua han de leer. Vamos a ver, se están disfrazando las cosas ¿se trata de que lean o de que lean en gallego? ¡No son mozalbetes de la ESO a los que se les reconduce a la normalización! Trátenlos con respeto, si quieren que lean, páguenles la factura de la librería y no se molesten en campañitas comerciales e inútiles.El último guardia que me paró en la carretera me invitó en perfecto y maternal gallego a soplar por el artilugio, lo hice y me despidió cordialmente dándome las buenas noches; evidentemente yo también le hablé en gallego, no sólo por cortesía.

25 septiembre 2007

Pedro Armas y la caldereta de cordero

Los ceses de los cargos públicos hace mucho tiempo que no son lo que eran, las dimisiones ya no se disfrazan tanto, sigue habiendo amplio uso de eufemismos, pero ya no hay motoristas como los franquistas y los de la primera transición.

La semana pasada comentábamos la caída de Antonio Losada en Vicepresidencia y hoy comprobamos que empieza lo que se dio en llamar cambio de cromos, es decir, me tumbasteis a un nacionalista de pro y ahora os vais a enterar de lo que es bueno.

Detrás de Pedro Armas andaba toda la derecha; era lo normal, desde el breve episodio del tripartito, el puesto había estado ocupado por el sector de la inspección educativa más inclinado a la derecha gobernante. Era lógico desde la posición ideológica dominante, pero no era tan lógico que considerasen que la responsabilidad de la Delegación Provincial tuviese que ser parte de su feudo y con derecho de pernada ¿Tenían que consentir a un ajeno al Cuerpo en ese puesto? El ex delegado cayó mal y parece ser que toreó como pudo.

Seguramente también podría esperar que los sectores más recalcitrantemente sectarios de la derecha que representa la patronal de la enseñanza privada no le fueran a consentir que controlase la admisión de alumnos en centros sostenidos con fondos públicos ni que pusiese coto a los privilegios de los burguesitos coruñeses de toda la vida y sus colegios de pedrigrí vaticano. Trataron de hacerle la vida imposible el curso pasado, pero aguantó el tirón. Harán leña del árbol caído.

Su reto era duro, sabía que primero le darían las bofetadas y después le preguntarían por la solución a los problemas, contaba con el apremio de la comunidad educativa que reclama y reclamará mejores edificios, servicios, dotaciones...Me consta que la mayor parte de los sectores representativos de padres y profesores son conscientes de que para que se haga un colegio, el ayuntamiento correspondiente ha de poner la parcela idónea y la Consellería construir y dotar, que no me vengan ahora desde Sada o Carral ex alcaldes rácanos y corruptos a dar gracias a los dioses por librarse de Armas. Alguien dijo estos días, en conversación privada, que hasta los nazis se rodearon de los mejores técnicos, hacían bien su labor; pero la dirección política era nazi. Salvando las distancias y sin ánimo de ofender, la Consellería de Educación disfruta de buenos técnicos, pero si la dirección política no es lo suficientemente clara y definida, los técnicos se hacen con el poder y a ellos no les votamos. También es víctima de ellos.

Por último, con los nacionalistas hemos topado, pueden apuntársela como una victoria, como políticos y como sindicalistas la hazaña de haber conseguido echarlo de su puesto. Estarán orgullosos. Como siempre, quieren corderitos dóciles aunque no sean de su rebaño. También es cierto que, cuando los pastores se reúnen, suele haber caldereta de cordero. Hubo caldereta. La piel de Pedro Armas se vendió muy barata, no creo que se lo mereciera.

11 septiembre 2007

La TVG y pi

Ya están pensando los mal pensados de siempre que voy a dar la lata con lo del idioma y esas cosas, como siempre. Pues no, esta vez es para felicitar a algún destinatario, no sé su nombre, o sí. Tengo tantas posibilidades de dedicarme a la crítica de televisión como a hacer comentarios periodísticos sobre la temporada en la Ópera de Milán, si me apuran un poco, dedico tanto tiempo a la pequeña pantalla como al deporte; pero aún así me gustan los programas que dan noticias. Es una manía. Quizá por eso piense que, por fin, la Crtvg acaba de lograr alegrarme la pestaña, por fin compruebo que los millones que ha costado su puesta en funcionamiento han dado algún fruto que compense tantos desvelos presupuestarios. Han cabreado a don Antonio Losada. No creo que nadie en la empresa pública quisiese mal a este señor; pero, si alguien contribuyó a su regreso a la vida privada, que le suban el sueldo, por favor. En el organigrama de la autonomía todos sabemos el nombre del número uno, para algo es el presidente; sabemos el nombre del número dos, por algo su cargo empieza por vice; nos puede caber alguna duda -pocas dudas, sean sinceros- sobre la identidad del número tres; pero el dimitido era sin duda el número pi , el 3,1416. Quería marcar de cerca al número tres, hacerle la competencia en el asunto ese de las competencias y su magia no llegaba. Y digo magia porque todos le llamaban Mago, pero sus prácticas eran más amenazadoras que mágicas. Del número cuatro para abajo todos parecían temerle y no sin motivo: él nunca quiso medios, siempre los quiso enteros y sólo para él, disculpen el chiste tonto y facilón. Si lo que pretendía la parte contratada era la supremacía mediática en el bipartito garantizada por el recién despedido, sabe que cometió un error de bulto y si lo que pretendía era homologar al BNG con sus colegas nacionalistas moderados, pinchó en el mismo hueso de siempre, que las esencias son las esencias. Don Antonio Losada, que seguramente pueda -espero- disfrutar merecida y eternamente de los 15.000 euros que le tocarán de la lotería presupuestaria, trató de presentarse ante la opinión pública como un brillante y joven profesor universitario formado en USA, con experiencia en las empresas de comunicación de ámbito regional, pero resultó ser un bluf aupado por los mandarines radiofónicos madrileños -hay que reconocer que tiene pegada- que en cuanto se puso a gobernar le salió lo bruto, la bestia que todos llevamos dentro y dominamos a duras penas, y creyó que el presupuesto, los rótulos, la imagen de vicepresidente, los mandilones, el himno y las múltiples fronteras de Galicia eran su responsabilidad y estaban bajo su custodia. Hacer de negro y escribirle los discursos al jefe de los nacionalistas es fácil, pero una vez que tienes firma en DOG, hay que pensárselo dos veces antes de echar la lengua a paseo y, sobre todo, has de tener contenta a tu tropa y tranquila a la aliada

