26 septiembre 2017

Sigue habiendo pobres sin patria, oigan


http://www.laopinioncoruna.es/opinion/2017/09/26/sigue-habiendo-pobres-patria-oigan/1220532.html


(...) Miles de niños y nadie allí para cuidarlos, nadie grande, eso es, excepto yo. Y yo estoy al borde de un profundo precipicio. (?) si algún niño echa a correr y no mira por dónde va, tengo que hacerme presente y agarrarlo. Sería el encargado de agarrar a los niños en el centeno. Sé que es una locura; pero es lo único que verdaderamente me gustaría ser.
Reflexión de Holden Caulfield, protagonista de 'El guardián entre el centeno', J.D. Salinger


Ahora que todos se preocupan de los sentimientos, se movilizan por los sentimientos, se embadurnan de identidades, ahora que andan buscando como locos a topógrafos que delimiten claramente las fronteras, quizá sea el momento adecuado para detenerse y mirar alrededor, no importa de qué lado de la raya divisoria ni al borde de qué precipicio estemos.
En un contenedor de basura urbano un hombre pobre, excluido de las bondades de la sociedad, encontró a un bebé recién nacido, de pocas horas; gracias a su aviso la criatura vive, no ha caído al precipicio y su rescatador sigue buscando chatarra en los contenedores, el guardián entre los desperdicios.
En las dos trincheras de la demagogia hay pobres que no despiertan sentimientos, que no agitan banderas, que comen caliente cuando hay una oportunidad, que hablan como les da la gana; pero normalmente no hay nadie que les escuche.
No saben nada de los 40.000 millones de euros, o los que fueren, del rescate a la banca, no saben nada de los pufos, condenas escurridizas, desfalcos y atracos de los cabecillas a ambos lados de las fronteras. Los más afortunados sabrán algo de rentas de inserción, de beneficencia, de almuerzos de caridad; pero todos siguen pendientes de lo bien surtidos de basura reciclable que estén los contenedores, la chatarra no tiene idioma ni pasaporte, nadie les pide la factura de los ferranchos rescatados esta noche, ni si son de contrabando. Ni las sociedades de las banderas ni sus gobiernos quieren aplicarle el IVA a la desvencijada silla de playa de hierro oxidado o a los gramos de cobre del motor de aquel juguete abandonado. Ellos también son juguetes abandonados y les importa un higo todo el entusiasmo que desbordan y derraman las almas cantoras y abanderadas que abarrotan plazas y calles, que les ignoran, que no son de su clase, que no se pueden mezclar así como así. A fin de cuentas aquellos que vociferan fabrican hijos de pura raza y, si alguno tiene la mala suerte de aparecer en el contenedor de basura, siempre hay un sin patria para rescatarlo y buscarle quien le dé refugio al amparo de alguna bandera y le enseñe alguna lengua. El idioma de los contenedores de basura y de los usufructuarios de sus beneficios es universal, afortunadamente para ellos. Es lo único que tienen, mientras rescatan bebés.

25 septiembre 2017

Mi filosofía


http://www.laopinioncoruna.es/opinion/2017/09/19/filosofia/1218492.html

Evidentemente no quiero castigar a nadie con un sermón sobre los principios éticos que me gobiernan. Todo es más simple -solo un recuerdo de mi Bachillerato hace 45 años- en estas fechas en las que se reivindica de nuevo, con sobradas razones, la asignatura en el Bachillerato actual. En aquel viejo sistema educativo que perduraba aún en los primerísimos años setenta llegábamos a sexto de Bachillerato para titularnos después de la reválida. Los de letras y los de ciencias, todos -y no digo todas, porque no convivíamos en las aulas- nos encontrábamos con una nueva asignatura, la filosofía, y un nuevo libro de texto que no recuerdo haber abierto nunca.
A don Luis ya lo conocíamos por tratar, con mucho esfuerzo y escasa metodología, que memorizásemos la historia de la literatura; pero nadie pensaba encontrarlo como profesor de filosofía, no por un temor especial -pues era benigno calificando si dominabas el arte de las aves charlatanas- pero había incertidumbre.
Había razones para tal sensación de indefensión ante la novedad; comenzaron las clases y nuestros esfuerzos se vieron obligados a memorizar las figuras de los silogismos de la lógica aristotélico-tomista, es decir, un baño de escolástica para grabar a fuego: barbara, celaren, darii, ferio, cesare, camestres, festino, baroco, darapti, disamis, datisi? Disculpen si el orden es incorrecto, si faltan figuras? es memoria pura y dura.
Evidentemente no supimos nada del pensamiento de Aristóteles, ni situarlo en el mapa ni en el tiempo; tampoco de Tomás de Aquino y mucho menos de Descartes, que lo desbarata todo. Así vegetamos meses esperando superar la maldita reválida.
El resto del curso lo pasamos pasmados escuchando a don Luis hablar de sus intereses y sus últimas lecturas. Quiso poner buena voluntad para explicarnos los rudimentos del psicoanálisis, de Edipo, Electra, la interpretación de los sueños, siempre evitando -no podría ser de otra manera- cualquier referencia a la sexualidad. Para muestra valdrá un botón, acabé aquel Bachillerato sabiendo, más o menos, que [ Froid] era el protagonista y qué era el subconsciente; pero tardé un par de años en saber que aquel [ Froid] era Freud. El final del curso se dedicó a la parapsicología, a las curiosidades que aquel buen hombre estaba investigando y con las que nos dejaba embelesados, muertos de curiosidad.
En resumen, sí tuve un curso de filosofía; pero los recunchos grabados en mi memoria no me aportaron herramientas para entender el mundo, sigo buscándome la vida. Por lo tanto solo espero que los adolescentes de hoy no tengan las mismas carencias y disfruten del conocimiento, del pensamiento crítico y de su autonomía personal o de su autodeterminación, como prefieran, para defender sus derechos ciudadanos.

