25 noviembre 2014

De viejos ducados y de fraudes foclóricos

http://www.laopinioncoruna.es/opinion/2014/11/25/viejos-ducados-fraudes-focloricos/902585.html


Los días pasados han conseguido oscurecer informativamente la polémica de Cataluña, la Fiscalía, las detenciones e imputaciones por corrupción? Todo se ha parado por culpa del fallecimiento de la duquesa de Alba y de la entrada en prisión de Isabel Pantoja. No quiere un servidor poner ambos hechos a la misma altura, la familia y amigos de la fallecida merecen todo el respeto; pero el equilibrio morboso del tratamiento informativo no se ha mantenido. Ni los medios más serios han estado a la altura de las circunstancias, de repente todo se tiñó de papel satinado, de cámaras haciendo guardia?
Las llamadas leyendas negras nunca surgen de la nada, tendrán su componente hiperbólico; pero cuando el río suena, agua lleva. Desde que el ilustre III duque de Alba, Fernando Álvarez de Toledo, pasó por Flandes allá por el siglo XVI se le ha pintado comiéndose bebés y las madres holandesas siguen amenazando a sus hijos traviesos con su llegada o con mandarlos a España. Dicen ahora que su historia merece una revisión, los eruditos tienen la palabra.
Lo que me preocupa hoy, en una sociedad supuestamente civilizada, es que su fallecimiento haya provocado tal cúmulo de elegías. Nos lleva a recordar las coplas de Jorge Manrique reivindicando la figura de su padre, buen servidor de su rey, buen soldado contra los moros; que, en el momento de su muerte, sería recordado por la fama que dejaba en este mundo, pese al poder igualatorio de la muerte.
El caso es que no se recuerda que su saga, desde el cruel Álvarez de Toledo, luego matrimoniados con los del ducado de Medina-Sidonia y, por fin, agrupado todo bajo la estirpe escocesa de Estuardo, creció al amparo de una monarquía medieval en sus comportamientos. Se recuerdan estos días sus posesiones, palacios, fortalezas, castillos, haciendas sin límite; pero con la boca pequeña solo algunos recuerdan que, sin perder la propiedad y para evitar su conservación e impuestos, se ceden a las administraciones, que son las que corren con los gastos y no recaudan un euro de impuestos. Se les retrata ahora como emprendedores porque sus hectáreas son cultivables y dan trabajo, pero se oculta que solo en subvenciones de la Política Agraria Común de la Unión Europea pueden estar recibiendo más de dos millones de euros al año. Con el riñón así de cubierto a ver quién es el guapo que no se pone el mundo por montera, no sé quién osaría a reprocharle sus aficiones, extravagancias, y populismos.
Y un breve estrambote para rematar el folio y comentar que la España de pandereta continúa lamentando que la defraudadora fiscal marbellí pase una brevísima temporada a la sombra, en algunos reportajes parece como si el mundo de la cultura musical estuviese de luto al faltar la Pantoja de los escenarios unos meses. ¿Siglo XXI?

18 noviembre 2014

Ríos de tinta contaminada

http://www.laopinioncoruna.es/opinion/2014/11/18/rios-tinta-contaminada/900248.html