04 septiembre 2007

In vino veritas: `Oliñas veñen´

El clarete llegaba a casa en un garrafón de cristal con aquel revestimiento de mimbre, o lo que fuere, con sus dos asas que dejaban las manos en carne viva. Era de uva, sí de uva, seguramente de Cacabelos. También había el blanco de Castilla y el Ribeiro, pero sólo de .La Cosechera. En las fiestas familiares acompañaba al cocido, los callos, la carne asada o el bacalao con coliflor. La euforia era mayor para los abuelos por tener al clan reunido, hasta los más chiquillos estaban convidados a la mesa común de la que iban y venían las mujeres de la casa perola va, fuente viene; sin apenas tiempo para disfrutar del plato. La excepción eran aquellas más pillas que siempre ocupaban banquillo en un lugar inaccesible y les resultaba imposible llegar a los fogones y fregaderos, pero sí estaban cerca de las tajadas a repartir -los hombres primero, según edad y jerarquía- y desgraciada la última que se quedaba sin aquel tocino entreverado que tanto le gustaba. Se aprendía mucho observando, sigue siendo así. Apenas había conversación sustancial, las alabanzas a las viandas y los recuerdos de las hambres pasadas en la posguerra, si acaso alguna referencia a los ausentes, a lo que habrían disfrutado estando allí. Si a alguno en ese momento le ponen un gran plato cuadrado con medio toro de abadejo, rodeado de hierba o de algas con un chorrito de Pedro Ximénez haciendo dibujitos sobre una gran superficie vacía de proteínas, monta un pollo que se enteran en el obispado. No hay copitas apropiadas para catar, pero los vasos se rellenan sin contemplaciones. Los dulces de sartén salen recién hechos y con ellos aparece el café, la botella de Fundador, las guindas y comienza la fiesta de patrón, de Navidad o de lo que tocase en su momento. Hay que aprovechar para contarse cosas, para fardar aunque fuere de farol y empiezan las discusiones, piques y rivalidades. En ese momento algún hombre de respeto manda traer una pota, la caña, el azúcar... se prepara la queimada, sin conjuros absurdos, no había cacharros de Buño, se apaga la luz, las llamas azules se escancian, dejan pasmados a los críos y se olvidan las rencillas. Las cuerdas vocales están a punto y la vergüenza aparcada hace rato. Sé que se daban casos de empezar por el tango, pero era mayoritario el bolero, Si tú me dices ven lo dejo todo, Reloj no marques las horas... flamenco había poco, pero aquella de Maite, Maitechu mía nunca fallaba y a varias voces. País, lo que se dice país, se hacía ¡cómo que no!, ¡Ay Pepiño adiós, ay Pepino por Dios no te vayas!, A Virxe de Guadalupe cando vai pola ribeira, y todas las que forman parte de su recuerdo. Todo esto me choca con lo que cuenta el vicepresidente Quintana, nos dice que entre sus recuerdos de infancia está cantar Os pinos en las navidades familiares, la verdad no sé cuáles son sus raíces, no pongo en duda que en los ambientes de represaliados nacionalistas se añorase esa letra, seguramente la pequeña burguesía ilustrada nacionalista conociese los poemas del Romanticismo pondaliano, pero yo oía de crío el Oliñas veñen. www.lafelizgobernacion.blogspot.com

28 agosto 2007

Polémicas de agosto: himnos y áreas metropolitanas

Dejamos el martes pasado la pluma en ristre defendiéndonos de las agresiones del sectarismo de todos los días que toca poder y trata de que nos comportemos como delincuentes convictos y confesos por culpa de una ele de más o de menos. Menos mal que nos quedan ediles dignos, aunque nos enteremos tarde de sus gestos más o menos testimoniales. Este es el caso del alcalde en funciones que se empeña en pronunciar el topónimo mayoritariamente usado o el del concejal que asiste a la toma de posesión luciendo corbata de luto. Todo esto podría ser delito.

Pero polemizar no ha de ser delito, para ello comprueben que descolocados los ha dejado a todos el conselleiro Méndez Romeu resucitando la Cuidad de las Rías, desde Bergantiños a Ortegal; curiosas están siendo las reacciones, desde la del que se ve sin poltrona y sin razón de ser como ente provincial a la de quien se ve como alcalde metropolitano, ombligo geográfico y comercial de la nueva área. Es curioso ver cómo lo primero es ver si encajo en el nuevo puzzle y después ya se hablará de puentes, de trenes de cercanías, de billete metropolitano, de cesión de competencias municipales y provinciales, incluso de la lógica desaparición, por profundo anacronismo de determinados ayuntamientos y diputaciones.

Les apuesto algo a que el problema mayor será el nombre del engendro en cuestión y la lengua en la que se escriba, seguiremos pasando la vida traduciendo letreros al gallego.

En la otra orilla encuentren ustedes el récord de las declaraciones vacías que, sin duda baten Fraga y Quintana, el primero se enorgullece una vez más de todas las fechorías del franquismo y de su colaboración en las mismas; resumiéndolo todo en la imagen del ciervo abatido, de múltiples cuernos de múltiples puntas... que todo forma parte de su sentido cristiano de las cosas.

El segundo oculta su inoperancia política con la Ley de Dependencia -una perita en dulce por la que matarían gestores eficaces- centrando sus prioridades en que los niños de los mandilones de las galescolas aprendan quiénes somos los ignorantes, los fieros y duros, los imbéciles y oscuros que no le entendemos.

Mientras tanto tenemos otras polémicas con las que entretenernos, son delictivas, pero nadie lo sabe; es el caso del pinchazo de las burbujas inmobiliarias y financieras de chiringuito montadas por los liberales estadounidenses, que están dejando como la barriga de Carpanta las reservas de los bancos centrales del mundo liberal y aún nadie nos ha explicado qué repercusiones tendrá en los euríbores de nuestros pecados.

Tampoco han de preocuparse de que nuestros industriales de las eléctricas, con sus fantásticos monopolios de falsete, no dejen de repartir dividendos a costa de dejar sin suministro a sus paganos usuarios y que sean las autoridades públicas las que pongan la cara para que se la partan los nacionalistas catalanes, insaciables ellos por definición.

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21 agosto 2007

Denso agosto de traducciones

Nos está cayendo un agosto movidito, aquí parece que no descansa ni el gato e incluso parece, que desde los lugares de descanso se aprovecha el tiempo, el poco tiempo que queda hasta la campaña de las elecciones generales sin haberse recuperado aún de la resaca de las municipales, para lanzar las andanadas correspondientes.

Hoy que tendríamos que estar ocupados comentando las peripecias del chaval francés al que quieren empapelar por tener una muy buena traducción pirata del último Harry Potter, apenas podemos lamentarnos de una sociedad que persigue la difusión cultural y denuncia reivindicando el lucro cesante causado por el jovenzuelo de habilidades precoces.

Que alguien les explique a los jóvenes traductores piratas que sus delitos de lesa patria por traición mercantil son terriblemente mayores que el vandalismo pandillero, que la quema de coches en las noches de protesta. Porque lo suyo no es una cuestión lingüística superficial, es el torpedear a la todopoderosa editorial Gallimard en la línea de flotación. Hay que callarlo a toda costa y ponerle puertas al campo de internet. Ilusos. La versión castellana que circula por mi casa estos días, es muy correcta. Seguramente también somos delincuentes peligrosos. Como los de las portadas de El jueves, carne de secuestro judicial. ¡Traduzca usted algo, hombre¡

Por otra parte también me entero de que ha habido intentos o consumaciones de traducción del puesto de trabajo del responsable de los museos científicos coruñeses, que su renombre internacional en todos los idiomas no es suficiente aval para la concejalía de cultura coruñesa de la que han tomado posesión recientemente los nacionalistas. Supongo que le habrán rebajado el sueldo y su lugar en el escalafón; pero nada habrán podido hacer con su prestigio.

El colmo parece que ha sido el amago de traducción de la Casa de las Ciencias, parece ser que se conforman con suprimir la preposición y el artículo y conservar los dos sustantivos, algo es algo; no les tachen de radicalismo localista.

Parece ser que también hubo un intento de traducir los contenidos de las interpretaciones de la Sinfónica, que salen muy caras. Ahí sí que me pierdo, puesto que mi incultura musical roza lo vergonzoso. Dejar de tocar las polonesas de Chopin a cambio de negras sombras, me deja sin sentido, es romanticismo puro y duro en ambos casos, es nacionalismo puro y duro en ambos casos, es elitismo en ambos casos.

Supongo que también les habrían llegado a los oídos las mismas guerras de banderas de todos los años en el País Vasco y las mismas banderías de rácana negociación con los catalanes. No es que sean serpientes de verano, son las mismas víboras, áspides, boas y cascabeles que buscan presa aprovechando el cambio climático del que habla aquel despistado: frío en el norte y calor en el sur.

