18 diciembre 2018

Caballos cabalgando, ahora entre redes y parlamentos


https://www.laopinioncoruna.es/opinion/2018/12/18/caballos-cabalgando-ahora-redes-parlamentos/1358270.html


Alguien pensará que este titular se refiere a las cabalgadas que nos regala Putin con su torso desnudo y provocador, desafiante, aunque no haya entrado de tal guisa en su sucedáneo de parlamento. Su ecuestre cabalgada siempre ha sido para epatar a sus siervos; algunos dispuestos, a su pesar, a seguir manteniendo la boca cerrada por una pensión de 150 euros o acudir al calabozo en tandas de 200 en cada ciudad en la que hubieren protestado; todo ello según me cuenta mi corresponsal en los Urales. Algún día les contaré algo de su historia con más tiempo; mas ardo por ver a Trump cabalgando sobre un palo de golf.
Aterriza aquí este preámbulo, porque me viene al magín la historia del general Pavía y su caballo, que supuestamente asaltaron el Congreso a las 7 de la mañana del 3 de enero de 1874, dejemos sin culpas al equino -incompareciente en el incidente-, mas constatemos que al general le acompañaban abundantes militares, muchos con uniforme usado para cabalgar camuflados en los olivares. El presidente Castelar había dedicado horas a defender su gestión republicana y autoritaria frente al desorden público y la tercera guerra carlista. Cae su autoridad por mor de su opositor, el krausista Salmerón, que responde y vence en votación. Al mismo tiempo, el general Pavía -siempre nervioso por el federalismo, el cantonalismo y las guerras civiles- hace de las suyas en el Parlamento, mientras Castelar pronuncia la legendaria sentencia: "Yo declaro que me quedo aquí y aquí moriré". Allí se pone el punto final a la primera república y se sientan las bases de la restauración borbónica de la mano del general Serrano y un gobierno de concentración nacional que suspendió las garantías, con fatal desenlace, puesto que los problemas territoriales siguieron siendo los mismos. Mientras, los monárquicos conspiraban y el partido alfonsino, hábilmente dirigido por Cánovas, perpetró la monarquía con Alfonso XII, más o menos al frente, apoyado por dos importantes grupos de poder: los industriales catalanes y los hacendados cubanos que apostaron económicamente por la restauración. En fin, había empezado como cabalgada, pero las coces no las dieron los caballos, estaba claro quiénes las daban.
Posiblemente esté errado, pero no recuerdo episodios equinos de relevancia en la siguiente república, ni en la actual democracia parlamentaria, dejando de lado la abundancia de ecuestres esculturas bronceadas del dictador.

Mas hete aquí que recientemente han aparecido candidatos a caballo en las elecciones andaluzas, la ultraderecha parece transmutarse en el infanzón burgués castellano, el Cid para más datos, que intenta una reconquista acompañado de antiguos uniformados como candidatos a las Alcaldías de Palma de Mallorca y otras hierbas. Me pregunto si también aparecerán clérigos libres de pecado y monjas que no tengan deudas con su secta por haber hurtado e invertido lo sustraído, 500.000 dólares, en las casas de apuestas de Las Vegas. Todo un espectáculo de jinetes y amazonas cabalgando sobre ponis de tragaperras.

11 diciembre 2018

"Miré los muros de la patria mía" y "volver a empezar"


https://www.laopinioncoruna.es/opinion/2018/12/11/mire-muros-patria-volver-empezar/1355975.html


En aquel viejo y actual soneto de Quevedo que comienza con el cuarteto:
"Miré los muros de la patria mía / si un tiempo fuertes ya desmoronados/ de la carrera de la edad cansados/ por quien caduca ya su valentía". Se nos pueden contar muchas cosas; alguien, quizá no muy acertado, interpreta que literalmente habla sobre los muros de Madrid; seguramente es más probable que esté estableciendo un paralelismo en el que nos cuente las penas sobre su España en decadencia con bancarrota y el deterioro de su propia salud; sigue hablándonos de la decrepitud del campo, los arroyos, el monte, los ganados; es decir su vida exterior. Continúa con su casa, su habitación, su báculo, su vida íntima. Para terminar con el terceto perfecto: "Vencida de la edad sentí mi espada/ y no hallé cosa en que poner los ojos/ que no fuese recuerdo de la muerte".
Seguro que habrá quien eche mano del poema, alguno por mi culpa, para hablar del apocalipsis que nos espera a la vuelta de la esquina, agoreros los ha habido siempre y parrilleros, que arriman el ascua a su sardina, abundan como las setas en otoño; quizá por esa razón, no haya que echar las campanas al vuelo, hay tiempo para que salgan a rebato. Mientras tanto, tendremos que parar, templar y mandar. Habrá que detenerse en el análisis, los muros, las defensas o los huesos de Quevedo, no están derruidos; quizá sí deteriorados en la Europa occidental, explotando o a punto de hacerlo; un chaleco amarillo no es más que un símbolo de una parte de la sociedad que sobrevive malamente, para el que las emisiones de CO2 no son más que excusas para recortar sus condiciones de vida para llegar al día 15 del mes, frente a los bobó, los bourgeois bohème, los burgueses acomodados, que pueden vivir sin coche para trabajar, pagar la riñonada por uno eléctrico o tratar de reivindicar a Petain como gran militar. Todo ello sin tener en cuenta a jóvenes, parados o pensionistas cuyo desencanto ya se da por amortizado. Cuando en Francia los adoquines se tambalean, alguien se los comerá; Pompidou fue el primero y ahora nadie se acuerda de la dimisión de De Gaulle meses después.
No había playa bajo los adoquines; pero sí hubo un nuevo panorama, una nueva sociedad. Puede ser que los poderosos imitadores actuales de los viejos derrotados duren menos que sus antecesores de hace 50 años. Hay que tenerlo previsto para nuevos mandatos en nuevas formaciones sociales; la socialdemocracia supo hacerlo en su momento, a trancas y barrancas. Veremos ahora.
Si en Francia y Alemania las cosas no funcionan ya sabemos que nos irá mal a los pequeños, parece que lo que se dado en llamar "cordón sanitario" está funcionando en ambas potencias; pero en las periferias no está ni un poquito garantizado.