No molan las fronteras ni las naciones


http://www.laopinioncoruna.es/opinion/2017/09/12/molan-fronteras-naciones/1216452.html

La nación es un sistema de egoísmo organizado. La idea de nación es uno de los medios soporíferos más eficaces que ha inventado el hombre. Bajo la influencia de sus efluvios, puede un pueblo ejecutar un programa sistemático del egoísmo más craso, sin percatarse en lo más mínimo de su depravación moral. (Rabindranath Tagore)
Hasta hace unos días pensaba que nuestra misión fundamental era arreglar los problemas de Venezuela, por activa o por pasiva; aunque los venezolanos, todos, no se dejaran ser gobernados por, no sé, por nosotros, por nuestros jefes; en fin, qué más da, ya no se gasta tanta tinta metiendo las narices allí; pero tanta Venezuela acabó por recordarme a Cela y su obra La catira (1955), un encargo pintoresco del dictador venezolano Marcos Pérez Jiménez, pagado a peso de oro, que acabó en fiasco, despellejado a ambos lados del charco. Cela salía de su casticismo chocarrero, infantil, vanidoso y cursi de la posguerra, antes de ingresar en la RAE (1957), un Cela claramente desarrollista.
Su objetivo es la invención venezolana de la etnia llanera y La catira fue una superchería dialectal que no soporta la comparación con Doña Bárbara, del presidente Rómulo Gallegos derrocado por el mecenas de Cela. La catira chocó con un nacionalismo rampante indigenista, con el Canto General de Neruda y con el cóctel criollo y paternalista en Venezuela, la República Dominicana de Trujillo o en la Cuba de Batista.
La dictadura de Pérez Jiménez trataba de promover la imagen de Venezuela en el extranjero, en la España de Franco, de los canarios y gallegos; con ella trata de que se inicie la epopeya fundacional de Venezuela, la novela del Nuevo Ideal Nacional, con el foco en el liderazgo de Pipía (Primitiva) Sánchez, conocida como la catira, rubia, blanca, de mucho carácter, con amor a la tierra y su riqueza, a los valores llaneros y conservadores, el culto al pasado, la lealtad al jefe, el arrojo personal, el machismo y la fuerza. La catira está al servicio del poder del nacionalismo perezjimenista, ya entonces bolivariano, y del viejo concepto de la Hispanidad neoimperialista de Franco, que poco coinciden y lógicamente chocan.
Que conste que no quería hablar de lo que pasa por aquí; pero veo que se quiere presentar el nacionalismo como algo natural, todos tienen patria, sin autonomía de pensamiento, sin el derecho a no creer, básico para la convivencia en libertad, yendo al choque de nacionalismos, sin diálogo, negociación o compromiso, que nos transforma en imbéciles, leves o graves, forofos o aficionados al degüello; sin ciencia, el nacionalismo atonta incluso a los que presumen de origen carolingio, no estaría mal recordar a Rosa Luxemburgo (1908) cuando afirmaba que: "En la sociedad no existe la nación como entidad socio-política homogénea, sino que en cada nación hay clases sociales con intereses antagónicos".