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14 agosto 2007

Dándole vueltas a la función de la escuela (y IV)

La semana pasada ya teníamos en el candelero a todo el colectivo docente, pero hurgando en el problema, también habrá que poner en la picota a sus formadores y, sobre todo, el sistema universitario que se ocupa de dotar de profesionales a las escuelas y los institutos.

No sólo los talluditos, sino también -lo creo sinceramente- muchos jóvenes profesionales han pasado por un sistema academicista sin compasión, que sirve para nada más que para reproducir esquemas obsoletos ya en el momento de su inicial formulación y que para el alumnado destinatario del mismo también son absolutamente inútiles.

Pocos habrán disfrutado del otro extremo, el absolutamente practicista, consistente en sumergir al futuro docente en su futuro medio ambiente, así sin red y sin seguro a todo riesgo.

No sé si existe el punto medio, justo entre ambas vías; hay quien piensa en que maestros y pedagogos recién formados salen de las facultades pletóricos, repletos de pensamiento progresista, bien elaborado; pero que se desvanece a las primeras de cambio en los primeros años de la vida profesional. La razón de este fracaso es fácil de buscar y de encontrar: ante la falta de referentes reales, de pasamanos en los que apoyarse, el novicio tira por el camino más fácil, que normalmente no es el correcto, pero es el único que conoce de primera mano: es el que sufrió y, con seguridad, es el que tiene más cerca entre sus colegas. Todos los proyectos que trae en su mochila se desmoronan y se sumerge en la práctica tradicional reaccionaria y memorística.

Empezando a concluir diremos que ha de fomentarse el papel del profesor como investigador sobre su propia actividad, sólo de esa forma detectará los límites de su práctica, los impedimentos que dificultan su labor de generar nuevo conocimiento.

Pero este profesor-investigador ha de ser autónomo. Sí, se habla mucho de la libertad de cátedra y de varias zarandajas más, pero a la hora de la verdad en las aulas nos encontramos con currículos cerrados, con lo que los profesores se abandonan en manos de las editoriales y sus libros, tan apañados ellos.

Pero no está todo perdido, hay posibilidades de formación permanente de los docentes, siempre que sea voluntaria, vinculada a la práctica real y a sus necesidades, que tenga como referente un contexto concreto y singular, que se haga en equipo, de forma flexible...

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07 agosto 2007

Dándole vueltas a la función de la escuela (III)

El martes pasado dejamos el hilo empezando a hablar de la necesidad de otra formación del profesorado, como consecuencia de la nueva escuela y de sus nuevas necesidades.

A propósito de esto, puede ser que hayan leído en la prensa nacional la carta de una profesora de instituto que confesaba no haber conseguido a lo largo de una dilatada carrera profesional explicar a sus alumnos de bachillerato ni el veinte por ciento de sus conocimientos.

Menos mal, pensé con bastante maldad, porque si seguimos este esquema el profesor de educación infantil va sobrado si sabe sumar y silabear con faltas de ortografía, que sus alumnos de tres años poco más le exigirán.

Seguramente la profesora sea una erudita en su disciplina y sus alumnos salgan ganando, puesto que se habrán librado de una tortura innecesaria. Sin duda en su caso hay una sólida formación científica, no sabemos si actualizada o no, aplicable en muchos campos, pero seguramente poco útil por si sola en la educación de adolescentes.

Esta es una actividad compleja que exige continua evolución por tres razones de Perogrullo, las ciencias avanzan que es una barbaridad, la sociedad cambia a pasos agigantados y la metodología, los recursos educativos se trasforman y evolucionan sin tregua.

Teniendo presente este panorama no podemos decir que el profesional de la educación no deba tener una sólida formación científica, pero lo importante es que no sea sólo una formación inicial, de poco sirve captar para la escuela los mejores expedientes académicos de los recién graduados en la universidad, si no tenemos la garantía de que serán capaces de seguir siendo líderes activos en su área de conocimiento. Aunque no se lo crean hay quien sigue enseñando a los cincuenta años lo mismo que aprendió a los veinte. Ese no se enteró de que no sólo debe ser un profesional de sus ciencias o sus artes sino que también debe ser poseedor de los instrumentos que las adaptan a la realidad para que puedan ser asimiladas por las generaciones a las que educa, es decir, para generar conocimiento.

La realidad que padecemos nos indica lamentablemente que un alto porcentaje de profesores acude a la enseñanza rebotado de otras profesiones, sobre todo los que se han titulado en ciencias experimentales, es decir, que entre que no sabes hacer y que no te gusta lo que tienes que hacer, el fracaso está garantizado. Después se le llamará fracaso escolar y se dirá que los niños no estudian.

02 agosto 2007

Dándole vueltas a la función de la escuela (II)

Hablábamos la semana pasada de los factores que influyen en los cambios sociales y, por lo tanto de los cambios en la escuela, detengámonos unos momentos en nuestros alumnos de hoy.

Pensemos en las fuentes de información que llegan al niño de forma fragmentada y desordenada que hacen que el chaval se vea desde muy pequeño realmente abrumado e incapaz de asimilar los estímulos exteriores. Y que conste que no estamos sólo hablando de las horas de pantalla televisiva, informática... que consume el chaval. Esa escuela y esa familia que antes formaban ciudadanos, que reproducían simplemente un esquema conocido desde antaño: Yo pertenezco a una familia de papá y mamá, estudio para ser un hombre de provecho, lo seré con seguridad, como todos y también formaré una familia antes de los 25, como todos.

Este esquema está dejando de existir a pasos agigantados por mucho que se empeñen los conservadores y sus liturgias. ¿Hay que lamentarse? Seguramente de algo sí, aquel modelo económico garantizaba más la igualdad de oportunidades del ciudadano, de sus derechos y deberes.

Hoy ese ciudadano se está transformando en un mero consumidor, en un cliente. Los neoconservadores han conseguido imponer cada vez con más insistencia la famosa libertad de elección, lógicamente sólo patrimonio de aquellos que se lo pueden pagar.

Por eso seguramente la Educación para la Ciudadanía llegue demasiado tarde, cuando ya no queden ciudadanos que educar y lo que haya que hacer sea compensar su contenido con la educación del consumidor, de su autodefensa frente a la mundialización.

Es decir o la escuela se pone las pilas para conseguir el desarrollo autónomo del sujeto, que se plantee y consiga la construcción de su aprendizaje autónomo o se convertirá en algo inútil de solemnidad. Es aquí cuando nos tenemos que detener, con calma y repensar -como se dice ahora- la función del docente, su finalidad como interventor para provocar y facilitar el aprendizaje, lo que será relevante en el futuro de sus alumnos.

El modelo de escuela que hoy conocemos nace en la España de los setenta y aparece como una revolución frente al escolasticismo dominante. La formación del profesorado se adaptó a las necesidades de la escuela y de la sociedad cambiante del momento, hubo un relevo generacional en los enseñantes. Cumplió su objetivo.

Treinta años después nos encontramos con un panorama completamente distinto, el que acabamos de esbozar y aquella generación de profesores ya no puede dar cuenta de la nueva labor que se le presenta, su formación no es la adecuada, sus mecanismos de trabajo tampoco, por lo tanto urge recomponer el sistema desde la base.

