26 diciembre 2017

Nos hemos creído vacunados contra el sarampión


www.laopinioncoruna.es/opinion/2017/12/26/hemos-creido-vacunados-sarampion/1248231.html


"El nacionalismo solo permite afirmaciones y, toda doctrina que descarte la duda, la negación, es una forma de fanatismo y estupidez" .

Jorge Luis Borges

Al parecer nos lo hemos de creer, que estamos inmunizados contra el sarampión nacionalista del que hablaba Einstein, esa enfermedad infantil; pero la realidad es otra, cuando un nacionalismo crece, enfrente siempre hay otro que quiere crecer más y más rápido.

Es un conflicto perpetuo y cautivador para los habitantes que se sienten aferrados al terruño, sobre todo aquellos que fueron educados para echar raíces y no para tener alas en todas las experiencias de la vida, sean habitacionales, laborales, lingüísticas, raciales, gastronómicas, musicales, religiosas y demás situaciones ante las que nos provoquen para que nos definamos y no estemos lo bastante hábiles para negarnos al enfrentamiento, por muy civilizado que sea desde que las tribus se daban cera -y seguirán dándosela- porque, tú esta manada ni me la toques, que aquí solo cazo yo, o porque, tú no me mueves el marco de las lindes de mi territorio que ya era de mis antepasados, o no.

A propósito de esto ya decía, también Borges en 1984, que El vicio más incorregible de los argentinos es el nacionalismo, la manía de los primates.

Para él el nacionalismo tienta a los hombres no solo con el oro y con el poder, sino con la hermosa aventura, con la abnegada devoción y con la honrosa muerte. Tiene su calendario de verdugos pero también de mártires. Sufrir y atormentar se parecen, así como matar y morir. Quien está listo a ser un mártir puede ser también un verdugo, decía en 1961.

Estamos saturados, incluso intoxicados, de mártires, de víctimas y verdugos; preparémonos porque vendrán más tardes y serán más duras. No hablemos de violencia física, porque la habida es más soportable que otras que padecen las mujeres violadas y asesinadas, los infantes sobados por pederastas o los trabajadores acosados por las regulaciones de empleo, en la puñetera calle con una mano delante y otra detrás.

Esas tardes de antecampaña, precampaña, campaña, reflexión, votación y posverdades mentirosas que nos han proporcionado las fuerzas políticas participantes en el juego de tronos que ha terminado, por ahora, el 21 de diciembre, ha enfrentado a los dos nacionalismos hegemónicos en territorio catalán y, de rebote, nos han contaminado a los que no hemos tenido derecho a voto ni a pataleo; pero que seguiremos sufriendo las consecuencias de sus irresponsabilidades. Las de esos mártires y verdugos, personalidades simétricas e intercambiables que nos llevan a sufrir claustrofobia por su egoísmo ante el vecino con ciertos rasgos diferentes a sus normas, a su uniforme visión del mundo, cada vez más próximas a las religiones.

Nadie es la patria. Ni siquiera los símbolos. / Nadie es la patria. Ni siquiera el tiempo / cargado de batallas, de espadas y de éxodos / y de la lenta población de regiones / que lindan con la aurora y el ocaso. (Borges, 1966)

19 diciembre 2017

De chuchos y otras prioridades


http://www.laopinioncoruna.es/opinion/2017/12/19/chuchos-prioridades/1246315.html

Queden emitidos los gritos de rigor, puesto que en mi casa viven un perro, una perra y dos gatas; que en las casas de mis hijas y demás familia también hay vida animal. Quede claro, también, que todos son considerados seres vivos en nuestros domicilios desde antes de que la ley pretendiese decirlo y, por lo tanto, se les alimenta, se les vacuna como manda la ley, están incluidos en la póliza de seguros por los daños que pudieren causar a terceros, se les curan las enfermedades y se les proporciona una muerte digna cuando su vida ya no lo es. Evidentemente pueden suponer que todas estas mascotas fueron recogidas en protectoras, en la calle, en fin, que no tenemos ejemplares de pedigrí con los que se pudiere obtener lucro por reproducción. Asimismo, condenamos el maltrato, el comercio y la explotación de los animales.

No lo creo necesario, pero parece pertinente advertir que hemos vacunado a nuestras niñas, por su salud y la de sus prójimos, aunque no sea obligatorio y se ponga en duda su necesidad, que todas han sido escolarizadas en la enseñanza pública, por su bien y pensando en el bien común.

Por todo lo anterior, pueden suponer que me halle un poco descolocado, desubicado cuando me entero de que hay unanimidad en el Congreso, a propuesta de los populares, para modificar no sé cuántas leyes para que las mascotas sean consideradas seres vivos y no cosas. Parece que las afectadas son el Código Civil, la Ley de Enjuiciamiento Civil y -para servidor lo más sorprendente- la Ley Hipotecaria.

Mi capacidad de pasmo no llega a imaginar qué pueda tener que ver la Ley Hipotecaria con mis perros, prefiero no saberlo. Expongo mis otras dudas, que fundamentalmente son las mismas que les pueden haber surgido a ustedes al leer la noticia, se nos encienden luces de alarma pensando en los posibles conflictos familiares, herencias, divorcios, gananciales, régimen de visitas, custodia compartida, puntos de encuentro, derechos de los ascendientes que hayan convivido con los bichos y seguro que los entendidos encontrarán -gracias, vecino, por los comentarios- más problemas que ni me imagino.

Sería de suponer que si el legislador se ocupa de tales asuntos y los resuelve unánimemente, no tiene nada más urgente ni más conflictivo que disponer. Me preocupa por el poder legislativo y, por supuesto, por el funcionamiento de la justicia, -bastante saturada-, ocupándose, ahora también, de la opinión de los canes a la hora de escoger hogar y cuidadores; porque sólo somos eso, los mejores cuidadores si nos comprometemos.

Procuren los poderes públicos que se cumplan leyes ya vigentes como la de dependencia, la que protege a los mayores y a ciudadanos con problemas, tengan o no mascotas. Ya, si eso, también pueden mirar las peticiones de asilo de los seres vivos refugiados, vengan o no con mascotas.

12 diciembre 2017

La imprenta, la censura e internet


www.laopinioncoruna.es/opinion/2017/12/12/imprenta-censura-e-internet/1244113.html

Parece que anda algo alterado el ministro Zoido en sus andanzas persiguiendo a delincuentes que en Internet divulgan bulos, injurias y demás maldades. Comprendo que los afectados estén alarmados e indignados, sobre todo en los casos de amenazas anónimas contra la alcaldesa Carmena, el diputado Rufián, el policía madrileño que destapa el jolgorio de mensajes fascistas, la lista es larga.

La tentación de la censura y la represión es la primera que le viene a la cabeza, sin darse cuenta de que poco alcance y efectividad tendría, tal y como ocurre en las dictaduras y dictablandas que salpican el mapa, sin ir más lejos los felices norcoreanos trafican con tarjetas SIM y terminales no controlados desde las fronteras; tal y como se escuchaba Radio París o La Pirenaica. Sin ánimo de comparar, también anda detrás de raperos y otras hierbas que despotrican en sus letras sandeces sin tino. La censura tampoco pondrá freno a la estulticia ni puertas al campo. Nunca pudo y ejemplos claros de persecución los ha habido siempre.

Previamente podría poner más medios e interés en perseguir y enviar ante los jueces a los ciudadanos presentes en los papeles de Bárcenas, en las descaradas conversaciones de todas las tramas estafadoras que buscan juicios nulos o delitos prescritos. A fin de cuentas también se amparan en el supuesto anonimato, aunque sepamos casi todo de ellos, hasta dónde hicieron la primera comunión. No estaría de más que le recomendase al señor Cañizares un poco de continencia a la hora de adjetivar comportamientos ajenos, en absoluto delictivos.