Quizá la siguiente generación tenga que pensar ya en Volver a empezar no como el entrañable protagonista de Garci, sino como se hizo hace décadas, que nada de lo actual fue regalado

06 diciembre 2018

40 años no es nada. Las horas extraordinarias, sí lo son


https://www.laopinioncoruna.es/opinion/2018/12/04/40-anos-horas-extraordinarias-son/1353912.html


Recién habrán visto y leído que el gobierno quiere controlar las horas extraordinarias labradas por los trabajadores, forzadas clandestinamente, atemorizadas muchas veces por el patrón, opacas para la Seguridad Social en su totalidad y ausentes en la nómina del empleado.
Ni que decir tiene que comparto la iniciativa del tal control por lo que podría representar en incremento de puestos de trabajo y la regulación legal de las condiciones laborales. Llámenme inocente, lo entenderé. Pero, mientras tanto, sostengo que la Constitución Española (CE) en sus artículos 24.1 -de la tutela judicial efectiva- y el art. 40 de la formación, salud laboral, descanso necesario con limitación de jornada, vacaciones periódicas retribuidas y demás banalidades para la patronal, dan abundantes garantías para que el poder judicial ampare los derechos de los trabajadores y trabajadoras; seguramente ellas más alevosamente agraviadas por sus jefes de recursos humanos. ¡A ver cuándo inventamos otro sintagma para definir lo que siempre fue el capataz, sin retorcer el lenguaje!
Por si faltaran leyes, no hará falta recordar el artículo 35 del Estatuto de los Trabajadores que recuerda que las diferentes situaciones en las que el empleado tiene garantías, tantas veces obviadas.
Pero vamos a los que íbamos, por lo que a mí más me preocupa, puesta la Constitución en la balanza, estamos ocupados por asuntos bastante ajenos a los problemas inmediatos y no hablamos de los derechos laborales, allí recogidos y protegidos, que se verán plasmados en los decretos y reglamentos que los desarrollan, como el de la obligación de fichar para controlar las horas extraordinarias. Nos vamos por algunos cerros de Úbeda u otras frivolidades -sin duda importantes- que afectan a la estructura del estado, léase monarquía o república, estado federal o autonómico, inflación de municipios, lo que ustedes que quieran añadir? el caso es que de todos modos, se toque lo que se toque, lo más probable es que los más fuertes consigan reformar lo que les ha molestado desde el año 1978 en materia de regulación laboral. Por eso soy de los que sostiene que hay que amarrar lo que hay y -a partir de ahí- hablamos de lo que sea. Pero que no se vea esto como una posición de debilidad, comprobamos que el sector industrial, el sector público, los servicios están dando importantes pasos y hay que darles apoyo legislativo, apoyado en la CE.

Aprovechando este Pisuerga, quizá por eso algunos recuerden que hace cuarenta años, en plena campaña del referéndum de la Constitución estaban vestidos de caqui, agobiados por arengas caudillistas y protegiendo, en sus garitas ocasionales, no sé qué embalses o polvorines, sin poder votar. Todas las tardes, a la hora de la teórica aquel capitán, medio cojo, nos soltaba, más bien nos escupía, a los que lo entendíamos, la cita del presunto filósofo Spengler: "Siempre ha sido un pelotón de soldados el que ha salvado la civilización". Él sólo sabía esa frase, pero tenía que grabarla a sangre y fuego en su tropa. Seguro que ese pelotón no me hará falta.

27 noviembre 2018

De faldas, manzanas y carnés de padre


https://www.laopinioncoruna.es/opinion/2018/11/27/faldas-manzanas-carnes-padre/1351647.html