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24 julio 2007

Dándole vueltas a la función de la escuela (I)

Se han revuelto los ánimos de ciertos lectores con lo dicho aquí el martes pasado, sobre los salarios de los profesores, que si qué va a ser eso de que todos no cobren lo mismo... Ni que decir tiene que mantengo el mismo criterio, sin no hay igual trabajo no ha de haber igual salario y, ya puestos a meter el dedo en el ojo, comprobemos cómo se hace lo que se está haciendo, si se está haciendo bien y quien debe cambiar el modo de hacer las cosas, así, en general. que ya son legión los que dicen que ya está bien de lamentarse por las esquinas. No sólo los profesores, sino todo bicho viviente tienen que opinar sobre lo mal que van las cosas de la escuela. A lo mejor vale la pena dedicarle unas jornadas veraniegas y recalentarse un poco las neuronas reflexionando sobre lo que significa hoy aprender y enseñar. Si partimos de la base de que las sociedades tradicionales han pasado a mejor vida, que las nuevas formas de organización son más inestables, nos daremos cuenta en el momento de que la situación de superioridad del antiguo enseñante no es la misma, no es suficiente para conseguir el predominio del profesorado sobre el alumnado y comprobaremos sobre la marcha la inoperancia y la inutilidad de los sistemas educativos como mecanismos para compensar las desigualdades de origen, que es para lo que nacieron y para lo que sirvieron hasta ahora. El proceso educativo está puesto en cuestión a cada momento por sus mismos destinatarios que no se ven allí preparados para nada importante ni útil. El profesor justifica su salario sacudiendo estopa culterana ante sus presuntos discípulos y éstos, en el mejor de los casos hacen que aprenden para tenerlos contentos. Este cambio del que hablamos está asociado a otros de más calado. Por ejemplo, seguimos pensando que el valor y el papel de la familia ha de ser y seguir siendo el mismo que hace décadas. Podemos seguir diciendo años y años que lo blanco es negro, pero estos haciéndonos trampa. Trampas que no sólo vienen de los dos argumentos manidos y sobados hasta la saciedad: la incorporación de la mujer el mercado de trabajo y la importancia de los medios de comunicación, pero por sí solos no condicionan las virtudes o los fracasos de los sistemas.

20 julio 2007

La ministra de Educación suspende y le quedan pendientes para septiembre

Pues es cierto que la ministra de Educación ha dejado tarea sin hacer este mes de julio y aún así el presidente Zapatero renueva su confianza en ella y conserva la .Cartera. Pero pongamos en antecedentes a los ajenos al mundo educativo, el MEC desde hace muchos, muchísimos años tiene pendiente la elaboración de un Estatuto Docente, es decir, algo así como una recopilación de todas las normas laborales que gobiernan la vida del profesional del profesor desde que comienza su carrera hasta que se jubila, sus promociones, sus perspectivas de mejora, su reconocimiento social... algo que ocurre en cualquier empresa. Pero aquí no, aquí siempre se premió el sedentarismo, el falso igualitarismo como condiciones intrínsecas del funcionario. El pasado 18 de abril parecía que se abría una puerta tras la que había algo de luz, el MEC presentaba borrador y en él incluía cuatro puntos que dejaban entrever un futuro prometedor; en algún caso no era más que pagar una pequeña cuenta pendiente; desde hace dos años el MEC debe unos míseros euros de un complemento a todo el profesorado, reconoce la deuda, pero no la paga. Más importante todavía en la regulación de la jubilación anticipada a partir de los 60 años, sé que la medida no tiene que ser muy popular, que hay profesiones que también desgastan mucho física e intelectualmente. Los profesores pueden acogerse a ella desde el año 90, más o menos, pero nadie sabe cuándo se acabará la posibilidad, lo que le piden al MEC es saber que se tiene esa perspectiva y llegado el momento se podrá utilizar o no dependiendo de las condiciones en las que se encuentre el interesado. Pero lo más relevante desde el punto de vista social y profesional es todo lo referente a la promoción y a la carrera profesional. Fíjense ustedes un maestro, puede cursar una licenciatura, un doctorado, los máster que le dé la gana, que a la administración le importa un rábano, si quiere enseñar en niveles superiores, para los que está capacitado académicamente que se busque la vida de otra forma que la administración no reconocerá su esfuerzo. Y no digamos nada de un profesor de instituto que haya hecho acopio suficiente para brindar su experiencia a la Universidad, a ese más le vale que se apunte a Operación Triunfo. Seguro que usted también conoce a profesores que echan en su trabajo más horas que el reloj, que organizan semanas culturales y científicas, que llevan a sus alumnos a museos, conciertos, viajes... que ponen a funcionar páginas web, bibliotecas... y todo por amor al arte, a la administración le importa un comino premiar, facilitar, reconocer, recompensarles -económicamente, sí, sin tapujos- mediante un sistema de acreditaciones de méritos objetivos, evaluables y accesibles para todos que significasen que el docente mejorase profesionalmente y el sistema educativo recibiese los beneficios de esta dedicación exclusiva e intensiva. Esperemos que en septiembre la ministra tenga las tareas hechas y en uno de esos golpes de efecto que tanto gustan a su jefe, nos sorprenda y no busque conflictos que nadie quiere.

10 julio 2007

Veinte minutos de gloria

Recuerdo el revuelo que se armó cuando Jorge Semprúm aceptó la cartera de Cultura en un gobierno de González, no era un político sino un intelectual de prestigio con pasado activista, se le negó el pan y la sal. Algo que no recuerdo ocurriese cuando Jack Lang aceptó la misma cartera en un gobierno francés. Es cierto que alguien puede decir que la profesión del servidor público está desprestigiada, pero también lo está la de periodista, la de juez o la de profesor, por razones ajenas al comportamiento de la mayoría. No sé qué impulsos pueden provocar la demonización de Bernat Soria por aceptar su puesto en Sanidad, ya le están llamando asesino en ciertos medios. Es cierto que destaca en el mundo profesional, en la investigación; pero también en la gestión, puesto que tuvo que buscarse la vida cuando la caverna ideológica vetó sus investigaciones con las células madre embrionarias y tuvo que irse a Singapur o cuando tuvo que regresar y fue desahuciado en Valencia y aceptado en Andalucía. Si eso no son avatares políticos, que me pellizquen, que no lo entiendo. Si este señor tiene cuatro buenas ideas para mejorar la política sanitaria en España, que se le dé una oportunidad, capacidad de gestión le queda muy poca, que los conselleiros de turno son los que mandan. Si además eso sirve para mejorar la imagen de Zapatero y él se lo cree, es su problema; pero quiero defender con cabezonería que nada hay más honrado que un buen profesional ponga su capacidad de trabajo al servicio de sus vecinos como concejal del pueblo más remoto o como ministro del gobierno de su país. Después llegan las acusaciones de vanidad, de afán de conseguir los veinte minutos de gloria, de pasar a la posteridad; pero eso nos pasa a todos y tenemos derecho a ejercerlo y no necesariamente secuestrando al director de una oficina bancaria para salir en los papeles. La mayoría se conforma cuando es capaz de relatar un gesto de valentía o de simple desinhibición; colma su autoestima una simple aventurilla en la mili y sirve a muchos para tener tema de conversación en todas las nochebuenas y fiestas de guardar. La sociedad española maltratará a Bernat Soria y a todo aquel que se atreva a dar el paso de ese Rubicón que es el servicio público. Aquí estamos acostumbrados al intelectual puro y casto, al científico tan neutral que vota con guantes de quirófano, que cuando se aventura a la gestión publica se le tacha de mediocre, vendido y a saber lo que estará buscando. Por favor, un poco de seriedad; es cierto que un partido puede buscar nombres de éxito en el mundo científico y cultural para reforzar su mensaje electoral, unos encuentran a Normal Duval y otros al que dedica su esfuerzo y sus ansias para ver mejorada la calidad de vida de los diabéticos de todo el mundo. A pesar de los obispos.