En fin, parece que la red es el diablo y que todos estamos dedicados en cuerpo y alma a su uso y abuso, también la imprenta causó gran preocupación por la rápida reproducción de los textos sin control, pese al alto grado de analfabetismo. El Lazarillo es anónimo y son perseguidas sus ediciones por sus críticas a clérigos, por cosas nunca vistas ni oídas. Hoy, los mismos siguen pensando lo mismo. No olvidemos que diferentes problemas de difusión hay para Caperucita Roja, Darwin, Anne Frank, Carroll, Cervantes, Harry Potter, Homero, Bocaccio, ¿Dónde está Wally?, Joyce, Mark Twain, Nabokov y tantos otros por razones delirantes.

No olvidemos que la Iglesia católica, como todas, mantiene vigente el Índice de libros prohibidos, una lista de libros perniciosos para la fe, hasta 1966, quizá porque no tenía ya mucho éxito ni credibilidad. Desde las cantigas de escarnio, el Cantar de Mío Cid, lírica amorosa, romances de ciego, pliegos de cordel a tantos y tantos pseudónimos que ocultaban autores y autoras que precisaban resguardo hasta los más recientes que sorteaban la censura franquista; para todos era necesario el anonimato, podía caer la ley sobre sus obras; pero llegamos a conocerlo casi todo. En resumen, el que tiene padrino se bautiza, como el candidato popular para el 21-D que usa el "a por ellos" sin vergüenza.

06 diciembre 2017

Altamira, Argentina y M. Rajoy


http://www.laopinioncoruna.es/opinion/2017/12/05/altamira-argentina-m-rajoy/1242200.html

Se habrán dado cuenta de que los lapsus de memoria de M. Rajoy son más trágicos que los causados por Caronte al transportar almas desde la orilla de la vida a la de la muerte. Tan pronto recuerda alineaciones futboleras, cual estudioso de los detalles del balompié, como ignora las leyes del país que gobierna; tan pronto recita el color de las camisetas de sus admirados ciclistas, como se persona testigo amnésico en sede judicial.
Quizá la mejor antología de sus metáforas haya pasado por el río del olvido y allí se hayan quedado recuerdos de los destruidos discos duros o los sobres por los que su partido sigue imputado, aunque según el barón de Claret, a la sazón ministro portavoz del Gobierno de M. Rajoy, sean asuntos muy pretéritos, cual si de bisontes pintados en Altamira se tratasen; hay una importante diferencia, los pintores de las cuevas dejaban claras sus intenciones de cazar y comerse los músculos proteínicos de aquellos bichos, quizá haga más de 20.000 años, pero del contenido de los discos duros maltratados no sabemos nada.
Mas hace unos días este ilustre nos ha dejado la perla más salvaje de la temporada, ha tenido que visitar Costa de Marfil y allí honrar sus años mozos domiciliado en la calle pontevedresa Salvador Moreno.
Evidentemente M. Rajoy quiso hacerse el despistado, siendo muy benévolo, puesto que conoce con certeza -a prueba de las bombas- que el señor Moreno fue golpista de los de primera hora; aquel 18 de julio dirigió la rebelión en el Arsenal de Ferrol, que con el crucero Almirante Cervera bombardeó Gijón, que al mando del Canarias, hizo lo propio con la población civil que huía de Málaga siendo responsable de cerca de 5.000 muertes, para después ser pieza clave en el control del estrecho por parte de los sublevados.
Por tales deméritos fue incluido en 2008 como uno de los 35 altos cargos del franquismo imputados por la Audiencia Nacional por los delitos de detención ilegal y crímenes contra la humanidad cometidos durante la guerra civil y en los primeros años del régimen, en el que fue ministro de marina en dos ocasiones. Pero M. Rajoy no quiere saber que se ha de aplicar la ley de memoria histórica en las placas de las calles y que en las cunetas seguimos igual.
Otra lección nos la acaba de dar la justicia argentina; tarde, pero nos la está dando en el proceso judicial de la Escuela Superior de Mecánica de la Armada, en cuyas instalaciones desaparecieron miles de ciudadanos durante la última dictadura militar. Han sido condenados a prisión perpetua 29 exmilitares, entre ellos Alfredo Astiz, conocido como El Ángel de la Muerte y Jorge Eduardo Acosta, alias El Tigre, por secuestro, torturas, homicidio, sustracción y ocultación de identidad de menores entre 1976 y 1983 para ser eliminados en los tristemente célebres vuelos de la muerte. Una vez más, nos dan ejemplo.

30 noviembre 2017

¿Qué tendrán los uniformes?


http://www.laopinioncoruna.es/opinion/2017/11/28/tendran-uniformes/1239967.html

"Todos los reyes llevan el uniforme militar y se conceden las mayores recompensas al que ha matado más gente... Los soldados se reúnen para matarse unos a otros. Se matarán y se mutilarán decenas de miles de hombres y, después, se celebrarán misas de acción de gracias porque se ha exterminado a mucha gente". León Tolstoi

Dicen que hay tantas fobias como personas, seguro que no es exacto tal aserto, porque yo me sé de alguno que aparenta tener seis o siete a cada cual más extravagante. Sí, parece estar cada vez más extendida la aprensión a los uniformes; allá cada uno que apande con ella, si no sabe de dónde le viene la manía, habrá de consultarlo.
Supongo que algo tiene que proceder de cuando las tribus se daban más estopa que hoy, entre vecinos, y tendrían que diferenciarse de alguna forma para evitar daños colaterales. Ya estoy asociando uniforme y violencia, también tendré que hacérmelo mirar.
Mientras tanto, recuerdo las viñetas de Romeu, La liga de los sin bata y su protagonista, Miguelito, fue una de las metáforas más logradas de la transición, los tiernos infantes que se rebelaban contra la imposición de la prenda aparentemente igualatoria, eran imagen de la resistencia antiautoritaria desde los últimos años setenta.
Esta uniformidad forzosa parecía chocar con los uniformes voluntarios, en general, que servían y sirven de parapeto, de coraza protectora, en resumen, de símbolo de autoridad, real o simulada.
Cuando vemos la bata blanca del médico ya nos tememos lo peor, cuando vemos los chalecos verdes fosforito ya adivinamos la presencia de la policía, aunque solo sea un deportista que quiere evitar accidentes o el jardinero que adecenta el césped de la rotonda. No piensen tampoco en túnicas, pijamas de cirujanos, hábitos, sotanas, togas con sus puñetas, no siempre traen buenos augurios.
Sin ánimo de comparar, la estética de las tribus urbanas y las pandillas callejeras no me provoca ninguna simpatía; incluso creo recordar imágenes en las que los probos ciudadanos, autodenominados "la manada", usaban como símbolo una camiseta corporativa en San Fermín, pero anunciando la violencia de los atributos que tienen por enseña.
Seguramente podemos observar con simpatía el uniforme con el que se protege el bombero armado con extintores, escalas y mangueras; pero no olvidemos que asociadas al uniforme muchas veces van las armas y lo que representan. Podemos ser biempensantes y sospechar que siempre nos defenderán, que estarán siempre manejadas con prudencia y gobernadas por cerebros bien amueblados; pero las realidades, con frecuencia, nos llevan por otros derroteros que conducen al conocimiento de energúmenos uniformados y armados con delirantes discursos incivilizados como los vertidos por unos guardias madrileños la semana pasada y que parecen gozar de amplio consenso entre sus semejantes, pues pocas y dignas han sido las voces que han osado denunciarlos. Ahora nos alarmamos porque la mensajería telefónica nos lo pone a tiro, pero conocer lo que se dice in vino veritas en las cantinas cuarteleras no es muy difícil, aunque no todo se claree en las redes

21 noviembre 2017

Cinco personas agreden a otra


http://www.laopinioncoruna.es/opinion/2017/11/21/cinco-personas-agreden/1237761.html