Supongo que a estas alturas los usuarios de la red estarán informados de que el Parlamento gallego ha parido por unanimidad un ratón; todos los partidos han coincido en permitir que, en los colegios en los que se prescribe uniforme escolar obligatorio, las niñas podrán vestir con falda o pantalón según su gusto y voluntad, ad libitum; mi sorpresa ha sido mayúscula, con admiraciones, negrita y subrayado. Aún no me he repuesto del pasmo que me ha producido la noticia; ni intuía que pudiese existir la obligación de la falda para las niñas en ciertos colegios, sospecho que en muchos clericales y, sobre todo, en los sectarios que segregan al alumnado por sexo. Ya tendrá faena la inspección educativa, ¿a quién interrogará?, ¿a las niñas con pantalón o a las que lleven falda? Ya se sabe de antemano que ellas portan la manzana de la tentación.
Tiene bemoles -disculpen la vulgaridad- que terminando la segunda década del siglo XXI un parlamento tenga que discutir y pronunciarse sobre un derecho tan elemental, con la de asuntos que tendrá en trámite, o no.
Después nos asombraremos de que aquel concejal de Ciudadanos en Alcañiz nos contase en voz alta sus fantasías sexuales, sin cortarse un pelo, con las faldas de las niñas que iban al colegio de las monjas de su pueblo. Es evidente que la castración emocional nos ha afectado a todos y todas los nacidos en aquellos viejos tiempos de catecismo y sacristía; pero el homo sapiens sapiens ha tenido oportunidades para evolucionar; está claro que Darwin estaría tirándose de los pelos y dándose cabezazos contra la pared y ya no digo nada de los que nos enseñan epigenética, estarán al borde del suicidio.
Siempre hay un roto para un descosido. La Conferencia Episcopal Española (CEE) ha designado como nuevo portavoz al obispo Luis Argüello, que se ha estrenado en su nuevo puesto con un éxito de los que claman al cielo, dicho sea esto sin ánimo de ofender a los que vemos en el cielo nada más que sol y nubes. El tal de las polainas se despachó a gusto en su primer día de trabajo definiendo lo que es un varón, aspirante a cura con todas las de la ley; es decir, el candidato que ellos podrían aceptar para adoctrinar a sus seguidores, tendrá que ser un señor con carné de padre, con dos asuntos y un palito en funcionamiento ante las mujeres, aunque tuviese que estar en reposo permanente, o no.
Horas después trató de enmendarlo, malamente, argumentando que no quería haber dicho que los no heterosexuales pudiesen formar parte de su club; faltaría más, la cantidad de pederastas que tendrían que expulsar los dejaría en cuadro.

A ver cuándo llega el momento en que las sotanas dejen de diseñar los atuendos y, ya de paso, que el Reino de España denuncie el tratado internacional, preconstitucional, con el Estado Vaticano -el concordato por mal nombre- para poder establecer unas relacionas diplomáticas civilizadas, si es preciso.

20 noviembre 2018

¿Por qué no te callas?


https://www.laopinioncoruna.es/opinion/2018/11/20/callas/1349402.htmlhttps://www.laopinioncoruna.es/opinion/2018/11/20/callas/1349402.html

Supongo que la mayoría de ustedes recordará esta frase pronunciada por Juan Carlos I, el entonces rey de España, hace más o menos once años en la XVII Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado en Santiago de Chile. El sujeto receptor de la soflama, quizá no fue una soflama; sino la riña maternal de la maestra al parvulito, que hablaba cuando no debía y de lo que no debía, era el presidente venezolano -no recuerdo si sargento o mariscal- Hugo Chávez; creo recordar que el susodicho trataba de poner de vuelta y media, no sin razón, a José María Aznar. El emérito no podía consentirlo y así se lo hizo saber con la frase que encabeza. Paradójicamente el capo venezolano obedeció militarmente, aunque los intestinos le pidiesen otra respuesta, quizá el petróleo tuviese algo que ver, no lo sé. Pocas veces, en verdad ninguna trascendente, recuerdo al pasado monarca hablar en público, ante los medios, sin un papel escrito por otros en sus manos. Ni siquiera en su supuesto acto heroico del 23-F. Hace poco, podría ser que en la escena del hospital fuese capaz de pedir disculpas, con la cadera maltrecha, con el elefante difunto y su mujer de entonces en el ajo; aún no sé la razón del arrepentimiento, si por el linchamiento del bicho, por su torpeza clásica de Borbón escaqueado o por el traspié que le llevó al quirófano.
Aunque no les parezca bien, echo de menos la cara dura. Me aburre tanto, tanto, la buena formación de la sagrada familia que nos representa, que ya no les echo cuenta, ni cuando nos leen asuntos de estado. ¡Ay!, a aquel emérito, aquí querría tenerlo yo, delante del obispado que sufre la inquisición -de la que supongo formo parte- por aquello de defender el laicismo, la laicidad y la apostasía.
¡Ahí! Delante de los que se esconden por los abusos sexuales a menores que, hasta hace poco, no percibían la gravedad del delito, tal y como perpetró José María Gil Tamayo, portavoz de la Conferencia Episcopal Española y obispo electo, ¿por quién?, de Ávila quejándose de que el foco denunciante se pone ante los curas abusadores y no contra el gremio de fontaneros, un suponer, que alguno habrá habido, no digo que no.
Dicen que están trabajando en ello, espero que no con los pies en la mesita como Aznar y Busch, en aquella inmortal escena tejana, para evitar el descrédito de su negocio; pero suplica no culpabilizar al clero sospechoso o culpable de manera interesada, porque la responsable es la sociedad, por lo tanto las familias, supongo que por haber hecho dejación de sus responsabilidades descargando parte de la educación en el clero católico; ha llegado tarde el obispo, unos cuantos siglos.

¡Ay! Ahí quería yo haber visto y oído al rey emérito diciéndole al ordinario de turno ¿Por qué no te callas? Cuando sólo habla del dolor y la vergüenza causados. Me lo debe.