03 julio 2007

Del sentido común

Omuy despistado estuve últimamente o muy poquita importancia se le dio en los medios a la actuación del diputado nacionalista en las Cortes españolas y representante de su grupo en la Comisión de Defensa que entendía del proyecto de Ley de la Carrera Militar, el señor Rodríguez Sánchez, don Francisco. Pues bien, la postura de este parlamentario me ha sorprendido gratamente. Yo, que esperaba un gran alegato contra los ejércitos opresores sobre Galicia

-siempre una colonia española para el señor Rodríguez- me encuentro con que su apoyo es prácticamente incondicional, excepto en un matiz que después comentaré. El resto del abanico parlamentario discrepó por diferentes razones: los populares, porque sí, IU, por sus planteamientos pacifistas y el resto de los nacionalistas -vascos, canarios, catalanes...-, porque no recibieron nada a cambio, como siempre.

El voto de los nacionalistas gallegos me deja en un sinvivir y ya no sé si es que el modelo de ejército español ha cambiado tanto que no lo conoce ni la madre que lo parió o que los nacionalistas gallegos se han convertido a la socialdemocracia atlantista más blandengue y melosa de todo el continente. Los de siempre, tan malpensados como siempre, me dicen que nada de nada, que todo tiene que ver con los pactos de las municipales, con los futuros presupuestos y con el encanto personal del presidente del Gobierno.

No sé qué pensar, quizá lo único que ocurre es que el último de los coroneles de la UPG no tiene quien le escriba o que sufrió un ataque de sentido común. Pese a todo, genio y figura, hasta en su enmienda rechazada que pretendía sustituir Nación por Estado, para referirse a España. Problema de gran calado, sobre todo para un lingüista como don Francisco.

Cambiando de tema, pero sin brusquedades, observen con qué naturalidad evolucionó el decreto que regula la enseñanza del gallego desde mis comentarios del martes pasado. Después del tirón de orejas del Consello Consultivo de la Xunta, el viernes vio la luz en el DOG con la complicidad de medio PSOE y la oposición del otro medio y del PP. Es cierto que el decreto incorpora algunas modificaciones, pero la sustancia es la misma y ante ella no puedo dejar de manifestar dos opiniones. La primera tiene que ver con la postura del PP, camaleón lingüístico donde los haya, que desarrolló bajo su égida la ley de normalización, consensuó con la oposición todo cuanto decreto, norma o instrucción versó sobre el tema y ahora que ve las urnas pelar, pone las suyas a remojar; pero a mí no me la da.

La otra, lógicamente es más optimista, tiene que ver con la misma realidad que se percibe después de muchos años de viejo conocimiento del sentido común de la mayoría del profesorado gallego, que siempre ha sabido donde estaba, a la altura de las circunstancias, que siempre ha sabido hacerse entender, en gallego, en castellano y por señas y seguirá haciéndolo mientras no le toquen más las narices. Los modelos excluyentes vasco-catalanes lo tienen difícil por estos lares. Aquí siempre pesa más el BCB (bueno, carallo, bueno) del profesor Moralejo.

26 junio 2007

Pasado y futuro de las lenguas

Recordad lo del caballo, se le puede obligar a ir a la fuente, pero es imposible obligarle a beber. De mutuo acuerdo las tres fuerzas políticas apoyaron sin dudar el Decreto que regulará el uso del gallego en la enseñanza. Sí, ya sé que aquí se comentó ya, pero es que hay novedades desde entonces. Una de ellas es que el Consello Consultivo de la Xunta ha hablado y le ha dado un revolcón, dejando en entredicho la legalidad del tal proyecto que prescribía lindezas disciplinarias contra los agentes o los pacientes de la enseñanza que no lo acatasen sin rechistar. A continuación habrán observado los gritos de rigor de los capitostes de la Mesa de Normalización, que si el Consello Consultivo es un residuo de Fraga -cuando sus letrados lo son por oposición-, de que todos sus dictámenes son puramente informativos, sin ánimo de lucro y además son incómodos y no están axeitados a la realidad del país. Viene esto a cuento porque estos días cayeron en mis manos dos escritos muy divergentes, uno de ellos es el artículo del profesor Monteagudo: Existe o dereito de ignorar o idioma galego? (El País 15 de junio). Aquí el sociolingüista de pro, no sólo se limita a reponer negro sobre blanco lo tópicos más manidos sobre las opresiones pasadas, que nadie pone en cuestión, sino que avanza describiendo las presentes, que alguna habrá -no lo dudo- pero que son escasas y, además, destaca como indefectiblemente venideros los males futuros sobre la lengua propia del país. Para conjurar pasado, paliar presente y evitar futuro, propone y "esixe unha presenza maciza do galego no sistema educativo", incluso se podrían hacer chistes a cargo de la expresión, pero allá cada cual. Evidentemente el autor no hace más que una pregunta retórica, su respuesta está clara, no existe este derecho y el que no lo entienda así lleva a Galicia a la desfeita tal y como hacen los que conspiran contra el país. No sé muy bien dónde están las quintacolumnas espías, al margen de alguna recogida de firmas testimonial, más bien el pueblo soberano ejerce como tal y punto. Por otro lado el libro que quiero recordarles es del reconocido y admirado periodista Alex Grijelmo, Defensa apasionada del idioma español, un ensayo ya consolidado casi como manual de referencia, que en su momento causó cierto revuelo y sensación. Creo que se reedita con frecuencia, que no es mala señal. Los ignorantes y mal pensados estarán cavilando sobra las maldades de la obra que tanto gusta a este jacobino arriba firmante, pero no se trata de ningún panfleto concebido por la FAES, sino la obra de un trabajador de la lengua que se preocupa de su mal uso, partiendo siempre de la base de que, como dice textualmente su autor: "El lenguaje representa lo más democrático que la civilización humana se ha dado. Hablamos como el pueblo ha querido que hablemos. Las lenguas han evolucionado por decisión de sus propios dueños, sin interferencias unilaterales de los poderes; aún más: en un principio han impuesto los pueblos su lengua a los poderes". No sé si servirá de reflexión para saber qué son derechos y deberes, individuales y colectivos, pero se puede intentar.