Las páginas de sucesos en los informativos periódicos ya no se prodigan sacando a la luz las descabelladas animaladas de unas personas contra otras en secciones independientes. Parece que se lleva mucho más el amarillismo sensacionalista y vendedor, que discrimina entre unos crímenes y otros.
Es, seguramente, otra cosa que tendremos que hacérnosla mirar los lectores y lectoras; somos poco congruentes como consumidores de drama y sangre, el regocijo con las vísceras de las víctimas es cada vez más repugnante.
Los que sean aficionados a rebuscar en las crónicas de muchas décadas atrás y que contengan descripciones de esas conductas violentas, fatalmente violentas, comprobarán que los delitos, llamados de honor, con víctimas de ambos sexos se ocultaban y disimulaban cuando la herida o asesinada era ella. Las luchas entre machos eran otra cosa, como la gran berreá de ciervos o corzos turrándose con sus cuernos en la época de celo; pero estamos en tiempos de lenguaje políticamente correcto y administrativamente normativizado, normalizado, para quien lo acepte y use en su coloquio habitual, oral o escrito; por lo tanto, parece que tenemos que hablar de personas agresoras y agredidas en su integridad física, psíquica o en ambas.
Últimamente parece que las agresiones entre congéneres de la misma especie toman el aspecto de la jauría frente a la presa. Eso pensaba hace días; pero, ya lo sospechaba, he llegado a la conclusión de que esa congregación de depredadores no son canes; sino que se trata de una auténtica piara de cerdos del país; que no les vengan a echar las culpas ahora a los jabalíes famélicos que invaden barrios periurbanos buscando el agua y el sustento que les falta porque los castaños o los robles no han conseguido producir menú suficiente.
También estos días comprobamos cómo alguna de estas piaras ha trashumado y demostrado su antinatural comportamiento atacando a los humanos.
Otra rebelión en la granja de Orwell, si me permiten retorcer un poco la sátira contra la tiranía en la que esos cerdos consiguen sostener su poder, creer ser el cerdo Napoleón, con el cerdo Chillón o el caballo en sus papeles de tontos útiles formando una manada frente a las ovejas y las gallinas acríticas con el poder establecido, una masa obedeciendo a los cerdos, una masa bien dominada también por el cuervo Mosés que promete el cielo, ayudada por el burro Benjamin, el intelectual que todo lo justifica, siempre y cuando los perros guardianes educados desde cachorros por el poder del pernil lo consientan. Mientras tanto, la yegua Mollie escurre el bulto pues ve cerca el fin de sus privilegios y los grandes, poderosos controladores, Napoleón y el señor Pilkington se alían, ambos con el rey de espadas en la manga, demostrando la misma catadura moral, cerdos y humanos juntos para así representar la brutalidad que sufren en la Granja. La joven violada en Pamplona está conociéndolos, otra vez, en el juicio que vuelve a sufrir; ahora son los humanos, también, los depredadores.

14 noviembre 2017

¿Qué se oculta tras un bigote? Dalí, Chaplin, Carpanta, Groucho...


http://www.laopinioncoruna.es/opinion/2017/11/14/oculta-bigote-dali-chaplin-carpanta/1235480.html

De niño recuerdo que mi padre tenía bigote. En una cena familiar -creo que Nochevieja- se levantó de la mesa, fue al baño y, después de un buen rato, regresó afeitado; solo argumentó tal arrebato diciendo que le había salido una cana en aquel bigotillo recortado propio de la época. No podía soportarlo. Creo que fue una disculpa y sigue sin él.
Desde entonces tuve una ligera obsesión con el bigote, aunque no tenía ni pelusilla bajo la nariz. Con la llegada del primer televisor a casa, también lo hizo el bigote de Dalí y los comentarios de los adultos, que si estaba loco, que si era un extravagante; el caso es que yo no me enteraba de quién era el personaje. Después supe del genio surrealista, claro, de la leyenda de su alopecia subnasal y de los supuestos postizos, dicen que ocultos en alguna sala del Louvre. El de Chaplin ya nos había llegado con el cine, aunque El gran dictador me haya dejado recuerdos agridulces.
Sí conservo en la retina el de Carpanta, personaje de tebeo que retrataba el hambre en la España franquista de la posguerra, que solo soñaba con pollos asados para mover su bigote. No sé si el código penal de hoy condenaría tal asociación de ideas, la de los pelillos con la pobreza alimentaria que dibujó con toda su mala leche un Escobar represaliado para dejar claro que solo escapaban del racionamiento los de siempre.
Las gafas, la nariz y el bigote de Groucho han sido iconos, aunque hubiesen empezado siendo simple maquillaje; en contra de lo que dicen del bigotillo nazi, bien recortado para adaptarse sin dificultad a las mascaras de gas. Su socio, Franco, dicen que trataba de ocultar su voz aflautada, poco varonil.
Para los tercos, parece que el premio se lo lleva el de Nietzsche, aunque le resultase incómodo, llegando a sentenciar desde su lógica: "He decidido que nunca más me recortaré el bigote. Es demasiado esfuerzo".
Pero apenas hemos hablado de cocina y de bigotes. Cuando George Orwell deja el ejército en 1928, llega a Francia y nos cuenta en la desternillante Sin blanca en París y Londres, sus andanzas como lavaplatos ( plongeur) luciendo bigote en un restaurante de postín cuando le obligan a rasurarse, puesto que sólo el cocinero podía lucirlo, eran sus galones, su superioridad frente a los subalternos.
Quizá sea lo que le haya pasado al subalterno huésped penitenciario, apodado el Bigotes, que revivo en el magín, mostacho rampante, cuando hizo el paseíllo del Escorial en la boda los Aznar-Agag, sin vergüenza. Esta semana pasada declaraba ante Las Cortes valencianas, que investigan la Gürtel, mal afeitado y reivindicativo pues no se le deja seguir pochando en sus trajines con los puerros o, vaya usted a saber, si con suprasueldos ensobrados para mayor gloria de sus populares protectores. Eso sí, ya sin bigote, redimido, sin la protección del camuflaje.

07 noviembre 2017

Si dejas pelos en la gatera, ¡ponte peluca ya!


http://www.laopinioncoruna.es/opinion/2017/11/07/dejas-pelos-gatera-ponte-peluca/1233307.html


Si pierdes tu pelo es muy normal
los árboles pierden sus hojas también
tú no te preocupes por tal estupidez
pero si de ello te quieres curar 
Ponte peluca, ponte la peluca ya
Orquesta Mondragón (1980)
No sé si cuando Gurruchaga cantaba este estribillo en 1980 se acordaba de alguien, es probable que sólo hiciese referencia al paso del tiempo y las formas de disimularlo. Seguramente el camuflaje de don Santiago -ya no le pueden llamar zombi- fue el más inocente de la España contemporánea, lucía aquella horrible peluca que le proporcionara Teodulfo Lagunero para cruzar la frontera en 1976, forzar la legalización del PCE, convocar una rueda de prensa en Madrid el 10 de diciembre y provocar su detención el 22 por Rodolfo Martín Villa. Un desencuentro pactado para entrar en España, recuperar la normalidad política, partidos, sindicatos, elecciones, reuniones, manifestaciones para sacar a los presos de las cárceles, que no estaban allí de electorales vacaciones con garantía letrada, sin tortura. Es decir, acciones todas muy cívicas y pacíficas que no son patrimonio de las derechas que estos días se arrebujan en todas las banderas; afortunadamente sin acompañar féretros de abogados, de obreros alaveses ni de estudiantes cazados a tiro limpio.
Sirva esta digresión sin nostalgia para leer con otra perspectiva lo acontecido los últimos días en lo que algunos llaman país; otros, España; otros, estado y otros no lo mentamos, por si las moscas nos infligen más vituperios de los soportables con salud.
Siendo lego de solemnidad en el discurso forense no osaré tratar de poner en tela de juicio las opiniones ni los autos de la magistratura competente en asuntos penales que afectan a nacionalistas catalanes, por mor de sus decisiones. Podría arriesgar a pronunciarme sobre sintagmas redactados por fiscales que rezan sobre lo dura que sería la caída desde supuestas alturas, pero no creo que merezca la pena, ni lo de rezar ni lo de las penas.
Hablando de penas, algunos las disfrutan a todo trapo en los medios, otros agazapados en tierras de chocolate y mejillones, en un artificial país tan garantista como xenófobo. El resto estamos condenados a penas de trabajos forzados para entender las campañas electorales de cara al 21 de diciembre, llenas de puñaladas y traiciones en las que se ven envueltas las derechas catalanas y españolas, mientras que alguna presunta izquierda sigue mirando al dedo y no a la luna. Supongo que hoy ya sabremos qué será de nosotros.
Olvidaba decir que me importa un bledo si el expresidente catalán tiene peluca o se afeita el cráneo "previlegiado"; solo deseo que alguien le explique qué fue la Asamblea de Catalunya, desde la Capuchinada de Sarriá en 1966, la Caída de los 113 en octubre de 1973, hasta las elecciones de 1977.