Relaciones laborales negociadas ¿dónde?

http://www.laopinioncoruna.es/opinion/2017/09/05/relaciones-laborales-negociadas/1214468.html

Podríamos remontarnos a la última reforma laboral, que dinamitó los convenios colectivos, o a la anterior o sus antecedentes desde el Estatuto de los Trabajadores y la Constitución para percatarnos de que la degradación de la negociación colectiva es la marca de la casa en las relaciones laborales entre trabajadores y empresas en contra de lo dispuesto en la CE en los artículos 7, 28, 35 o 37 que salvaguardan la sindicación, el derecho a la huelga, a la negociación colectiva y a promover el conflicto colectivo por los trabajadores.
Los últimos días hemos asistido a dos acontecimientos realmente graves; el primero protagonizado por la diputada popular Celia Villalobos cuando interrumpe a gritos a la diputada Yolanda Díaz con chulería para impedir que siguiese defendiendo sus argumentos frente a la ministra Báñez en la Comisión de Empleo y Seguridad Social del Congreso. La verdad es que doña Celia no hilvanó dos frases seguidas y solamente hay que contemplar su compostura poligonera para entender las razones de sus exabruptos; la diputada interrumpida le cedió el uso de la palabra, mas doña Celia no fue capaz.
El segundo suceso que les comento tiene un antecedente grave, la falta de acuerdo en la negociación del pacto salarial de 2017, que tradicionalmente servía de referente a toda la negociación colectiva del país; los sindicatos reivindicaron que si la economía ya iba mejor, tendría que reflejarse en los salarios; pero la patronal no lo entendió así cerrándose en banda a cualquier acuerdo y consciente de que tal diferencia acarrearía conflictividad grave, no en grandes empresas o convenios, sino en la aparición de aparatosos desacuerdos gremiales, subsectoriales, sin cobertura sindical, que alterarían mediáticamente las relaciones laborales y facilitarían la excepcionalidad dificultando el derecho de huelga e imponiendo arbitrajes que dictarían laudos restringiendo derechos.
Evidentemente hablo del conflicto del personal de seguridad en el aeropuerto del Prat que se ocupa de esas labores desde que se privatizó el trabajo que hacía la Guardia Civil. A partir de entonces, empresas como Eulen compiten a la baja en los concursos de adjudicación y las consecuencias se ven en las mermadas nóminas de la escueta plantilla y en la imposibilidad de prestar el servicio público como es debido.
Es decir, la imposición del arbitraje desequilibra la posición de los trabajadores por decisión gubernativa vaciando de contenido sus derechos.
Cuando la huelga afecta a los servicios públicos, nuestro ordenamiento contempla el establecimiento de un límite extraordinario al ejercicio del derecho de huelga mediante la articulación de los servicios mínimos que en el caso de El Prat se han impuesto de forma abusiva, ya que alcanzan el 90%, una ilegal práctica generalizada. De ahí que el arbitraje obligatorio no resulte justificado y suponga una injerencia del poder gubernativo impropia al suplantar a las partes legitimadas, representantes de trabajadores y empresarios, en la función reguladora de las condiciones de trabajo.

Abu Muhmmad Ali Ibn Hazm (994-1064)


http://www.laopinioncoruna.es/opinion/2017/08/29/abu-muhmmad-ali-ibn-hazm/1212460.html

Dejad de prender fuego a pergaminos y papeles,
y mostrad vuestra ciencia para que se vea quién es el que sabe.
Y es que aunque queméis el papel
nunca quemaréis lo que contiene,
puesto que en mi interior lo llevo,
viaja siempre conmigo cuando cabalgo,
conmigo duerme cuando descanso,
y en mi tumba será enterrado luego.