13 noviembre 2018

Escribir o juzgar nunca ha sido tarea fácil


https://www.laopinioncoruna.es/opinion/2018/11/13/escribir-o-juzgar-sido-tarea/1347068.html





Las leyes con que juzgas, ¡oh Batino!,
menos bien las estudias que las vendes;
lo que te compran solamente entiendes;
más que Jasón te agrada el Vellocino.
El humano derecho y el divino,
cuando los interpretas, los ofendes,
y al compás que la encoges o la extiendes,
tu mano para el fallo se previno.
No sabes escuchar ruegos baratos,
y sólo quien te da te quita dudas;
no te gobiernan textos, sino tratos.
Pues que de intento y de interés no mudas,
o lávate las manos con Pilatos,
o, con la bolsa, ahórcate con Judas.
Francisco de Quevedo
Este viejo soneto podría venir a cuento con otro título, Jueces, políticos y banqueros, puesto que los clásicos, lo son por la vigencia de sus obras, para ayudarnos a entender el mundo en que vivimos, las tradiciones sobre las que descansa nuestra cultura y nos enseñan a discernir un buen producto de una burda farsa. Ahí descansa la ironía de Quevedo, que todavía sigue en las mismas; fue un político intrigante al servicio del duque de Osuna hasta que cayó en desgracia y estuvo a la sombra varias veces, porque su obra satírica no le cayó simpática al conde-duque de Olivares; quizá por eso aquí se muestre pesimista, por su propia biografía; menos mal que en estos siglos algo hemos avanzado, o no. Pero tampoco seamos mártires, porque estos peligrosos individuos tienen el mérito de haber concebido obras maestras entre rejas.
A Tomás Moro lo encerraron por haberle puesto la proa a Enrique VIII y sus ansias antipapistas. Los carmelitas descalzos de Ávila pasaron lo suyo; Juan de Yepes o Teresa de Cepeda y Ahumada tuvieron problemas con los colegas calzados, supongo que por aquello de la teología; menos mal que a él los meses de prisión le sirvieron para escribir parte del Cántico Espiritual. Algo así le debemos a Fray Luis de León, también acabó en la cárcel por traducir el Cantar de los Cantares, algo pecaminoso, en lengua vulgar y sin licencia.
La contabilidad de Cervantes no está clara, ni sus penurias y miserias. Voltaire, rebelde contra los poderes, habitó la Bastilla. La tormentosa relación entre Rimbaud y Verlaine acabó a tiros sin heridas graves, éste acaba encarcelado, marchito y malbebiendo absenta en los cafés más pobres de París.
Oscar Wilde fue popular en el Londres victoriano, pero sus relaciones le llevaron a tres prisiones con trabajos forzados. Miguel Hernández o Buero Vallejo sufrieron, entre tantos otros, las hospederías franquistas.
Burroughs, Jack Kerouac, Ken Kesey siempre estuvieron en el filo de la navaja. Jean Genet conoce la prisión a los quince años y levantará cabeza gracias a Cocteau, Sartre o Picasso, que intercedieron ante el poder político por sus problemas con la justicia.

En resumen, un recuerdo a vuelapluma para llegar a reconocer que poco hemos cambiado, que la justicia más poderosa sigue en el candelero cuando tropieza con el poder real y parece que cómicos y banderas siguen en conflicto

06 noviembre 2018

Recordando a Don Juan


https://www.laopinioncoruna.es/opinion/2018/11/06/recordando-don-juan/1344938.html



Aclaremos el título para evitar malentendidos, no se trata de recordar al padre del rey emérito, que ya tuvo bastante con lo suyo y sus circunstancias; sino al Tenorio, el mito de don Juan en la versión de José Zorrilla que solía representarse estos primeros días de noviembre.
Siempre he preferido el personaje creado en El burlador de Sevilla por Tirso de Molina -presunto hijo del duque de Lerma- es antiaristocrático, rico, desvergonzado, mentiroso y, por supuesto, burlador. No habrá perdón para él y será precipitado a los infiernos en la escena final, producto directo del decadente imperio, de su ley, que será quien le castigue y el orden seguirá imperando.


Si hoy quisiese buscar un personaje similar, sería difícil, puedo atreverme a imaginar un híbrido entre Puigdemont y Villarejo, en algún aspecto no hay duda de que son burladores triunfantes y sin arrepentimiento como el don Juan de Tirso, la ley les corta las alas pese a que aún no hayan llegado a tocar el fondo del pozo y sigan con el agua al cuello, continuando su burla sin arrepentimiento.
Volviendo a Zorrilla, aquel joven emocionado que habla en el entierro de Larra y que, poco a poco, se va transformando en el profundo conservador que nos legará un don Juan bien distinto. El suyo será tan crápula, conquistador y
burlador como su antepasado; pero al enfrentarse con los recuerdos de sus fechorías, las ánimas de sus muertos acuden en su búsqueda, don Gonzalo, padre deshonrado, quiere llevárselo a los infiernos; pero la sombra del alma de doña Inés le recupera para subir al cielo entre un cortejo de ángeles. El discurso ha cambiado, del poder de la ley imperial que castiga con Tirso de Molina, pasamos al don Juan redimido, moralizado por una suerte de jesuitismo patriótico: "Mi voz, mi corazón, mi fantasía,/ la gloria cantan de la patria mía". No olvidemos que en 1844 estrena Zorrilla su Don Juan, al tiempo que El espadón de Loja, el general Narváez comienza a gobernar con mano de hierro y la Guardia Civil aparece por los caminos del campo español, como Dios manda.