Aprovechando que el Guadiana pasa por Mérida, no sé la razón por la cual se me ha venido al magín una vieja polémica surgida en la Cámara de los Comunes del Reino Unido allá por el 2009, cuando el speaker de la cámara baja se vio obligado a dimitir, siendo el primero en hacerlo desde finales del S. XVII, trescientos años antes su antecesor había aceptado un soborno de 1000 guineas.
En efecto, hace cinco años, más o menos, un periódico destapó los gastos de los diputados que la ciudadanía británica consideró escandalosos y que casi hacen tambalearse al gobierno; el presidente de los Comunes leyó un comunicado de poco más de treinta segundos y se despidió, después de más de treinta años de trabajo parlamentario.
Automática e inmediatamente el presidente del gobierno laborista, de Gordon Brown, tarda pocas horas en presentar un propuesta sensata y rupturista, consensuada con el resto de partidos para adaptar las tradiciones centenarias al siglo XXI, es decir, poner fin a la autorregulación y crear una comisión independiente que controlase el comportamiento de los parlamentarios de forma que el parlamento dejase de funcionar como un club de señoritos que se ponen las reglas y se autogestionan. No hubo otra forma mejor para alcanzar el objetivo de recuperar la confianza en sus partidos políticos, todos se dieron cuenta de que el problema no era una persona, sino que el propio sistema era el que podría entrar en crisis; es decir, a grandes males, grandes remedios. Los derroches de sus señorías se centraban en la financiación de segundas residencias de los diputados con escaño fuera de Londres, algo sabemos de eso por aquí. Desde entonces y trimestralmente las cuentas de gastos de los diputados se publican en la Red. Seguramente seguirá habiendo cierta picaresca o gastos reservados de los grupos parlamentarios, pero el contribuyente tiene más información; al que pillan en un renuncio, violando las normas, ya sabe que está inhabilitado para volver a presentarse a las siguientes elecciones. A partir de entonces se acabaron los caprichos y lujos a cargo del erario público como el del propio presidente del gobierno que había cargado una factura de 6.500 libras por la limpieza de la casa de su hermana; claro que eso aquí sería pecata minuta. Les revisaron las cuentas de los cuatro años anteriores y tuvieron que devolver lo indebidamente cobrado.
Supongo que aquello funcionará bien o por lo menos, regular; lo que no funciona es lo que circula por aquí; entre tanto espectáculo bochornoso no sabes qué elegir y qué pasará mañana. No sé qué habrá pasado a estas alturas con Monago, es cierto que lo han apuñalado los suyos por la espalda, pero dicen que las estaba buscando, cada uno sabe donde se mete. Nos regala melodramas contradictorios cada dos por tres sin ponerse colorado, que no nos interesan por pertenecer a su vida privada. Yo casi estoy decidido a ejercer mi derecho a decidir y pedir mi independencia.

11 noviembre 2014

Profesorado del Renacimiento

http://www.laopinioncoruna.es/opinion/2014/11/11/profesorado-renacimiento/897877.html

En la guarida del ministro Wert se está perpetrando un proyecto de real decreto que encrespará más los ánimos del profesorado de Educación Secundaria y Bachillerato, a sus especialidades y a las materias que se verá obligado a impartir, sean o no las suyas, porque al señor ministro y a sus colegas de las comunidades autónomas se les antoja como método ideal de ahorro presupuestario y de plantillas en los institutos.
Hasta ahora se vivía en un cierto vacío legal en algunas comunidades autónomas, otras tienen norma propia reguladora, mediante el cual la arbitrariedad de asignación de materias quedaba al albur del centro, ciertos litigios entre departamentos de diferentes especialidades y los marrones correspondientes asignados al profesorado provisional e interino. Es cierto que este vacío legal de lo que se venían llamando asignaturas afines se podría acabar resolviendo con el sentido común o con acuerdos sindicales o por sentencias que lo impidiesen, es decir, que lo afín fuese realmente afín, o podría resultar organizando un pisto educativo con resultados surrealistas como que un docente de biología tuviese que ser profesor de informática, pese a ser analfabeto funcional en la materia.
Pues bien, anunciábamos más arriba que nuestras nunca bien ponderadas autoridades educativas van a elevar la anécdota a categoría, es decir que lo que antes eran incidencias más o menos graves en los centros y en la calidad de la enseñanza en los mismos, ahora será norma legal. Nuestro nunca suficientemente valorado ministro pretende profesorado renacentista, una especie de ejemplares herederos de Leonardo. Parece que piensa en clave clásica y medieval, que la mayoría son doctos en los famosos compendios: el Trivium, es decir, la gramática, ciencia que ayuda a hablar correctamente; la dialéctica, ciencia que ayuda a buscar la verdad y la retórica que nos ayuda a adornar las palabras; sin olvidar el Quadrivium que se ocupaba de la aritmética, ciencia que enseña a hacer números; de la geometría para saber calcular el espacio; de la astronomía para cultivar el estudio de los astros y su movimiento y de la música que enseña a producir en base al tiempo.
Todo agrupado en la ciencia de las ciencias, la filosofía, seguramente la superioridad del saber griego sobre el romano, hasta que el cristianismo la sustituyó por la teología.
Nuestros ilustres, que no ilustrados, gobernantes parece que han llegado a conclusiones parecidas. En un mundo en el que prima la especialización y en el que al mismo tiempo se precisa que la formación básica de la persona es imprescindible, nos encontramos que el docente tendrá que valer para un roto y para un descosido; sepa de lo que habla o no, sepa transmitirlo o no. Después que vengan con Pisas, abandono escolar temprano y demás gaitas; mientras tanto los que sepan biología que vayan aprendiendo música y viceversa