03 noviembre 2017

¿Por qué dicen relato, si en realidad es cuento?


http://www.laopinioncoruna.es/opinion/2017/10/31/dicen-relato-realidad-cuento/1231161.html


"Cuando siento que voy a vomitar un conejito me pongo dos dedos en la boca como una pinza abierta, y espero a sentir en la garganta la pelusa tibia que sube como una efervescencia de sal de frutas.(?) El conejito parece contento(?) parece satisfecho de haber nacido".
Carta a una señorita en París. Julio Cortázar
A pocos les ha pasado inadvertido que los nacionalistas llamen "relato" al mito, al cuento. ¿Qué relato? ¿Hay un relator-autor conocido? ¿Hay varios? La verdad es que desde el inicio simbólico promovido por los sectores burgueses de toda la vida, me han sorprendido varios anuncios; pero, sobre todo, el del llamado "relato".
Hasta ahora el "relato" no era más que una narración breve, de menor extensión que la novela, en la que el autor contaba una breve anécdota, más o menos verosímil, más o menos fantástica, para el goce y entretenimiento de los lectores; en resumen, consiste en relatar una determinada historia, pero sin reflejarla en toda su extensión; sino más bien en presentarla compactada y solamente haciendo hincapié en algunos detalles y momentos que serán en los que más énfasis ponga el autor o relator a la hora de ofrecérnosla, él considera que son los decisivos y dejará a la libre imaginación de los lectores los detalles superfluos para que estos los compongan y completen la historia como más les plazca, porque la idea es lograr el impacto verosímil; a diferencia de lo que ocurre con el cuento, en el cual todos los indicios irremediablemente deberán llevarnos al nudo y finalmente al desenlace, exigiendo un diseño previo del autor, es decir, ficción.
Es posible, por lo tanto, que los protagonistas del llamado proceso nacionalista no nos estén relatando nada, sino que, en realidad, nos estén contando un cuento. Benditos cuentos de Julio Cortázar que cuando escribió el que encabeza, él mismo estaba padeciendo su neurosis, que, más o menos como narrador, se le calmaba cuando escribía, cuando vomitaba conejos o palabras, para terminar trágicamente.
Desde hace tiempo, del cuento sabemos cuál es la introducción, el meollo lo hemos ido conociendo y el desenlace lo dejaremos a los demiurgos, esos seres que etimológicamente trabajan para el pueblo, que dominan un arte, oficio o profesión, autores, artífices que, a menudo, formaban una asamblea de notables, por supuesto, restringida. Desengáñense, haberlos haylos, aunque en el BOE sean sustituidos por otros de su misma calaña y las mismas intenciones de hacer caja con los votos, caiga quien caiga. Sigo sin fiarme de los salvadores, ni de caperucita ni del lobo, sapos y príncipes azules; al final solo son contables de votos, relatores épicos del desencuentro pactado en el que ocultarán los casos Palau y Pretoria con Macià Alavedra y Prenafeta en el candelero bajo la sombra de Pujol.

24 octubre 2017

La risa del conejo


http://www.laopinioncoruna.es/opinion/2017/10/24/risa-conejo/1229017.html


"El nacionalismo es la extraña creencia de que un país es mejor que otro porque tú has nacido ahí".
George Bernard Shaw
Como a estas alturas ya no me llaman progre y, frecuentemente, sí me doctoran por lo contrario, me soltaré las canas que quedan para recordar reflexiones aprendidas de joven y sin usar durante mucho tiempo, para ser políticamente correcto. Ya decía Baroja lo poco bonito que es sustituir, con un problema casero, los grandes problemas que padecemos, él solo veía en el nacionalismo la vanidad, la antipatía y el interés. Conste que esto solo me viene al magín por culpa del Brexit y los problemas de la primera ministra Theresa May para pagar la factura de ser distintos. No vayan a creer que me consuelo por ser maketo, un señor moreno y bajo, lujurioso e irreligioso, según Sabino Arana; tampoco estaba tan descaminado el prócer vasco.
Siempre me pareció Josep Pla un tipo pragmático y modernizador, que contaba magníficamente lo que veía, aunque ahora sus paisanos no lleven flores a su tumba; seguramente será porque su fino humor sigue siendo molesto, como cuando dijo: " El nacionalisme es com un pet, no més li agrada a qui se´l tira" ("El nacionalismo es como un pedo, solo le gusta al que se lo tira").
La heterodoxia es una sana costumbre que conviene cultivar, suele ser una prueba del algodón para saber si vas bien orientado viendo llegar los golpes; al bueno de George Orwell le cayeron de todos los lados y seguimos leyendo 1984 o recordándole cuando señalaba: "El nacionalismo es hambre atemperada por el autoengaño (...) no solo desaprueba las atrocidades cometidas por su propio lado, sino que tiene una extraordinaria capacidad para ni siquiera oír hablar de ellas". Tampoco suele salir indemne Aldoux Huxley por haber difundido la idea de que tanto el capitalismo como el nacionalismo son fruto de la obsesión por el poder, el éxito y la posición social.
Seguramente todos ellos hayan sufrido las influencias nocivas de Nietzsche cuando sostenía que "la ciencia y el nacionalismo son cosas que se contradicen, aunque los monederos falsos de la política nieguen ocasionalmente ese saber".
Mas permítanme acabar el folio haciendo patria, es un decir, recordando y recomendando las crónicas de Julio Camba, gran figura del humor inglés que, desde Berlín, París, Londres, Nueva York, Roma, Lisboa, Estambul, y sin saber idiomas, todo lo percibía con una ironía perpleja. Hoy puede venir a cuento refrescar cómo cuenta la intervención de Ortega en las Cortes afirmando que los conceptos de autonomía y federalismo no eran análogos, sino opuestos. Para Camba no era lo mismo ensamblar las piezas de un puzle que coger un cuadro y hacerlo añicos, al objeto de crear un puzle.
No sé yo en qué estaría pensando Camba cuando sostenía que todos tenían una verdadera risa de conejo, sin conocer a Rajoy ni a Junqueras. Yo, en ocasiones, me la veo en el espejo.