Si el viejo golfo y burlador nos recordaba la simbiosis de Puigdemont y Villarejo, este nuevo Tenorio conservador puede llevarnos a reunir en una sola imagen a ese par de jóvenes de pasado poco claro, Casado y Rivera, destinados, por derecho de raza y clase, a traernos la salvación, a prometernos la felicidad eterna de la marcha atrás -dicho sea esto sin afanes pecaminosos- si abandonamos las malas costumbres políticas que nos invaden. Pese a todo siguen con la burla, con el escarnio y la mentira; pero sabemos que al final, una vez conseguida la voluntad de doña Inés -el poder, el gobierno- llegará el momento del arrepentimiento y subirán a los cielos ejecutivos, legislativos y judiciales

30 octubre 2018

De memorias y confesiones


https://www.laopinioncoruna.es/opinion/2018/10/30/memorias-confesiones/1342789.html


De memorias y confesiones
Quien desee saber qué son unas memorias, qué es la literatura autobiográfica, ha de seguir acudiendo al clásico francés Philippe Lejeune, autor de El pacto autobiográfico (1975) y encontrar el significado de la literatura de la intimidad. Allí nos cuenta que ese tipo de escritura analiza las distintas relaciones del yo, a separar los datos personales de los íntimos en la literatura, en las relaciones sociales y otros ámbitos de la vida.
Lejeune defiende que la ficción "siempre es mentira, mientras que la autobiografía tiene un pacto con la verdad; inventar es hermosear la autobiografía porque la memoria es falsa". En el terreno de las memorias es curioso acudir, por ejemplo, a la obra de Tierno Galván, Cabos sueltos, para comprobar cómo ese pacto autobiográfico no se cumple a rajatabla, la memoria es selectiva y las ficciones se cuelan por las rendijas. Desde el sectarismo simplón de Alfonso Guerra en Cuando el tiempo nos alcanza (2004), hasta la dulzura, la dureza y la sinceridad de José Caballero Bonald en La novela de la memoria y especialmente en La costumbre de vivir, hay un gran trecho. La escritura del yo es siempre un pacto para contar la propia vida, aunque sea una narración para el desahogo. Es verdad que son confesiones, soltar de golpe lo que te viene en gana y conservar lo escrito después de repensarlo y repasarlo. Recuerdo que Enrique Vila-Matas -Premio Herralde de Novela 2002 por El mal de Montano, una exploración sobre distintos diarios personales- tiene una anécdota curiosa, unos periodistas le preguntaron sobre qué idioma prefería para escribir, a lo que el escritor contestó: 'Mi madre me crió en catalán y me dijo que siempre tenía que decir la verdad, por eso escribo en español'.
Siempre es época de confesiones y deseo fervientemente leer muchas, aunque todavía ni existan ni cumplan el pacto autobiográfico ni se aproximen a la verdad.
Por ejemplo, ansío que se trasladen al papel las memorias del obispo de Astorga por mor de la nueva dignidad con la que le han distinguido sus superiores para investigar los errores, digo delitos, de los pederastas como el cura de La Bañeza -que incluso ha recibido un homenaje por su trayectoria- y los cientos y cientos de víctimas con testimonios que siguen saliendo a la luz. El obispo empieza bien su nuevo mandato recordando que el secreto de confesión, para los de su oficio, está por encima de las leyes penales, que si denuncia al delincuente, lo podrían poner en la calle. Todo un ejemplo de buenas y sinceras memorias, lástima de Villarejo.

Tampoco le haría ascos a las de Rodrigo Rato, al entrar en prisión también se ha confesado, de aquella manera, para disculparse por sus errores, no por sus delitos. Podría ser curioso que dedicase el tiempo de ocio que le queda por delante a escribir lo que sabe, sin omisiones personales ni blanqueantes interferencias de manufacturas ajenas.

24 octubre 2018

La realidad y las ansias de reconquistar el imperio


https://www.laopinioncoruna.es/opinion/2018/10/23/realidad-ansias-reconquistar-imperio/1340420.html

A la exministra García Tejerina le ha entrado la fiebre reconquistadora desde la antigua capital del reino; como buena castellana vieja se siente en la obligación de ratificar una vez más la expulsión de los moriscos perpetrada por el duque de Lerma, a partir de 1609. Se apunta a la vieja escuela de su colega Rafael Hernando tratando de imitar su lengua viperina; pero le sale malamente, solo le ha faltado decir que en los colegios andaluces los niños beben rebujito en los comedores escolares y de ahí su bajo rendimiento. También obvia decir que la inversión en Educación en Andalucía es del 24% y en Castilla y León del 21%. Aquí todo blas está sufriendo recortes desde hace años con los presupuestos de Rajoy aún vigentes.
La exvicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría ya está colocada, es un decir, digo que ya tiene un puesto en el Consejo de Estado; esperemos que aconseje bien, porque su fama le precede. Hablando de colocaciones y recolocaciones, aún no se sabe si la también exministra de Sanidad Dolors Montserrat ha estado recientemente en Uruguay o en Canadá; pero parecer lo parece con esas ansias enciclopédicas para resumir los agravios en unos pocos minutos enrevesados logrando que no se le entienda nada, ni los más avezados observadores lo han conseguido. Ojalá persevere en la faena, que los humoristas han de vivir de algo en el posmarianismo. 
Dejando a un lado, por imposible, a Pablo Casado que confunde su labor como jefe de la oposición con la del telepredicador americano al que solo le falta subirse al púlpito mediático y parafrasear a Les Luthiers cuando escenificaban aquello de Yo era un desgraciado, pero he visto la luz para intentar convencernos de la unidad de destino en lo universal o persuadirnos de que es el auténtico centinela de occidente; eso sí la perorata siempre conduce a la salvación de una España que corre el peligro de convertirse en un país sin potitos ni pañales, porque el estado que nos dejó el registrador de la propiedad huido no atendió sus necesidades básicas. Personalmente a mí me hace falta un crecepelo, a ver si don Pablo se da una vuelta a reconquistar América y nos trae unos frasquitos, aunque sea de los que usa Trump.
A propósito de Trump, ya está aclarado lo del periodista saudí; los señores feudales le han convencido de lo acontecido con Khashoggi, se sabe que entró en el Consulado de Estambul y se metió en una pelea. Todavía no hay la certeza de que su contrincante usase motosierra en lugar de guantes de boxeo.