19 junio 2007

Algo más sobre el 77

Nos estamos llenando las legañas mañaneras de pastosos aniversarios de las elecciones del 77, ciertamente importantes; pero tiene que haber balances para todo y si hay que lamentarse de algún déficit, pues se hace, que no pasa nada. Por lo tanto hay que recordar que se celebraron sin la legalización de todos los partidos, que estaban tuteladas por todos los poderes -se empezaban a llamar fácticos y nadie sabía muy bien qué era aquello- del franquismo. También recordamos que no había habido elecciones locales y los ayuntamientos grandes y pequeños seguían en las mismas manos de los mismos de siempre controlando el cotarrro. Todo fue muy rico y muy abundante, su recuerdo me trae sensaciones contradictorias, el haber participado en la campaña electoral en el sur de Orense, en los pueblos cercanos a la frontera -Lobios, Entrimo, Bande-; en un Dianne 6 con un altavoz en la baca a la salida de misa y a los paisanos mirándonos con cara de pocos amigos o quizá pensando que los marcianos barbudos ya estaban invadiendo sus reductos dedicados al contrabando de menudillo. A todo esto sin poder votar porque nos faltaban unos meses para tener los preconstitucionales 21 años preceptivos. Lo que tenías en la cabeza en ese momento era que la amnistía política que esperabas había empezado a aplicarse en el julio anterior y se completaba en marzo y mayo del 77 -apenas hacía un mes-. Todo hijo de vecino sabía quién las ganaría o, por lo menos, quién no podría ganarlas. El temido TOP, el Tribunal de Orden Público, había sido disuelto seis meses antes, el derecho de huelga asomaba la cabeza tres meses antes y la libertad de sindicación llevaba sesenta días de nada en vigor. ¡Cómo para creerse que aquello iba en serio! Íbamos al trágala convencidos, pero lo hacíamos sabiendo que había otros que también estaban digiriendo lo suyo; era el único consuelo saber que las úlceras ideológicas sangraban. Es cierto que nos estaban vendiendo que el régimen estaba haciéndose el harakiri con la Ley de Reforma Política, pero no es menos cierto que lo hicieron por su propio interés, siempre con la intención de cambiar un poco para que nada cambiase. Habrá quien diga que el esfuerzo reconciliador fue impagable y que las cosas no salieron como a don Manuel le hubiese gustado, pero escuchar hoy a sus supervivientes y herederos deja claro que tienen el convencimiento profundo de que ganaron y lo hicieron de calle. También han de saber que no me estaba reconciliando con ellos sino con sus víctimas, con los que tenían que saltarles al cuello con afán de venganza y había que sosegarles la víscera. En épocas de memoria histórica es realmente ultrajante que se den espectáculos como el de la negativa de la Sala de lo Militar del Tribunal Supremo a revisar el garrote vil que asesinó a Salvador Puig Antich, gracias al voto de dos jueces, ex generales. Siempre hay un par de generales para todo. La democracia no es sólo formas, pero sin formas no hay democracia y para muestra el botón del candidato de la derecha en Santiago que lo único que puede decir de la ministra de Fomento es llamarle marimacho.

16 junio 2007

Más maestros y más calidad de la enseñanza

El horario de los colegios está en el candelero desde hace tiempo, periódicamente salen a la luz las virtudes y las maldades de la jornada continua, la necesidad de extender la red de comedores escolares, que estos sirvan ya los desayunos y que, por lo tanto, los niños sean atendidos desde más temprano. La extensión de las actividades extraescolares por las tardes, los campamentos urbanos en periodos vacacionales, etc. En resumen y, como no podría ser de otra forma, los edificios públicos dan más y mejor servicio a la Comunidad Escolar en la que se integran. Ni que decir tiene que ninguna de estas medidas ha dejado de ser motivo de discusión entre le colectivo docente y entre los padres afectados. El servicio que se reportaba a unos siempre trajo como consecuencia ciertas responsabilidades añadidas, sobre todo, para los equipos directivos de los colegios. Que la escuela siempre fue guardería nadie lo discute; evidentemente, siempre fue algo más importante, pero el componente asistencial siempre estuvo presente tanto en núcleos rurales muy aislados como las antiguas Escuelas Hogar como en los barrios de las ciudades con salarios precarios.

Como no podía ser de otra forma, fueron surgiendo colectivos profesionales nuevos en los colegios, cuidadores de comedor, monitores deportivos, animadores..., pero se seguía manteniendo la uniformidad del horario del profesorado con el de las horas lectivas de los niños, es decir, el profesorado trabajaba 25 horas (más cinco para otras actividades), las mismas que los alumnos recibían de clase. Puede seguir diciéndose que eran pocas horas, pero hay que estar allí para saber lo que es.

Era una reivindicación muy antigua desvincular ambos horarios y se ha conseguido desbloquear casi de carambola.

La Consellería de Educación se descolgó con una propuesta unilateral de modificación de la jornada escolar -por lo tanto también de la jornada laboral de los maestros- en la que ampliaba las horas de escolarización en junio y en septiembre. El nefasto sindicalismo nacionalista en la enseñanza convocó inmediatamente huelga, ya comentada desde estas líneas, para conseguir nada. Mientras tanto, la Administración no tuvo más remedio que acceder a firmar un Acuerdo con el sindicalismo responsable el 30 de abril, en él se paliaban los efectos del desaguisado, restaurando la jornada de mañana con comedor y abriendo cauces negociadores que vieron su frutos inmediatamente, prueba de ello es que en mas del 90 % de los centros desoyeron la llamadas objetoras que propugnaban la desobediencia desde los agoreros nacionalistas.

El viernes se produce la firma de otro Acuerdo cuya negociación ya estaba comprometida desde abril, se trataba de desvincular el horario de apertura de los colegios del horario de trabajo de los maestros. Por fin se racionalizan os catálogos de los centros, se les dota de especialistas suficientes en inglés desde educación infantil, se amplía la plantilla en más de 1.000 maestros, se reduce su jornada laboral... Aquí los del NON tuvieron que decir que sí, que ya pasaron las municipales.

05 junio 2007

La adolescente objetora

Continúa la campaña electoral con varios frentes abiertos, uno de ellos es el de la nueva asignatura, Educación para la Ciudadanía. Sus contenidos están en la LOE y en sus desarrollos, los libros de texto están en las imprentas, están actualizándose los profesores que la impartirán; son expertos en Filosofía, en Sociología, en Derecho, en Historia... es decir, no son catequistas del tres al cuarto que vayan a contar la milonga del diluvio universal, sino que son los mismos profesionales que les enseñan a sus hijos adolescentes qué decía Descartes. Si alguien sospecha que a los profesores los selecciona Pepe Blanco con el fin de que voten a Zapatero, se equivoca.

Un sector social teledirigido por el Foro de la Familia usurpa los derechos de esta menor de edad y se enfrenta al Estado, así con todas sus mayúsculas. Sus padres pueden hacer lo que quieran, recurrir, patalear, con todo su derecho, como lo tenemos todos a reivindicar, a presionar contra leyes que creemos injustas, pero sabiendo que habrá quién crea que son razonables, pero usar a esta chica para estos fines es indigno.

La joven que están utilizando como reclamo para la objeción de conciencia contra la asignatura en cuestión es la más necesitada de un buen baño de los contenidos de la nueva materia. Bajo la consigna de "a mí nadie me come el coco" percibimos que esta adolescente, adolece, carece, como todos sus semejantes de ciertas experiencias, es inmadura, no es su culpa, quizá el Sistema Educativo tendría que haberla dotado de cierto bagaje cultural. Por ejemplo, tendría que haberle explicado las características del diálogo entre las personas, de los argumentos razonados, de la defensa de las opiniones propias con respeto a las de los demás, que la carencia facilita la violencia. Tampoco le vendría mal tener alguna noción del marco jurídico en el que se integra esa convivencia dialogante, no tiene que ser docta en leyes, pero sí saber cuáles son sus derechos y deberes, entre otros los correspondientes a los menores de 18 años. Seguramente también le conviene tener conocimiento del cuidado de las personas dependientes, de sus derechos como mujer, de la distribución de la renta o del papel de los ejércitos en los conflictos internacionales.

En resumen, tendría que haber sido inoculada con los perniciosos e ilegítimos contenidos educativos que el malvado Estado le quiere inculcar en una operación de lobotomía escolar.

Los propios centros católicos concertados ya han cedido en sus reivindicaciones -su tajada habrán sacado- y la impartirán tal y como dice su propio asesor, el filósofo de moda, José Antonio Marina, cuando sentencia: ¿Cómo debe ser el buen ciudadano? Si somos capaces de proporcionarle un marco ético claro y estable para que reconozca y respete la dignidad humana, y para que participe en política de manera responsable y consciente, entonces creo que la iniciativa merecerá nuestro aplauso.

Si el Estado flaquea, podrá venir quien demande que no se explique cómo funciona el cuerpo, qué se oculta tras La Celestina o, lo más peligroso de todo, los números irracionales.

