26 febrero 2019

Sepulcros blanqueados


https://www.laopinioncoruna.es/opinion/2019/02/26/sepulcros-blanqueados/1378876.html


"A vós, dona abadessa, / de min, Don Fernand'Esquío, / estas doas vos envío, / porque sei que sodes essa / dona que as merecedes: / quatro caralhos franceses, / e dous aa prioressa" .
Cancioneiro da Vaticana ( Cantiga 1137)
Parece ser que, después del sarao a puerta cerrada, el Estado Vaticano ha parido un ratón. Como siempre, piden perdón y dicen que no volverá a ocurrir; pero las víctimas siguen igual y los culpables rezando, dentro o fuera de la organización más antigua y menos democrática de nuestra era. Un jefe de Estado tirando balones fuera, ¿qué son los abusos emocionales?, ¿por qué tiene tantos datos de los terribles abusos sexuales que se producen en los ámbitos cercanos y familiares?, ¿por qué se ocultan y se destruyen los que conocen sus propios empleados en todo el mundo? No estoy decepcionado porque no esperaba nada, porque la propia historia ya me cuenta lo ocurrido desde hace siglos, siempre usando su poder contra los más débiles, los menores, y contra las mujeres, para ellos seres de usar y tirar.
Desde antes del S. XII hubo un impuesto papal a los curas por fornicación, que les eximía del presunto pecado de lujuria que estaban cometiendo. La cosa iba tan bien que el papa Sixto IV lo cobraba a todos los curas, vivieran o no en el supuesto pecado. Un problema grave para la Iglesia era que estos clérigos dividieran las posesiones eclesiásticas entre sus hijos otorgándoles herencia.
El "amor cortés" ve el matrimonio como comercio, el puro amor será otra cosa, como el difundido por los goliardos, monjes y estudiantes, reivindicando el placer también para los clérigos, con la Biblia en la mano, para defender el uso del sexo. Incluso San Bernardo de Claraval, sostiene que el amor carnal es el camino y no se puede amar a Dios sin haber practicado el amor terrenal; tal y como él lo tuvo con el arzobispo Malaquías de Armagh. Monjes y monjas también tenían su vida sexual. Hemos leído más arriba, un poema en gallego del seguramente ferrolano, Fernand´Esquio, que nos relata los presentes fálicos que envía a la abadesa y a la prioresa de un convento.
El erasmista Alfonso de Valdés en su Diálogos de las cosas ocurridas en Roma (¿1529?) pone en boca de un clérigo sus razones, "Si yo me casare sería menester que yo viviese con mi mujer, mala o buena, fea o hermosa, todos los días de mi vida o de la suya; mantenéislas vosotros y gozamos nosotros dellas".
Mientras tanto el mundo laico vive a su aire con fórmulas como "estar juntos a casa mantener" o "hacer vida en uno", una simple "unión de juras o de furto" -prometida o escondida- incluso el IV Concilio de Letrán (1215) no condena las uniones "de hecho" y en Trento (1565) se intenta la contrarreforma, con poco éxito, sigue oculto lo público y sigue la violación de los débiles bajo el poder eclesiástico. Así andan aún.

19 febrero 2019

La solución habitacional


https://www.laopinioncoruna.es/opinion/2019/02/19/solucion-habitacional/1376691.html