Me quedan dos recados en el tintero, mi solidaridad con los recién hipotecados y sus impuestos; si no sabían quién mandaba aquí en el asunto este de gobernar sus euros ahorrados, ahora ya se han enterado, el parqué y no olviden que el torero-pistolero del 23-F sigue con mando en plaza de ganchete con la que no quiere ser francesa

16 octubre 2018

De vicarios y sicarios


https://www.laopinioncoruna.es/opinion/2018/10/16/vicarios-sicarios/1338253.html


La semántica es traicionera, nunca sabremos desde dónde nos clavará la daga;
Cuando escuchamos la palabra vicario inmediatamente la identificamos con el sustituto del jefe, su origen está en vicarius, el representante de alguna autoridad, y a su vez de vicem, cambio, alternativa. Así, el papa es para los católicos el vicario de su dios y el vicepresidente es el que representa, en su ausencia, al presidente; pero ambos gozan a su vez de abundantes vicarios, o lo que fueren.
Hay más vicarios, García Márquez quizá nos muestre el ejemplo más transparente en Crónica de una muerte anunciada, breve novela que narra una boda sin fin y la certeza de que los hermanos Vicario, de oficio carniceros, matarían a Santiago Nasar, la muerte anunciada, para salvar su honor. Muchos sostienen que no es inocente la elección del nombre de los profesionales de la carnicería para ejecutar el linchamiento.
Incluso la lectura que se hizo en Colombia se centraba en la actitud impasible de la sociedad ante una muerte que se pudo haber evitado, como tantas en ese país y en muchos más cuando la sociedad falla y sus jóvenes, vicarios o sicarios, van al matadero como víctimas o verdugos.
Ya ha aparecido la siguiente palabra, el sicario, el hombre que porta la sica, la daga de punta muy aguda y filo curvo (secare "cortar") oculta para usarla por encargo, es decir como vicario de aquel que lo contrata o al que debe obediencia, los primeros se remontan a la ocupación romana en Palestina; sicarios o "celotas" que despachaban romanos en las aglomeraciones, siguiendo las consignas de sus mayores.
Quizá el esplendor de la sica, de la daga, lo encontremos bajo el embozado de la capa y el sombrero de ala ancha que ocultaba identidades en las aventuras de mercenarios del S XVII; pero más atención me requieren los usos de tal figura que hacían los papas y cardenales de la familia de los Borgia, aquel Alejandro VI, padre y amante de Lucrecia, cuyos enemigos probaron el arsénico, la daga o el lodo del Tíber; todos llevaban en el zurrón la cantarella, el mortífero polvo eficaz y fulminante. Sería otra historia interminable la de los hijos de purpurados desaparecidos o abandonados a la suerte de su madre caída en desgracia. ¿Fueron culpables los vicarios o los sicarios?

Quizá por eso me haya llamado más la atención el uso del término sicario por parte del vicario en Roma del dios de los católicos al llamar sicario al médico que, sin esconderse, ayuda legalmente a una mujer que lo precisa; como siempre deja claro su desprecio a la tentadora de la manzana y olvida a sus vicarios o sicarios culpables de los abusos a menores y cómplices silenciosos del abandono de náufragos en pateras.

09 octubre 2018

Esos obispos despistados y el ángel de la guarda


https://www.laopinioncoruna.es/opinion/2018/10/09/obispos-despistados-angel-guarda/1336123.html



Allá por Talavera, a principios de abril,
llegadas son las cartas de Arzobispo don Gil, (...)
El Papa nos manda esta Constitución, (...)
"Que el cura o el casado, en toda Talavera,
no mantenga manceba, casada ni soltera:
el que la mantuviese, excomulgado era".
Con aquestas razones que el mandato decía
quedó muy quebrantada toda la clerecía; (...)
Estando reunidos todos en la capilla,
levantóse el Deán a exponer su rencilla.
Dijo: -"Amigos, yo quiero que todos en cuadrilla
nos quejemos del Papa ante el Rey de Castilla.
Juan Ruiz, Arcipreste de Hita Cantiga de los clérigos de Talavera. Libro de Buen Amor
En este manojillo de versos comprobamos que en el siglo XIV, en plena crisis feudal, hay que recordarles a los clérigos aquello del antinatural celibato obligatorio. Me barrunto que los ángeles de la guarda andaban un poco despistados o no tenían muy claro el dogma a seguir.
No sé si se han fijado que hace unos días el obispo Munilla, a la sazón ordinario de la diócesis católica de San Sebastián ha dado las gracias efusivamente al ángel de la guarda, porque una furgoneta entró en una rotonda sin frenos ni dirección y no se llevó a nadie por delante. Le han llovido las opiniones, por decirlo suavemente, preguntándole si cuando una persona muere en un atropello o queda lisiada, es que el ángel de la guarda libraba ese día, además me he enterado de que el tal ente, alado y asexuado patrono policial, se festeja desde el siglo IX con la intención de que sus protegidos vayan al cielo. Si servidor tuviese alguna autoridad sobre los espíritus o sus patrocinados a pie de obra ya estaría reclamando daños y perjuicios.