29 mayo 2007

El usted en las aulas

Era una sociedad represora, en las familias, en las calles, en los cuarteles, en las fábricas, en las iglesias, por lo tanto no había más remedio que fabricar sujetos fácilmente reprimibles en las aulas. Puede sonar exagerado, pero puedo contarles la historia de un amigo que hoy es profesional competente y de prestigio en su campo. Compartimos un profesor de español durante el bachillerato -llegó a ser flamante mandarín de una Facultad de Psicología- que para librarle de sus demoníacos males le obligaba a situarse en un extremo de la clase, a acercarse a él, lentamente, hablando, si al llegar a su altura seguía tartamudeando recibía como estímulo una generosa mano de bofetadas. Ni que decir tiene que mi amigo no cambió, que da conferencias, cursos, participa en congresos... a pesar de aquel sujeto al que había que tratar de usted y de cuyo nombre me acuerdo perfectamente, pero no me da la gana de decírselo. En esas épocas nos levantábamos cuando entraba el director, no le apeábamos el tratamiento a nadie, pero tampoco sabíamos el nombre completo de ningún profesor. Tampoco nos hacía mucha falta, con los motes nos apañábamos perfectamente, si los veíamos de lejos por la calle cambiábamos de acera, si teníamos un problema serio el profesor no era un recurso de auxilio ni en las circunstancias más extremas. ¿El tú o el usted era el problema?, estoy convencido de que no tenía nada que ver. Pero parece que la derecha francesa ha descubierto la piedra filosofal para que desaparezca la violencia en la escuela entre los alumnos y entre alumnos y profesores, que todos se traten de usted: "sólo la distancia entre profesores y alumnos puede llevar al respeto" dice Xavier Darcos, nuevo responsable de la educación francesa; mas estén tranquilos los padres de los parvulitos, la norma nos les será aplicable, podrán jugar con la maestra, darle un beso y llorar con ella cuando lo precisen. A partir de los seis años que se preparen, que ya será distinto. No sé mucho del currículo del tal ministro -escribió sobre Merimée, Tácito... y esto no me deja muy tranquilo-, pero no lo veo yo muy seguro de sí mismo, que tenga que reforzar su autoestima con la punta de la pluma de firmar normas, leyes y demás artilugios es por lo menos lamentable y no cabe menos que augurarle un buen fracaso en el país que hizo de la libertad objeto de exportación al mundo civilizado. Yo creo que por estas latitudes caminamos por mejores senderos, sinuosos en ocasiones, pero seguro que dirigidos a mejor meta; la convivencia distante y forzada no es convivencia y en estos momentos si las familias no se dan cuenta de que una adolescente prefiere hablar con su profesora de un embarazo no deseado antes de hacerlo con su madre es que pasa algo raro. Dejo en el aire una pregunta: ¿Qué pasaría si esa adolescente tuviese que tratar de usted a su profesora?

22 mayo 2007

De lenguas y pifias electorales

Hace pocos días se cumplieron cien años de la elección de Benito Pérez Galdós como diputado republicano por Madrid, -ya lo había sido en dos ocasiones anteriores por Puerto Rico- y en plena campaña explica sus razones en la carta que dirige, el 6 de abril de 1907, a Alfredo Vicenti, director del diario El Liberal, adhiriéndose al partido republicano: "Es muy cómodo decir: La política, ¡qué asco!, como pretexto para no intervenir en ella. Es como si una inundación invadiese los sótanos de una casa y los inquilinos del piso principal se subieran al tejado diciendo: ¡Uf, qué agua tan sucia! Yo no quiero mancharme sacándola. Y, entre tanto, el agua fuera reblandeciendo el solar y los cimientos" "Pues yo no he tenido inconveniente en bajar al barro sin miedo a que me manche. El absentismo político es la muerte de los pueblos". En plena efervescencia contra un Maura represor y caciquil escribe: "[de un lado] triste rebaño monárquico, empantanado en el páramo de la oligarquía, en la ruina y el marasmo; de otro, un pueblo, de nuevo en pie, con todo el espíritu de libertad y reivindicación que palpita en nuestra historia desde Viriato hasta Prim". Dejando lo poco extrapolable que es el mensaje y fijándonos sólo en el estilo advertimos que crispación sí había, pero con estilo propio, claridad y calidad lingüística. Poco de eso se despacha en nuestros mítines, lo malo no es que se trufen de coloquialismos y mercadotecnia, que los oradores no sepan quién fue Prim ni qué es un páramo, la oligarquía o un marasmo; lo malo es que no conocen la lengua en la que hablan, están obligados a hablar en un lengua en la que no tienen la mínima competencia para expresarse en privado; el culto a la misma les obliga a usarla en público, artificialmente. El resultado es deplorable. Debe ser en lo único en lo que coincido con la Mesa de Normalización de marras. No sé aún qué norma ideológica les impulsa a expresarse en una lengua que no conocen, que la mitad de su auditorio usa con poca frecuencia. Pero hoy quiero comentarles otro asunto, también electoral, que tiene como escenario la capital del reino en la que se enfrentaron en cruel debate un buen gestor público y político mediocre, con un político advenedizo y desconocido como gestor -Gallardón y Sebastián- . Si los socialistas querían vacunarse del virus del tamallazo de hace cuatro años, lo que han conseguido es contagiarse de la bacteria de la inutilidad mediática y electoral, mezclando al novicio en la alcachofa con un supuesto cómplice del choriceo mediterráneo en una ceremonia de la dispersión montada por el señor Sebastián. No es eso, señor Sebastián, no es eso; si a usted no lo reconoce por la calle ni el gato dedíquese a otra cosa y no a aspirar a la alcaldía de Madrid maniobrando con artes que le alejan de la izquierda. No entendió usted lo que era la política ni lo que era la política de izquierda. Es ajeno a ambas cosas y, por eso mismo, debería ser prudente y tener alguien al lado que le dijese que no todo vale, que actuaciones como las suyas se las dejamos a los de siempre. No le vendría mal un poquito más de aquel Galdós que se ve político "como función elemental del ciudadano y como final de una vida de abnegación, sin más recompensa que el goce que nos produce el cumplimiento del deber".