04 noviembre 2014

El mundo al revés, por ejemplo, en Sevilla

http://www.laopinioncoruna.es/opinion/2014/11/04/mundo-reves-ejemplo-sevilla/895508.html


"El cadáver no se queja de los gusanos que le comen, porque él los cría; cada uno mira que no se corrompa, porque será padre de sus gusanos".
Francisco de Quevedo 'La Hora de todos y La Fortuna con seso'
La gran depresión de final del S. XVI y S. XVII se refleja en esta sentencia de Quevedo, en la desoladora y lacerante hegemonía de una miseria en el país, una política funesta y catastrófica y una arbitrariedad que se basa solo en la corrupción, en el enriquecimiento de unos pocos y el desvalimiento de la mayoría de la sociedad, un modelo social basado en la degeneración y la peste de las malas prácticas y corruptelas. Una letrilla contemporánea insistía en el tópico del mundo al revés:
La gran depresión de final del S. XVI y S. XVII se refleja en esta sentencia de Quevedo, en la desoladora y lacerante hegemonía de una miseria en el país, una política funesta y catastrófica y una arbitrariedad que se basa solo en la corrupción, en el enriquecimiento de unos pocos y el desvalimiento de la mayoría de la sociedad, un modelo social basado en la degeneración y la peste de las malas prácticas y corruptelas. Una letrilla contemporánea insistía en el tópico del mundo al revés:
"Todo el mundo está trocado, / sólo reina el recibir, / ya nos venden el vivir / y vivimos de prestado; / el que tuviere un ducado / se verá grande en un día / Todo el mundo irá al revés, / el bajar será subir, / valdrá barato el mentir, / reinará el interés".
Parece que las cosas no han cambiado tanto, los informes de las ONG sobre la pobreza no son suficientes para que la sociedad se mueva, se revuelva; siguen funcionando las redes familiares y los círculos próximos, pero hay quien carece de ambos y escucha con asombro que buscarse la vida, por ejemplo en Sevilla, puede significar una multa de 750 euros, solo por revolver en los contenedores buscando yogures caducados, cartones o algo de metal que pueda ser vendido. El señor alcalde y sus concejales que han propuesto esta medida adolecen de inteligencia y de humanidad, su adolescencia les llega a impedir comprender que ningún sin techo les pagará semejante cantidad y, además, no dejará de hacerlo porque a las autoridades les salga del ombligo; les aconsejan ir a los servicios sociales para que se rían de ellos censándolos, aunque su domicilio sea un cajero automático. Yo les recomendaría a esas lumbreras que, después de hacer el censo de indigentes, les obligasen a hacer un curso de manipulación de alimentos, para que recojan los desperdicios con guantes de látex proporcionados por el municipio y que no contagien enfermedades infecciosas al que llega más tarde para comerse las pelas de los altramuces. Más tarde, una vez superado este nivel, sería conveniente que fuesen aleccionados con los consejos para seguir una dieta correcta, para que no abusen de las grasas, que las verduras y las frutas son fundamentales cinco veces al día, que no se excedan con el alcohol? Unas buenas presentaciones en Power Point o un vídeo didáctico en los centros cívicos sobre la materia serían suficientes para que los sin techo tuviesen una vida más sana.
Pero no se me depriman, Dolores de Cospedal lo ha dicho muy clarito: "La corrupción es parte de la condición humana". Será de la suya.
Para terminar unas frases de Galdós que vienen a cuento hablando de los gobernantes que le tocaron:
No acometerán ni el problema religioso, ni el económico, ni el educativo; no harán más que burocracia pura, caciquismo, estéril, trabajo de recomendaciones, favores a los amigotes, legislar sin ninguna eficacia práctica, y adelante con los farolitos...
Benito Pérez Galdós, La fe nacional y otros escritos sobre España (1912).