Pero repasemos otras perlas, leemos que el arzobispo de Santiago (Chile) Ricardo Ezzati prohíbe a los curas "abrazos demasiado apretados", "dar palmadas en los glúteos, tocar el área de los genitales o el pecho", "dar masajes", "besar en la boca" o "recostarse o dormir junto a niños, niñas o adolescentes; se prohíbe a los sacerdotes "abrazar por detrás", "luchar o realizar juegos que implican tocarse de manera inapropiada", "cualquier expresión de afecto que el niño, niña, adolescente y personas vulnerables no aceptan y rechazan". A cualquier persona éticamente educada no hace falta recordarle que eso no se hace, independientemente de sus credos o sus prácticas mitológicas; pero no parece extraño que los célibes obligados actúen según sus necesidades, forzando o violentando a los más débiles que los toman como ejemplo. Más grave es que esos delitos no lleguen a ser juzgados y todo se quede en una reprimenda al culpable de abusos a menores, previo arrepentimiento, confesión y perdón. La solución es fácil, que sea célibe el que guste, los clérigos de Talavera lo tenían muy claro; pese a todo, parece ser que el ángel de la guarda no da hecho con tanta faena, ya que -célibes o no- la cifra de abusos, maltratos y asesinatos no para de crecer.

03 octubre 2018

De cotilleos, tecnología y sufijos


https://www.laopinioncoruna.es/opinion/2018/10/02/cotilleos-tecnologia-sufijos/1333747.html

"De una indiscreción a una confidencia la distancia es mínima, cerrar el paso al provocador es nuestro deber".
Algún ejemplar de Solidaridad obrera.
La cita introductoria está extraída o plagiada, como gusten, del siguiente párrafo:
"De política yo no quería saber nada, aunque en alguna ocasión le eché una mano con los recados, porque le veía enfermo, y porque era mi compañero en el trabajo. Entre rollo y rollo me daba a leer Solidaridad Obrera (?) y aún recuerdo un aviso que aparecía siempre en el diario: 'De una indiscreción a una confidencia la distancia es mínima, cerrar el paso al provocador es nuestro deber'. La verdad es que todo eso me importaba un pimiento, pero ya le digo, yo siempre supe respetar a la gente mayor. Sobre todo al señor Augé, que me enseñó el oficio. Fui su aprendiz".
Marsé, Juan Esa puta tan distinguida (Madrid 2016. Lumen: pág. 169)
Espero que las comillas estén en su sitio y los datos de la copia no contengan errores; en el párrafo transcrito el narrador cuenta las vivencias y conversaciones entre el viejo anarquista, operador de cabina del cine del barrio, con su aprendiz.
Naturalmente no se trata de contarles toda la historia; sino de que la lean los que no lo hayan hecho; merece la pena sumergirse en una mezcla de ficción, realidad, guión cinematográfico, magistral como todo lo que toca Marsé.
Buscando esta cita me vino al magín, porque la frase que encabeza me impactó en su momento y estos días vuelve al candelero, la distancia entre la indiscreción y la confidencia. Bastante de actualidad están ambas; el viejo anarquista le recordaba a su pupilo la importancia de no irse de la lengua para evitar problemas con la autoridad e impedir que los compañeros se viesen comprometidos por culpa de informaciones soltadas sin ton ni son, al tiempo que le hacía saber que con las confidencias había que ser muy prudente, había que saber a quién se le hacían, que las cargaba el diablo.
Y hablando de diablos, circulan por el foro y las tecnologías al uso, personajes que cada vez dan más miedo y cada vez echamos de menos un mínimo de ética informativa. Aquello del off the record, ya nadie sabe lo que ha sido de él ni de su importancia, hace años que prima el superagente 86 y su zapatófono.

Ahora bien, no olvidemos los extraños compañeros de cama o de tertulia, que también nos los buscamos, in vino veritas, como para después arrepentirnos; a veces parece que esta moralina católica a la que estamos acostumbrados se está viendo invadida por la ética calvinista que, no olvidemos, tenía unas hogueras tan grandes como las de la propia Inquisición, o más. En fin, lo de siempre, el que mucho calla poco yerra, sobre todo con artefactos explosivos, electrónicos y sofisticados. Dicho sea todo con ánimo de prevenir a todos los aspirantes a ministros que se encuentren con el sufijo despectivo "-ejo", un suponer.

25 septiembre 2018

Aznar, el realismo mágico del "varondandy"


https://www.laopinioncoruna.es/opinion/2018/09/25/aznar-realismo-magico-varondandy/1331525.htmlhttps://www.laopinioncoruna.es/opinion/2018/09/25/aznar-realismo-magico-varondandy/1331525.html