15 mayo 2007

In-dependencia y cerebros amueblados en Ikea

Pues ya lo vieron clarito en las fotos de todos los periódicos, unos tremendos autobuses con el eslogan que figura más arriba recorrerán Galicia en nombre del Vicepresidente del Buen Rollo vendiendo los beneficios de una Ley aprobada en las Cortes Españolas y que él, como representante del Estado Español en Galicia ha de aplicar por delegación en beneficio de todos los ciudadanos que lo precisen. Pero, claro, hay que sacar tajada de donde se pueda y estos quince días servirán para que los mayores del lugar se enteren de que el cheque asistencial se lo va a proporcionar el benemérito vicepresidente. De paso se cuela de rondón la palabreja de marras, la independencia soñada del país subvencionado. No cesaron ahí los mis asombros, es más, crecieron desmesuradamente hace unos días cuando oí despotricar al personaje que nos ocupa poner de chupa de dómine al director de la RTVG por no haber dado no sé bien que noticia en la que el protagonista era el antedicho proveedor del bienestar. No soy muy asiduo espectador de las televisiones y no sé si el hecho noticiable era de tal trascendencia que la sociedad gallega quedó absolutamente capidisminuida y deficientemente informada de algún problema de Estado de gran importancia por culpa de los informadores de la televisión autonómica, pero me temo que no hubo manifestaciones populares ni invasiones de correos electrónicos bloqueando, sí bloqueando, los servidores de la CRTG. Es más tengo que agradecer y reconocer la rapidez de su director, Benigno Sánchez, a la hora de poner los puntos sobre las jotas al vicepresidente y a su segundo, Antonio Losada, negándoles la competencia para perpetrar coacciones sobre la programación de los contenidos de los informativos. Supongo que no es su deseo estar todos los días en el candelero respondiendo a provocadores, pero espero que se prodigue un poco más y deje de poner la otra mejilla con tanta frecuencia. Y mientras esto escribo no se me sale del magín lo escuchado hace unos días en la Radio Galega, en un programa matinal en el que su conductora mantuvo una larga conversación con otro periodista de la Radio Vasca en la que se habló largo y tendido sobre las candidaturas para las elecciones municipales y forales en las que participaban los defensores del terrorismo. No se cortaron un pelo y casi parecían plañideras por la posible anulación judicial de las mismas si no se ajustaban a derecho; pero no se crean que usaban argumentos de tipo estratégico, como el de que es mejor dentro que fuera, o el de que hay dudas razonables, qué va, fue pura y duramente apología batasuna. Estoy esperando que ese nuestro par de próceres del nacionalismo protesten un poquito. Pero tranquilos, que no pasa nada, que hoy tenemos Correlingua, Bicos con lingua y eventos culturales varios para echar la lengua a paseo. Es una pena que siempre que se compran muebles de oferta sobren o falten tornillos para los ajustes, si llevamos esta reflexión al plano de las ideas y de la actuación pública de ciertos gobernantes, los tornillos y sus ajustes son más imprescindibles que para una simple cajonera. Una pena, pero es lo que hay, por ahora.

08 mayo 2007

Maestros progres en huelga

Ha empezado mayo con bronca de los maestros por una reforma del horario poco hablada y sin consenso. La Consellería de Educación sabe que le crecen los enemigos dentro y fuera de casa, sabe que en su propio entorno nadie le perdona ser el sector que está saliendo de rositas en todos los potenciales conflictos gracias a la responsabilidad de la mayoría sindical, aún así tentó a la suerte y lanzó el órdago modificando el horario escolar en septiembre y junio. El descontento fue grande y el intento de apagar el fuego con un acuerdo sindical mayoritario y respetuoso con los derechos de los profesores no fue suficientemente explicado. Es en este punto donde hay que pararse y reflexionar sobre las consecuencias del conflicto y su contexto, es decir, ¿a quién beneficia? Estamos en pleno periodo de matriculación en los centros públicos y, por supuesto, en los privados concertados. En plena captación de clientela entre las dos redes ¿qué estarán pensando los padres de las criaturas de tres añitos que no saben el horario, pero ya saben qué ropita vestirá su retoño y demás frivolidades por el estilo? Los que duden harán lo más lógico, que les garanticen la paz escolar y los mayores y mejores servicios. Por otro lado, ¿Qué día es? ¿Cuánto falta para el 27 de las municipales? Las respuestas surgen a mares y desde varios sectores. De forma que nos encontramos con una garra -que no sólo pinza- de múltiples uñas. Primero están los que quieren quemar al gobierno desde la leal oposición, es lo lógico, que se prenda fuego en sanidad y educación no le extraña a nadie, porque al electorado le duele. Por otro lado vemos al corporativismo tradicional, a los profesores acostumbrados a lo bueno y a lo malo; pero que sea el de toda la vida, una vida dura en los meses de curso y más aliviada al principio y al final; en ellos se apoya la derecha argumentando además ¿qué pintan los padres en todo esto? Y cuentan con el apoyo inquebrantable de sectores de la inspección educativa captada y gobernante desde tiempo inmemorial, hoy quintacolumna, al servicio de las urnas del PP. El sindicalismo corporativo, puro o disfrazado de nacionalismo, es el amarillismo de siempre, el de cuanto peor, mejor; aquí coinciden los popes populares y los prebostes nacionalistas que entre sus vendettas internas, sus odios externos y sus fobias estructurales, no dejan títere con cabeza a la hora de sacar tajada electoral. Pero lo que más me sorprende, es la postura de los progresdetodalavida que no saben distinguir una huelga de otra, que se apuntan a todo lo que pueda tener algún matiz de rojerío, sean las que sean sus consecuencias. Aquí sí que duelen prendas y no comprendo las razones. Siempre fueron la columna vertebral de la calidad del servicio público y ahora son hipercríticos con el supuesto gobierno amigo. Pero no hay que desesperar, como todos los comienzos del mes de mayo, se pone en cuestión la vigencia y oportunidad de los sindicatos, este año ha servido para saber qué hay de autonomía en cada uno de ellos. La independencia es imposible, pero la actuación autónoma es imprescindible.

05 mayo 2007

El limbo sindical y la felicidad universal perpetua

A mi amiga, su abuela siempre le aconsejó que estudiase mucho, que aprobase oposiciones, que se casase y cuidase a su familia, pero que nunca trabajase fuera de casa, que eso era quitarle el trabajo a un padre de familia y por lo tanto que aumentase el paro. Yo pensé que aquello era cosa propia de personas mayores y muy condicionadas por prejuicios religiosos de antaño (la costilla de Adán y demás mitos). Pero yo hoy les aseguro que eso no sólo lo afirma aquella bienintencionada señora, también lo asegura y sostiene de forma aparentemente científica el doctor José Abellán, catedrático de Riesgo Cardiovascular de la Universidad Católica de Murcia; su supuesta investigación postula y afirma que los sentimientos religiosos y la conflictividad en la pareja son indivisibles, pues las prácticas litúrgicas segregan endorfinas que combaten la ansiedad y, por lo tanto, el riesgo de infarto. Y aún más, asevera el benemérito profesor que el trabajo de las esposas fuera de su casa está absolutamente contraindicado clínicamente ya que fomenta la competitividad entre la pareja y no funcionan los neurotransmisores que reducen el estrés. Por lo tanto, sepa usted que, si su consorte es asalariada, lo lleva claro. Después no me diga que no le avisamos, haberse casado con una que tuviera dinero.

Queda la posibilidad de pensar que el bueno del doctor está en el limbo de los inocentes y que no es responsable de sus sugerencias; pero la cosa se complica más ahora con esto de que el limbo haya pasado a mejor vida. Que la Iglesia haya decidido por su cuenta y riesgo que el tal ente no existe; esto traerá problemas, no sólo a los que bautizaron a sus hijos por convención social, imposición familiar o por el qué dirán en el pueblo sobre el pecado original del niño.

Claro que la Iglesia puede decir lo que quiera con lo del limbo, que hay quienes seguirán afirmando que existe; entre ellos están los sindicalistas del mundillo nacionalista, permanentemente instalados en el limbo de marras, esa situación beatífica, la del que está por encima del bien y del mal y que es poseedor de la verdad, de que nunca irá al infierno sindical ya que siempre predicó la felicidad absoluta y practicó el parasitismo; tienen unos niveles de serotonina angelicales y sus riesgos de ansiedad son ridículos.

Son predicadores obtusos y absurdos como aquel Fray Gerundio de Campazas, alias Zotes, que nos describía el buen racionalista Padre Isla, el que criticaba los discursos vacuos e insulsos, vacíos de contenido y soluciones y a los que, con su correspondiente verborrea, engatusan e ilusionan al personal que se gana la vida en el curre, negociando día a día con el encargado del taller, con el capataz o con el jefe de recursos, humanos o no.

Quizá sea deseable que los trabajadores, especialmente los de la función pública se percaten de un repajolera vez de que apoyando corporativismos irracionales e identitarios se postulan como colectivos amorales, socialmente hablando.