Ya estoy harto de los impedimentos legales para que los restos del dictador salgan de Cuelgamuros y se les encuentre acomodo más digno que una cuneta. La familia, tal y como ese término se usa en Nápoles y Sicilia, quiere que sigan venerándose a costa del erario público en las afueras de Madrid. El gobierno ha acordado la exhumación y ahora tiene turno de réplica la saga del difunto; si al final no hacen ninguna propuesta responsable, me atrevo a proponer dos lugares que seguro serían de su agrado; a saber, uno podría ser levantar un panteón en las Chafarinas para recordar su paso por el estrecho, cuando emprendía su golpe de estado volando en el Dragon Rapide hasta Tetuán y desde allí organizaba el puente aéreo a la península. Si esto fracasase, algo inconcebible, la otra opción sería el islote Perejil, magistralmente reconquistado por el entonces ministro Trillo-Figueroa. No sé si allí cabría un panteón al uso, pero una sepultura decente con la lápida original seguro que tendría espacio entre las cabras. Queda un detalle, la familia dispondría de un fácil acceso para reponer las flores y demás cultos; propongo la reforma del plan de urbanismo de la administración que corresponda para que todos los descendientes se instalen cómodamente en las islas Alhucemas o en cualquier otro de los paraísos naturales ya nombrados, con un transporte marítimo interinsular al módico precio de Baleares o Canarias.
Siguiendo con asuntos habitacionales, recuerdo que los maestros, cuando pasaban más hambre que un maestro de escuela, estaban obligados a residir en la localidad de destino y el ayuntamiento colaboraba a su alojamiento, podría ser la planta alta de la escuela unitaria, si era habitable, o alquilar una habitación en la casa de cualquier lugareño; si era el caso, percibía en sus haberes una pequeña ayuda económica para sostener su manutención. Por lo que sé ese concepto retributivo siguió vigente, en una cuantía aproximada de 50 pesetas, hasta los primeros años 80. Toda una anomalía que sorprendía a los maestros recién ingresados al no entender ese ínfimo aguinaldo todos los meses.
Pero el concepto ha vuelto a estar de actualidad con la solución habitacional del fiscal jefe de la Audiencia Provincial de Ourense, que desde 2004 disfruta de un piso de 200 m2; (950 euros más gastos de luz, agua, calefacción..) a cargo de la Xunta de Galicia.
Si bien es cierto que ésta dio por resuelto el contrato de arrendamiento en 2016, se da la circunstancia de que el dueño de la vivienda demanda ante los tribunales el pago del alquiler porque nadie se lo abona, ni la Xunta ni el ocupante, que sigue disfrutando gratis de los gastos domésticos.

El coste de la vivienda está por la nubes, pobre fiscal jefe, un alto funcionario que no percibe ni las 50 pesetas de la casa-habitación.

12 febrero 2019

Turrar y abrazar


https://www.laopinioncoruna.es/opinion/2019/02/12/turrar-abrazar/1374523.html

Turrar y abrazar

"Banderas patriotas, banderas idiotas"
Manuel Vázquez Montalbán
Siempre he creído que la palabra bandera viene de bando, de banda y no me han gustado las banderías, porque en ellas te achuchabas con los tuyos y turrabas contra los otros sin saber la razón. Siempre me he visto como el venideiro, el charnego, el maquetoavec ma gueule de métèque, con mi careto de extranjero, como Moustaky; pero sin problemas.
El tío Pepe se empeñaba en que le llamase Pepe, sólo. Yo, canijo, no entendía de gramática; él pretendía que sólo le llamase Pepe, no tío; pobre de mí, con el razonamiento simple, acabé llamándole PepeSolo. Desistió de explicármelo, tampoco tenía mucho tiempo antes de embarcar otra vez para engrasar máquinas. Me enseñó a turrar, a empujar mi cabeza contra la suya como si fuésemos machos en la berrea, algo que no entendía entonces, más tarde llegué a saber qué querían los que usaban la cabeza sólo para eso, para turrar.
El tío Andrés también andaba a la mar en buques mercantes. Lo veía poco, pero el puñetero sabía de hormonas. Cuando me vio con la cara llena de espinillas me dijo que tendría que abrazar y achuchar a mi prima mayor, sin permiso previo. Algo que no haría ni con permiso, no seguiría sus instrucciones. Suponía que ya se me pasarían aquellas erupciones volcánicas y cutáneas por otros métodos, y así fue.
El caso es que en este país, y en el resto, nos pasamos la vida turrándonos y abrazándonos como locos, sin pensar que no todo se soluciona embistiendo y achuchando sin encontrar término medio; solo hace falta que alguno levante una bandera para que sus apostólicos de turno se achuchen en la marabunta.
Sólo hace falta, que el que pone las banderas, las arríe para que se queden colgados de la brocha y el personal no sepa contra quién turrar o a quién abrazarse. A estas alturas, cuando lean esto, no sé quiénes estarán usando la cabeza como herramienta de embestida y quiénes estarán usándola para compartir fluidos y bacterias en el eterno abrazo.
Todos los que se abrazan con los suyos o embisten a los supuestos otros son los nacionalistas banderiles que siempre han perdido el rumbo sin saber muy bien a quién o contra quién turrar o abrazar. El caso es que me parece lo más oportuno que los turrantes de uno y otro banderín de enganche se retiren a sus cuarteles de invierno; si me permiten, varios inviernos. Que sí, que les vendrá bien pasar una temporada sin conjugar estos dos verbos, hasta que llegue, dentro de varias primaveras, el día de la marmota; pero eso sí, si la marmota no acierta ni dice lo que tiene que decir, tendrán que seguir a la sombra de la cueva. Ya está bien de predicadores apocalípticos y de expredicadores integrados, con permiso de don Umberto. Si, de paso, se llevan a los frailes y arzobispos, banqueros espías y villarejos varios, estaré mucho más agradecido.