Cuando empecé a afeitarme -aunque no fuere menester urgente, sino ansia adolescente- me rociaba después del acto doloroso con la pócima paterna para después del afeitado, creo que se llamaba Floid vigoroso; aquello acababa de rematar la faena para salir del cuarto de baño con unos ardores guerreros que no paraban hasta respirar aire puro.No sé la razón, pero sospechaba que la generación "varondandy" había desaparecido y la habían sustituido las nuevas levas protagonizadas por actores, modelos y demás especies con belleza sin igual, que vendían el cosmético con su nombre o su cuerpo. Una pena para las viejas marcas, aunque se sigan sosteniendo el sustantivo "varón" y el epíteto "dandy". Menos mal que sigue habiendo viejos dinosaurios supervivientes que sostienen los impecables valores del pasado glorioso; es cierto que me refiero a la imagen, estilo y discurso que sostuvo el nunca bien ponderado José María Aznar, de un tiempo a esta parte conjunto de músculos bien regados de sangre purificada, en sus dos últimas apariciones en los medios de comunicación; la comisión investigadora del Congreso sobre la Gürtel y la charleta con Felipe González a propósito del futuro aniversario de la Constitución.Cuando empecé a afeitarme -aunque no fuere menester urgente, sino ansia adolescente- me rociaba después del acto doloroso con la pócima paterna para después del afeitado, creo que se llamaba Floid vigoroso; aquello acababa de rematar la faena para salir del cuarto de baño con unos ardores guerreros que no paraban hasta respirar aire puro.
Sobre la primera sólo cabe decir que ha sido un atentado a la inteligencia de los parlamentarios y del pueblo soberano. Se limitó a desmentir la sentencia que condenaba a su partido y a muchos de sus miembros y que se declaraba irresponsable e inviolable de todos los hechos y ocurrencias que hubiesen sucedido a su alrededor durante sus años con mando en plaza, que abundantes fueron. ¿Qué sostener ante esto? ¿Añadir calificativos sobreentendidos? No creo que valga la pena, tanto Simancas como Iglesias mantuvieron el nivel procedente, quizá no tanto el diputado de ERC; pero no se puede consentir que la comparecencia en una comisión de investigación del Congreso se convierta en un debate parlamentario, el señor Aznar no es, ni se le espera, diputado en Cortes; allí era sólo un particular que acudía a prestar declaración veraz sobre los hechos que se le preguntasen. El presidente de la Comisión Parlamentaria no hizo su trabajo.

Si han visto y escuchado la conversación con González habrán llegado a la conclusión de que la feliz idea de Sol Gallego-Díaz al organizar el encuentro, al redactar la introducción de los temas a tratar, devino en un fracaso de libro. Ninguno de los dos la escucharon, cada uno fue a hablar de su "varondandy" particular ; González dando sus habituales conferencias sobre el porvenir de la posteridad y Aznar a hablar de lo malos que son los catalanes, apropiándose defensas constitucionales que más le habría haber discurrido mientras escribía sus arengas fascistas en la prensa de León o La Rioja. En fin, ustedes habrán visto si el realismo que nos venden es mágico o no.

18 septiembre 2018

Menos mal que hablamos de tesis y no de muertos


https://www.laopinioncoruna.es/opinion/2018/09/18/mal-hablamos-tesis-muertos/1329323.html


Estos días llega a la barra de la taberna el debate sobre la tesis doctoral del presidente del gobierno y los trabajos previos a la misma del jefe de la oposición, a su pesar. Menos mal que sólo hay "muertos políticos" y no políticos muertos, como cuando gobernaba el presunto futuro exhumado, o algo así.
En ese foro tabernario he escuchado -y permítanme que no cite las fuentes bibliográficas, imposibles- a un ingeniero atacar la tesis doctoral del presidente, a las dos horas de publicarse, argumentando que no se podía ser doctor de esa forma, que un doctor tiene que ser un médico y que el presidente no es médico. Es mi declaración responsable y no desvelaré la fuente, si no es ante un juez; aun así, pasaría apuros y no la desvelaría. Así mismo he escuchado que esto con Franco no pasaba, que para eso él creó la Seguridad Social, para que todos fuésemos iguales en las listas de espera, que los doctores estaban para eso y que los farsantes no podían ser doctores. Parece mentira que los mitos se consoliden como teoría verdadera; pero como una teoría verdadera que va a misa, al que yo llamo doctor, es doctor, aunque sólo lo sea en teología y viole a niños. Creo, incluso, que el presunto exhumado de Cuelgamuros fue investido doctor "honoris causa" en algunas universidades, entre ellas la de Santiago de Compostela en la que el rector Echeverri distinguió al dictador con toga, muceta, puñetas y birrete en 1965. Si les parece poco, solo disfrutó de tal honor hasta 2006, todo un récord. Mientras tanto continuó su macabra actividad, diez años después de serle atornillado el birrete -cual boinicéfalo- firmó sus infames últimos cinco fusilamientos al alba del 27 de septiembre de 1975, sus últimas ejecuciones perpetradas en vida. Aún no sabemos sus méritos académicos para tal doctorado -durante 41 años- pero con lo que conocemos ya nos llega, les pueden regalar a Pablo Casado y Albert Rivera lo que les venga en gana por haber votado que se le siga honrando en su valle, como lo hicieron la semana pasada; desde las cunetas se lo agradecerán.
Solamente les falta defender en tribuna parlamentaria que el difunto creó la Seguridad Social; algo parecido a lo que podría ser nuestra Ley Godwin, es decir, a medida que una reunión familiar, o de amigos, se alargue, lo más probable es que aparezcan Franco o la Guerra Civil en la misma. Y hablando de la SS del presunto exhumado, hay fechas a recordar: 1883 Comisión de Reformas Sociales, 1900 se crea el primer seguro social, la Ley de Accidentes de Trabajo, y ocho años más tarde, en 1908, se crea el Instituto Nacional de Previsión, donde se integran las cajas que gestionan los distintos seguros sociales que van surgiendo, 1919 el Retiro Obrero, en 1923 el Seguro Obligatorio de Maternidad y en 1931 el Seguro de Paro Forzoso.

Esperemos que PP y C's no nos vendan el referéndum de los 25 años de paz de Fraga.