17 octubre 2017

Puestos a sentir, reivindico mi independencia


http://www.laopinioncoruna.es/opinion/2017/10/17/puestos-sentir-reivindico-independencia/1226807.html

Creo no ser el único que sufre hartazgo con tanto sentimiento visceral, no es que mi capacidad de sentir se haya debilitado o me haya convertido en insensible; pero sí estoy dolorosamente harto de que mi ciudadanía, mis derechos individuales se pisoteen sin pudor.
Cuando hablo de mis condiciones de vida, de mis libertades, de mis derechos, no quiero ser beneficiado por los sentimientos que fluyan de mis neuras, quiero que todos seamos tratados equitativamente, aquí y en Berlín. Seguro que ya están pensando que persigo objetivos ambiciosos, es cierto; pero también podrían ser los mínimos que conociera Europa en los pocos años que nos quedan a los que la hemos visto nacer. No son sentimientos, es raciocinio cabal; en Santoña, en Algeciras, en Burriana y en Lugo; en Sicilia, en Babiera, en Escocia y en Praga debemos tener el mismo acceso a los tratamientos médicos, a la misma tecnología aplicada a la educación, independientemente de donde nos hayan firmado la partida de nacimiento o de dónde hayamos encontrado un lugar para pacer; pero, por ejemplo, con la tarjeta sanitaria europea atendemos y nos atienden en cualquier lugar de Europa, mas con la tarjeta sanitaria autonómica depende del lugar en el que tengamos el esguince para que seamos vendados en condiciones.
Cada vez me siento más independiente de los postulados que defiende cierta izquierda contaminada por intereses territoriales y fronterizos, antes que defender los intereses de su clientela, los menos favorecidos.
Algunos parece que aún siguen las perlas de Heribert Barrera, presidente de ERC en 2001:
"Veo el futuro un poco negro. Si continúan las corrientes migratorias actuales, Cataluña desaparecerá". "Hay una distribución genética en la población catalana que estadísticamente es diferente a la de la población subsahariana, hay muchas características de la persona que vienen determinadas genéticamente, y probablemente la inteligencia es una de ellas", "El único recurso que tendremos para subsistir [si Cataluña no se separa del resto de España] es ser un grupo étnico, una minoría nacional en el territorio de Cataluña".
Con este tipo de declaraciones se entiende que uno de los primeros políticos que rindió homenaje a Barrera tras su muerte fuera el líder de la xenófoba Plataforma per Catalunya, Josep Anglada, y por Jordi Pujol y Marta Ferrusola, con semejantes y parecidas expresiones.
Resulta absolutamente inaceptable que los partidos y formaciones de izquierda en Cataluña y demás taifas se alineen con semejantes personajes y sus secuaces en la sombra, como Artur Mas, que, a mayor abundamiento, han demostrado que su principal objetivo al detentar el poder es apropiarse de los bienes de todos para su mejor beneficio.

La obsolescencia es el cajón de los tristes

http://www.laopinioncoruna.es/opinion/2017/10/10/obsolescencia-cajon-tristes/1224819.html

En recuerdo de Marta Mata
Cuando me documentaba, sin ser muy feliz, cayó en mis manos un ejemplar de la obra de Edgar Faure, Aprender a ser (1972); aquello me venía grande hace más de cuarenta años. El autor, presidente de la Unesco, recopilaba los datos más relevantes de escolarización y distribución de los recursos destinados a la enseñanza a nivel mundial y sentaba las bases para lo que debería ser la práctica educativa en lo sucesivo, tanto en función del desarrollo económico y social, como en función del crecimiento personal del individuo. Lógicamente, en aquel momento, para mí era ilegible hasta el propio título. ¿Cómo se puede aprender a ser leyendo un libro? Tardé en saber que el autor hablaba de un modelo, alternativo a la educación tradicional, basado en "aprender a aprender" por culpa de la obsolescencia de los conocimientos.
Pasaron años hasta que llegó el informe Delors, La educación encierra un tesoro (1989) cuando ya las TIC llamaban a la puerta, a la que el cartero nunca llama dos veces, obligando a tener esquemas movibles aplicables a situaciones contingentes, ese era el objetivo y era allí donde el quehacer educativo se enfrentaba a una realidad para buscar nuevos saberes, el pensamiento crítico y el respeto a la diversidad que dejaban obsoletas a las viejas instituciones.
Unos por otros la casa sin barrer. Irina Bokova (2015) presenta Replantear la Educación. ¿Hacia un bien común mundial? Frente a la obsolescencia proclamada medio siglo antes, patéticamente, muchos responsables se empeñan en remar contra esa denominada "nueva educación", ¿quizá todos los gobiernos eran conscientes de que la educación es un arma de construcción masiva de libertad individual y colectiva que no querían poner en manos de la ciudadanía?
A lo peor es cierto que se ha usado mal el recurso en cuestión y que ni la burocracia administrativa ni los idearios sectarios han tenido en cuenta a Faure o Delors, pese a que gozan de buena salud las evidencias que todos los expertos reclamaban preguntándose si era posible desarrollar una educación integral para la persona (ser y saber) que preparase para el futuro.
Entonces crear ya era la clave del nuevo aprender, la obligación era alejarnos del reduccionismo pedagógico que suponía dedicar los tiempos y los esfuerzos en dominar técnicas o adquirir información, algo que -ya entonces- se veía venir como ineficaz, al comprender que los alumnos podían hacerlo por sí mismos. Lo aprendíamos de Cataluña del movimiento Rosa Sensat que promovía la socialista catalana Marta Mata, gracias a ella leíamos algo en catalán, descubríamos a Freinet y el movimiento cooperativo; pero poco después la realidad nos descubrió tristes y obsoletos. Lástima que el sectarismo y burocracia lo malograsen.

Tal y como están las cosas ¿nos bajamos?


http://www.laopinioncoruna.es/opinion/2017/10/03/cosas-bajamos/1222682.html

Ante la posibilidad de despiece de la túnica sagrada, la nación real de los ciudadanos debería optar a elaborar una túnica laica y no reclamar una parte de la reliquia
M.V. Montalbán 17/2/2000
Antes de esta reflexión, M.V. Montalbán ya me había dado a entender que el estado-nación no gozaba de buena salud, ni el del nacionalismo español ni los que se reinventasen al abrigo del carlismo de Casanova y otros tantos a los que se les hacen ofrendas florales una vez al año, el 11 de septiembre o cuando les toque.
Tampoco sé hasta dónde habrá llegado la resaca del 1-O en Cataluña, tampoco me gustan los referendos, ni legales ni ilegales, siempre tienen trampa, la que el convocante tiende a los votantes para que acudan a celebrarle la ocurrencia.
Era un renacuajo en 1964 cuando el Che hablaba ante la ONU, Mao daba doctrina, se notaba el baby boom, sonaban Los Sirex y Conchita Velasco, las faldas eran más cortas y a Manolo Escobar no le gustaban; pero también CCOO denunciaba las injusticias en las minas asturianas; mientras, un tragicómico Manuel Fraga montaba la campaña propagandística del franquismo, los 25 años de victoria, llegaba el turismo, el 600 y el Spain is different. No importaban ni la ejecución de Grimau ni la guerra de Ifni, el TOP o las represalias por el Contubernio de Munich. Había empezado con el Te Deum en el Valle de los Caídos y terminado con la película Franco ese hombre salvándonos del comunismo. Menos mal que Marcelino le metió un gol a la Rusia, ondeando la hoz y el martillo en el Bernabéu.
Recuerdo más claramente elecciones del tercio de cabeza de familia llenando a paladas las urnas de papeletas, alguno sin saber si era candidato o simple votante. Todo eso fue una simple y burda manipulación de sentimientos y estómagos que aún recordaban las cartillas de racionamiento.
Avanzando en el tiempo, la huelga general masiva del 14-D podría haber sido considerada como plebiscito -no fue así-, los guardias de la porra se ganaron el sueldo y los nacionalistas estaban desaparecidos limpiándose los ombligos, porque la nación de los ciudadanos de Habermas sostenía "la prioridad de la nación real de los ciudadanos, sobre la imaginaria nación de los miembros de una comunidad histórica y étnica". Los nacionalpujolistas han de hacérselo mirar, su normalización, lingüística y de las otras, y su hegemonía no siempre tendrá sustento legal ni social, porque la política de hechos consumados y no consensuados ha aplazado el protagonismo de la nación real de los ciudadanos, puesto que los votos no se depositan sin haber explicado lo que se vota; puesto que la policía cobra para perseguir chorizos y violadores, puesto que los juzgados han de priorizar sus labores, puesto que los presidentes de los gobiernos han de gobernar olvidando la campaña electoral.
Parece que hoy los nacionalistas gobernantes convocan huelga general, ¿Es por las pensiones? ¿Por la renta básica? ¿Contra la reforma laboral? No creo, supongo que será por sentimientos. Lo siento.

26 septiembre 2017

Sigue habiendo pobres sin patria, oigan


http://www.laopinioncoruna.es/opinion/2017/09/26/sigue-habiendo-pobres-patria-oigan/1220532.html


(...) Miles de niños y nadie allí para cuidarlos, nadie grande, eso es, excepto yo. Y yo estoy al borde de un profundo precipicio. (?) si algún niño echa a correr y no mira por dónde va, tengo que hacerme presente y agarrarlo. Sería el encargado de agarrar a los niños en el centeno. Sé que es una locura; pero es lo único que verdaderamente me gustaría ser.
Reflexión de Holden Caulfield, protagonista de 'El guardián entre el centeno', J.D. Salinger


Ahora que todos se preocupan de los sentimientos, se movilizan por los sentimientos, se embadurnan de identidades, ahora que andan buscando como locos a topógrafos que delimiten claramente las fronteras, quizá sea el momento adecuado para detenerse y mirar alrededor, no importa de qué lado de la raya divisoria ni al borde de qué precipicio estemos.
En un contenedor de basura urbano un hombre pobre, excluido de las bondades de la sociedad, encontró a un bebé recién nacido, de pocas horas; gracias a su aviso la criatura vive, no ha caído al precipicio y su rescatador sigue buscando chatarra en los contenedores, el guardián entre los desperdicios.
En las dos trincheras de la demagogia hay pobres que no despiertan sentimientos, que no agitan banderas, que comen caliente cuando hay una oportunidad, que hablan como les da la gana; pero normalmente no hay nadie que les escuche.
No saben nada de los 40.000 millones de euros, o los que fueren, del rescate a la banca, no saben nada de los pufos, condenas escurridizas, desfalcos y atracos de los cabecillas a ambos lados de las fronteras. Los más afortunados sabrán algo de rentas de inserción, de beneficencia, de almuerzos de caridad; pero todos siguen pendientes de lo bien surtidos de basura reciclable que estén los contenedores, la chatarra no tiene idioma ni pasaporte, nadie les pide la factura de los ferranchos rescatados esta noche, ni si son de contrabando. Ni las sociedades de las banderas ni sus gobiernos quieren aplicarle el IVA a la desvencijada silla de playa de hierro oxidado o a los gramos de cobre del motor de aquel juguete abandonado. Ellos también son juguetes abandonados y les importa un higo todo el entusiasmo que desbordan y derraman las almas cantoras y abanderadas que abarrotan plazas y calles, que les ignoran, que no son de su clase, que no se pueden mezclar así como así. A fin de cuentas aquellos que vociferan fabrican hijos de pura raza y, si alguno tiene la mala suerte de aparecer en el contenedor de basura, siempre hay un sin patria para rescatarlo y buscarle quien le dé refugio al amparo de alguna bandera y le enseñe alguna lengua. El idioma de los contenedores de basura y de los usufructuarios de sus beneficios es universal, afortunadamente para ellos. Es lo único que tienen, mientras rescatan bebés.

25 septiembre 2017

Mi filosofía


http://www.laopinioncoruna.es/opinion/2017/09/19/filosofia/1218492.html

Evidentemente no quiero castigar a nadie con un sermón sobre los principios éticos que me gobiernan. Todo es más simple -solo un recuerdo de mi Bachillerato hace 45 años- en estas fechas en las que se reivindica de nuevo, con sobradas razones, la asignatura en el Bachillerato actual. En aquel viejo sistema educativo que perduraba aún en los primerísimos años setenta llegábamos a sexto de Bachillerato para titularnos después de la reválida. Los de letras y los de ciencias, todos -y no digo todas, porque no convivíamos en las aulas- nos encontrábamos con una nueva asignatura, la filosofía, y un nuevo libro de texto que no recuerdo haber abierto nunca.
A don Luis ya lo conocíamos por tratar, con mucho esfuerzo y escasa metodología, que memorizásemos la historia de la literatura; pero nadie pensaba encontrarlo como profesor de filosofía, no por un temor especial -pues era benigno calificando si dominabas el arte de las aves charlatanas- pero había incertidumbre.
Había razones para tal sensación de indefensión ante la novedad; comenzaron las clases y nuestros esfuerzos se vieron obligados a memorizar las figuras de los silogismos de la lógica aristotélico-tomista, es decir, un baño de escolástica para grabar a fuego: barbara, celaren, darii, ferio, cesare, camestres, festino, baroco, darapti, disamis, datisi? Disculpen si el orden es incorrecto, si faltan figuras? es memoria pura y dura.
Evidentemente no supimos nada del pensamiento de Aristóteles, ni situarlo en el mapa ni en el tiempo; tampoco de Tomás de Aquino y mucho menos de Descartes, que lo desbarata todo. Así vegetamos meses esperando superar la maldita reválida.
El resto del curso lo pasamos pasmados escuchando a don Luis hablar de sus intereses y sus últimas lecturas. Quiso poner buena voluntad para explicarnos los rudimentos del psicoanálisis, de Edipo, Electra, la interpretación de los sueños, siempre evitando -no podría ser de otra manera- cualquier referencia a la sexualidad. Para muestra valdrá un botón, acabé aquel Bachillerato sabiendo, más o menos, que [ Froid] era el protagonista y qué era el subconsciente; pero tardé un par de años en saber que aquel [ Froid] era Freud. El final del curso se dedicó a la parapsicología, a las curiosidades que aquel buen hombre estaba investigando y con las que nos dejaba embelesados, muertos de curiosidad.
En resumen, sí tuve un curso de filosofía; pero los recunchos grabados en mi memoria no me aportaron herramientas para entender el mundo, sigo buscándome la vida. Por lo tanto solo espero que los adolescentes de hoy no tengan las mismas carencias y disfruten del conocimiento, del pensamiento crítico y de su autonomía personal o de su autodeterminación, como prefieran, para defender sus derechos ciudadanos.

No molan las fronteras ni las naciones


http://www.laopinioncoruna.es/opinion/2017/09/12/molan-fronteras-naciones/1216452.html

La nación es un sistema de egoísmo organizado. La idea de nación es uno de los medios soporíferos más eficaces que ha inventado el hombre. Bajo la influencia de sus efluvios, puede un pueblo ejecutar un programa sistemático del egoísmo más craso, sin percatarse en lo más mínimo de su depravación moral. (Rabindranath Tagore)
Hasta hace unos días pensaba que nuestra misión fundamental era arreglar los problemas de Venezuela, por activa o por pasiva; aunque los venezolanos, todos, no se dejaran ser gobernados por, no sé, por nosotros, por nuestros jefes; en fin, qué más da, ya no se gasta tanta tinta metiendo las narices allí; pero tanta Venezuela acabó por recordarme a Cela y su obra La catira (1955), un encargo pintoresco del dictador venezolano Marcos Pérez Jiménez, pagado a peso de oro, que acabó en fiasco, despellejado a ambos lados del charco. Cela salía de su casticismo chocarrero, infantil, vanidoso y cursi de la posguerra, antes de ingresar en la RAE (1957), un Cela claramente desarrollista.
Su objetivo es la invención venezolana de la etnia llanera y La catira fue una superchería dialectal que no soporta la comparación con Doña Bárbara, del presidente Rómulo Gallegos derrocado por el mecenas de Cela. La catira chocó con un nacionalismo rampante indigenista, con el Canto General de Neruda y con el cóctel criollo y paternalista en Venezuela, la República Dominicana de Trujillo o en la Cuba de Batista.
La dictadura de Pérez Jiménez trataba de promover la imagen de Venezuela en el extranjero, en la España de Franco, de los canarios y gallegos; con ella trata de que se inicie la epopeya fundacional de Venezuela, la novela del Nuevo Ideal Nacional, con el foco en el liderazgo de Pipía (Primitiva) Sánchez, conocida como la catira, rubia, blanca, de mucho carácter, con amor a la tierra y su riqueza, a los valores llaneros y conservadores, el culto al pasado, la lealtad al jefe, el arrojo personal, el machismo y la fuerza. La catira está al servicio del poder del nacionalismo perezjimenista, ya entonces bolivariano, y del viejo concepto de la Hispanidad neoimperialista de Franco, que poco coinciden y lógicamente chocan.
Que conste que no quería hablar de lo que pasa por aquí; pero veo que se quiere presentar el nacionalismo como algo natural, todos tienen patria, sin autonomía de pensamiento, sin el derecho a no creer, básico para la convivencia en libertad, yendo al choque de nacionalismos, sin diálogo, negociación o compromiso, que nos transforma en imbéciles, leves o graves, forofos o aficionados al degüello; sin ciencia, el nacionalismo atonta incluso a los que presumen de origen carolingio, no estaría mal recordar a Rosa Luxemburgo (1908) cuando afirmaba que: "En la sociedad no existe la nación como entidad socio-política homogénea, sino que en cada nación hay clases sociales con intereses antagónicos".

Relaciones laborales negociadas ¿dónde?

http://www.laopinioncoruna.es/opinion/2017/09/05/relaciones-laborales-negociadas/1214468.html

Podríamos remontarnos a la última reforma laboral, que dinamitó los convenios colectivos, o a la anterior o sus antecedentes desde el Estatuto de los Trabajadores y la Constitución para percatarnos de que la degradación de la negociación colectiva es la marca de la casa en las relaciones laborales entre trabajadores y empresas en contra de lo dispuesto en la CE en los artículos 7, 28, 35 o 37 que salvaguardan la sindicación, el derecho a la huelga, a la negociación colectiva y a promover el conflicto colectivo por los trabajadores.
Los últimos días hemos asistido a dos acontecimientos realmente graves; el primero protagonizado por la diputada popular Celia Villalobos cuando interrumpe a gritos a la diputada Yolanda Díaz con chulería para impedir que siguiese defendiendo sus argumentos frente a la ministra Báñez en la Comisión de Empleo y Seguridad Social del Congreso. La verdad es que doña Celia no hilvanó dos frases seguidas y solamente hay que contemplar su compostura poligonera para entender las razones de sus exabruptos; la diputada interrumpida le cedió el uso de la palabra, mas doña Celia no fue capaz.
El segundo suceso que les comento tiene un antecedente grave, la falta de acuerdo en la negociación del pacto salarial de 2017, que tradicionalmente servía de referente a toda la negociación colectiva del país; los sindicatos reivindicaron que si la economía ya iba mejor, tendría que reflejarse en los salarios; pero la patronal no lo entendió así cerrándose en banda a cualquier acuerdo y consciente de que tal diferencia acarrearía conflictividad grave, no en grandes empresas o convenios, sino en la aparición de aparatosos desacuerdos gremiales, subsectoriales, sin cobertura sindical, que alterarían mediáticamente las relaciones laborales y facilitarían la excepcionalidad dificultando el derecho de huelga e imponiendo arbitrajes que dictarían laudos restringiendo derechos.
Evidentemente hablo del conflicto del personal de seguridad en el aeropuerto del Prat que se ocupa de esas labores desde que se privatizó el trabajo que hacía la Guardia Civil. A partir de entonces, empresas como Eulen compiten a la baja en los concursos de adjudicación y las consecuencias se ven en las mermadas nóminas de la escueta plantilla y en la imposibilidad de prestar el servicio público como es debido.
Es decir, la imposición del arbitraje desequilibra la posición de los trabajadores por decisión gubernativa vaciando de contenido sus derechos.
Cuando la huelga afecta a los servicios públicos, nuestro ordenamiento contempla el establecimiento de un límite extraordinario al ejercicio del derecho de huelga mediante la articulación de los servicios mínimos que en el caso de El Prat se han impuesto de forma abusiva, ya que alcanzan el 90%, una ilegal práctica generalizada. De ahí que el arbitraje obligatorio no resulte justificado y suponga una injerencia del poder gubernativo impropia al suplantar a las partes legitimadas, representantes de trabajadores y empresarios, en la función reguladora de las condiciones de trabajo.

Abu Muhmmad Ali Ibn Hazm (994-1064)


http://www.laopinioncoruna.es/opinion/2017/08/29/abu-muhmmad-ali-ibn-hazm/1212460.html

Dejad de prender fuego a pergaminos y papeles,
y mostrad vuestra ciencia para que se vea quién es el que sabe.
Y es que aunque queméis el papel
nunca quemaréis lo que contiene,
puesto que en mi interior lo llevo,
viaja siempre conmigo cuando cabalgo,
conmigo duerme cuando descanso,
y en mi tumba será enterrado luego.

Ibn Hazm de Córdoba
Traducción de José Miguel Puerta Vílchez

He recordado a este autor al conocer la existencia del joven yihadista de 22 años Yassin Ahram Pérez, alias al Qurtubi -el Cordobés-. Hijo de doña Tomasa Pérez y de familia asentada en Alcolea (Córdoba) antes de mudarse a Siria; Pérez ha sido elegido para comunicarnos su solidaridad con los terroristas que atentaron en Cataluña y para avisarnos de que su organización criminal seguirá matando y a la que deseo el fracaso total.
Su discurso no parece muy dotado de lecturas variadas y olvida la raíz de muestra cultura mestiza, de la que él es un claro ejemplo, fruto de la convivencia más o menos cordial durante siete siglos con abundantes ejemplos en la toponimia, la arquitectura o los festejos populares. No olvidemos que dicen del califa Abderraman III que se acomplejaba de ser navarro, pelirrojo y de ojos verdes.
Seguro que este joven aprendiz de intolerancia no conoce algunas obras indispensables de nuestra cultura, también suya, ni al autor citado. Espero que su lectura también le libre de olvidar la mezcla de sangres y razas de las que venimos por muy puros cristianos viejos que nos consideremos.
Ibn Hazm; musulmán, pero no árabe, nació en los últimos años del S. X en el seno de la aristocracia cordobesa, antes del estallido de la guerra civil que quebró su apacible vida con los Omeya, contra los que apoyaban a Almanzor; pero no ha pasado a la historia por estas vicisitudes, sino por ser un ilustre polígrafo conocedor de Aristóteles y autor de títulos relevantes en diferentes disciplinas; de entre ellos destacaremos Tawq al-Hamama o El collar de la paloma. Tratado sobre el amor y los amantes, "el libro más ilustre sobre el tema del amor en la civilización musulmana" para Ortega y Gasset, un breve clásico para degustar en pequeñas dosis por su gran descripción del amor en S. XI intentando descubrir lo que tiene de común e inmutable a través de los siglos.
En ella nos describe el amor basado en su propia experiencia, su naturaleza y sus metamorfosis, las personas que se enamoran, sus trucos y recursos, sus aliados, los signos que permiten identificarlos, los fundamentos, la esencia, los accidentes o las malaventuras del amor; tan clásica como el Ars amandi de Ovidio y tan contemporánea como los Fragmentos de un discurso amoroso de Roland Barthes.
No tendría mayor transcendencia si no hubiese influido en la lírica medieval o en el Libro de Buen Amor del Arcipreste de Hita. Espero que Pérez lo disfrute cuanto antes.

La verdad sigue estando mal vista

http://www.laopinioncoruna.es/opinion/2017/08/22/sigue-estando-mal-vista/1210593.html

Pues amarga la verdad,
quiero echarla de la boca;
y si al alma su hiel toca,
esconderla es necedad.
Quevedo
Hemos soportado muchos atentados terroristas a manos de asesinos irracionales, los condenamos y combatimos; hemos tratado de buscar una explicación y nuestros dirigentes políticos nos han pastoreado con sermones alabándonos y pasándonos la mano por el hombro explicándonos que nuestro comportamiento ciudadano es ejemplar, que somos víctimas inocentes ¡qué descubrimiento!; pero a un servidor el pasmo le dura por no lograr que se expliquen las razones más objetivas por las que estas tragedias ocurren, además de decir que somos los buenos y los otros, los malos.
Al final terminamos leyendo vómitos de cuatro descerebrados de la caverna que siempre aprovechan su pisuerga particular para avivar las llamas fascistas y oyendo los silencios con sordina de opiniones más sensatas, pues sus verdades levantan urticarias. Podríamos recordar que se trazaron fronteras a tiralíneas en la descolonización, se crearon países artificiales de acuerdo con los intereses de potencias occidentales, se crearon y derrocaron líderes al antojo de los intereses económicos en Oriente Medio y el sudeste asiático. Pero no es nuevo.
Recordemos el ejemplo del Galdós de principios del siglo pasado, autor de una carta poderosa y crítica con la guerra del Rif (1909) y con la Iglesia aliada de los magnates piadosos (los Romanones, Güell y Comillas) que explotaban las minas de hierro con la defensa armada de 20.000 hombres como carne de cañón. Su Carta al pueblo español empieza con una llamada a la acción para acabar con los problemas del Rif, causantes de las protestas que acabarían en la Semana Trágica en Barcelona y responsabilizando a Maura. En las últimas frases de la carta, el autor pide que terminen la guerra:
"Apaguemos de un soplo los cirios verdes que alumbran el siniestro Santo Oficio llamado por mal nombre Defensa Social, vergüenza de España y escándalo del siglo, y pongamos fin a las persecuciones inicuas, al enjuiciamiento caprichoso, a los destierros y vejámenes con ultraje a la humanidad y desprecio a los derechos más sagrados. . . No temamos que nos llamen anarquistas o anarquizantes, que esta resucitada Inquisición ha descubierto el ardid de tostar a los hombres en las llamaradas de la calumnia".
Galdós fue censurado y amenazado por cantar las verdades en sus cartas y sus obras; por denunciar el origen de los problemas sociales de los españoles, recibía anónimos de "patriotas" criticando su actitud, acusándole de ser agente pagado de otro país y traidor: "? e llegado (sic) de Madrid para cortarle el cuello y arrastrar tu cabeza por la ciudad de Santander, te voy a quitar la Vida". "Ultimo abiso Galdos estas (sic) comprometido para perseguir al Papa y a la Iglesia. Yo también estoy comprometido para quitarle la vida debías de estar fusilado como Ferrer [y Guardia].
Habrá que seguir buscando a quien esconde la verdad.

¿Hoy se festeja el 'Ferragosto'?


http://www.laopinioncoruna.es/opinion/2017/08/15/hoy-festeja-ferragosto/1208662.html
Un amigo muy descreído de todo lo divino y humano sigue conservando en su vocabulario coloquial la expresión día santo para referirse a cualquier festivo, del santoral católico o del calendario laico; si habla en confianza tanto le da decir que es día santo el 1º de mayo o el 25 de diciembre, no son días laborables.
Pues bien, por estos lares peninsulares tenemos la certeza de que a cualquier lugar que nos acerquemos, seguro encontraremos fiesta y pitanza, hoy asar sardinas, carne y criollos, freír pescadito en la feria de Málaga, vestirse de chulapos en Madrid y buscar al bombero que baje a La paloma, hacer caldereta con la vaquilla, el caso es buscar ocasión para el jolgorio, la escapada de puente o celebrar el día grande de las vacaciones que comienzan o acaban.
Muchas curiosidades encontraremos por España; pero quiero comentarles la celebración originaria que conserva su nombre en Italia, Ferragosto. Si están hoy por el país vecino olvídense de comercios tradicionales abiertos y vayan a museos y monumentos accesibles al turista.
Desde el punto de vista astronómico el 15 de agosto la estrella de la madrugada, Sirius, aparece por primera vez visible al alba, y señala el comienzo del período de descanso en las labores agrícolas. Con el tiempo el Ferragosto llega a ser una fiesta de carácter laico, acompañada de éxodos masivos propagandísticos promovidos por el fascismo con descuentos en los transportes públicos para que los pobres viesen el mar (seguro que algo les recuerda la paga del 18 de julio).
Su origen es más antiguo, parece que deriva de la frase latina feriae Augusti (reposo de Augusto), una fiesta instituida por el emperador, en el 18 antes de nuestra era, uno de los principales días de descanso, los Augustali, después de los esfuerzos realizados durante las semanas previas. Pero el antiguo Ferragosto, además pretendía que los trabajadores desearan buenos augurios a sus patrones, los albañiles fijaban una gran rama de árbol en la parte más alta del edificio que construían, llamada planta de faravóst y a cambio se acostumbraba a dar el Ferragosto, que consistía en recompensar con una remuneración en efectivo o en bienes comestibles a los trabajadores por parte de los empleadores, de modo que las familias pudieran pasar felizmente esas fechas, a ser posible comiendo palomas asadas.
Por un momento parece que las actuales relaciones laborales tienden a regresar a estos actos simbólicos y los empleados de seguridad privada de los aeropuertos, las horas extras no cobradas o los contratos y salarios esclavistas de la hostelería tendrán que esperar a que algún emperador aconseje a los empresarios que se paguen salarios decentes ya que con fuegos artificiales celebran la salida de la crisis después de haber aplicado la reforma laboral para los despidos baratos y las rebajas salariales.

13 agosto 2017

Las torres de doña Emilia y los okupas





Aprovecho para dar noticia de la próxima publicación de La tumba vacía , última novela de Isidoro García Sánchez , (ya conocido por El calvario de un apóstata ), en Esdrújula Ediciones . Parece que asistiremos al robo del cuerpo del dictador de su colosal mausoleo. La historia promete y cumplirá.
El único motivo que me provoca para hablar del monumento es la declaración del presidente Feijóo llamando a la moderación a los propagandistas del fascio que reclaman culto al dictador, por haber sido okupa de la finca ilegalmente y legarla a su supuesta prole. Digo okupa, porque todos sabemos que la comisión encabezada por Barrié de la Maza y Julio Muñoz Aguilar, gobernador en 1938, organizó los triunviratos de saqueo en todas las parroquias, formados por falangista, cura y maestro, encargados de hacer la lista negra de los desafectos, expoliar tierras y nóminas para, supuestamente, comprar las Torres de Meirás a las herederas de doña Emilia, tal y como está documentado.
Dicho esto, confirmo que no conozco a nadie que haya estado de visita en la vieja finca, ni a nadie que pretenda hacerlo, lo que no quita que de seguir así las cosas se llegue a reproducir una especie de peregrinación al Palmar de Troya, si tiene eco la propaganda fascista.
A propósito, se escucha con frecuencia que esto no podría ocurrir en Alemania ni en Italia, ni los sucesores de Mussolini o los de Hitler podrían posar encantados de conocerse y de la vida que se dan en las portadas del corazón. Parece que se olvida que las fuerzas aliadas pusieron interés en ganar la guerra mundial y la oligarquía financiera quiso repartirse Europa dejando a un lado a los tontos útiles, curas y militares vencedores en España a su libre albedrío con tal de no dejar aquí a un rojo vivo.
Seguramente hay variados culpables de declarar como Bien de Interés Cultural (BIC) las Torres de Meirás; pero no puedo llegar a comprender que se haga olvidando los orígenes y la historia de la propiedad y dejándolo todo en manos de los okupas y su disfrute, mientras no decidan los responsables a devolverlo a sus dueños.
Visitaré ese museo cuando sea restaurado como tal y pagaré para que alguien me explique los orígenes de la construcción del S XVI, propiedad de los Patiño de Bergondo y los Pardo de Lama, arrasada en 1809 y reconstruida por la condesa a finales del XIX (1893). Allí pasaba temporadas, escribía y tenía la biblioteca en el cuarto piso de la Torre de la Quimera, recibía a Unamuno o casaba a su hija Blanca con Cavalcanti. Las herederas trataron de llegar a un acuerdo con los jesuitas para la donación, pero las autoridades franquistas coruñesas se adelantaron y casualmente no se sabe el precio de la supuesta venta. Hasta ahí el BIC, señor Feijóo, para el resto aplíquese el código penal sin ponerse de perfil, ha de explicarse la historia no la propaganda.