Ibn Hazm de Córdoba
Traducción de José Miguel Puerta Vílchez

He recordado a este autor al conocer la existencia del joven yihadista de 22 años Yassin Ahram Pérez, alias al Qurtubi -el Cordobés-. Hijo de doña Tomasa Pérez y de familia asentada en Alcolea (Córdoba) antes de mudarse a Siria; Pérez ha sido elegido para comunicarnos su solidaridad con los terroristas que atentaron en Cataluña y para avisarnos de que su organización criminal seguirá matando y a la que deseo el fracaso total.
Su discurso no parece muy dotado de lecturas variadas y olvida la raíz de muestra cultura mestiza, de la que él es un claro ejemplo, fruto de la convivencia más o menos cordial durante siete siglos con abundantes ejemplos en la toponimia, la arquitectura o los festejos populares. No olvidemos que dicen del califa Abderraman III que se acomplejaba de ser navarro, pelirrojo y de ojos verdes.
Seguro que este joven aprendiz de intolerancia no conoce algunas obras indispensables de nuestra cultura, también suya, ni al autor citado. Espero que su lectura también le libre de olvidar la mezcla de sangres y razas de las que venimos por muy puros cristianos viejos que nos consideremos.
Ibn Hazm; musulmán, pero no árabe, nació en los últimos años del S. X en el seno de la aristocracia cordobesa, antes del estallido de la guerra civil que quebró su apacible vida con los Omeya, contra los que apoyaban a Almanzor; pero no ha pasado a la historia por estas vicisitudes, sino por ser un ilustre polígrafo conocedor de Aristóteles y autor de títulos relevantes en diferentes disciplinas; de entre ellos destacaremos Tawq al-Hamama o El collar de la paloma. Tratado sobre el amor y los amantes, "el libro más ilustre sobre el tema del amor en la civilización musulmana" para Ortega y Gasset, un breve clásico para degustar en pequeñas dosis por su gran descripción del amor en S. XI intentando descubrir lo que tiene de común e inmutable a través de los siglos.
En ella nos describe el amor basado en su propia experiencia, su naturaleza y sus metamorfosis, las personas que se enamoran, sus trucos y recursos, sus aliados, los signos que permiten identificarlos, los fundamentos, la esencia, los accidentes o las malaventuras del amor; tan clásica como el Ars amandi de Ovidio y tan contemporánea como los Fragmentos de un discurso amoroso de Roland Barthes.
No tendría mayor transcendencia si no hubiese influido en la lírica medieval o en el Libro de Buen Amor del Arcipreste de Hita. Espero que Pérez lo disfrute cuanto antes.

La verdad sigue estando mal vista

http://www.laopinioncoruna.es/opinion/2017/08/22/sigue-estando-mal-vista/1210593.html

Pues amarga la verdad,
quiero echarla de la boca;
y si al alma su hiel toca,
esconderla es necedad.
Quevedo
Hemos soportado muchos atentados terroristas a manos de asesinos irracionales, los condenamos y combatimos; hemos tratado de buscar una explicación y nuestros dirigentes políticos nos han pastoreado con sermones alabándonos y pasándonos la mano por el hombro explicándonos que nuestro comportamiento ciudadano es ejemplar, que somos víctimas inocentes ¡qué descubrimiento!; pero a un servidor el pasmo le dura por no lograr que se expliquen las razones más objetivas por las que estas tragedias ocurren, además de decir que somos los buenos y los otros, los malos.
Al final terminamos leyendo vómitos de cuatro descerebrados de la caverna que siempre aprovechan su pisuerga particular para avivar las llamas fascistas y oyendo los silencios con sordina de opiniones más sensatas, pues sus verdades levantan urticarias. Podríamos recordar que se trazaron fronteras a tiralíneas en la descolonización, se crearon países artificiales de acuerdo con los intereses de potencias occidentales, se crearon y derrocaron líderes al antojo de los intereses económicos en Oriente Medio y el sudeste asiático. Pero no es nuevo.
Recordemos el ejemplo del Galdós de principios del siglo pasado, autor de una carta poderosa y crítica con la guerra del Rif (1909) y con la Iglesia aliada de los magnates piadosos (los Romanones, Güell y Comillas) que explotaban las minas de hierro con la defensa armada de 20.000 hombres como carne de cañón. Su Carta al pueblo español empieza con una llamada a la acción para acabar con los problemas del Rif, causantes de las protestas que acabarían en la Semana Trágica en Barcelona y responsabilizando a Maura. En las últimas frases de la carta, el autor pide que terminen la guerra:
"Apaguemos de un soplo los cirios verdes que alumbran el siniestro Santo Oficio llamado por mal nombre Defensa Social, vergüenza de España y escándalo del siglo, y pongamos fin a las persecuciones inicuas, al enjuiciamiento caprichoso, a los destierros y vejámenes con ultraje a la humanidad y desprecio a los derechos más sagrados. . . No temamos que nos llamen anarquistas o anarquizantes, que esta resucitada Inquisición ha descubierto el ardid de tostar a los hombres en las llamaradas de la calumnia".
Galdós fue censurado y amenazado por cantar las verdades en sus cartas y sus obras; por denunciar el origen de los problemas sociales de los españoles, recibía anónimos de "patriotas" criticando su actitud, acusándole de ser agente pagado de otro país y traidor: "? e llegado (sic) de Madrid para cortarle el cuello y arrastrar tu cabeza por la ciudad de Santander, te voy a quitar la Vida". "Ultimo abiso Galdos estas (sic) comprometido para perseguir al Papa y a la Iglesia. Yo también estoy comprometido para quitarle la vida debías de estar fusilado como Ferrer [y Guardia].
Habrá que seguir buscando a quien esconde la verdad.

¿Hoy se festeja el 'Ferragosto'?


http://www.laopinioncoruna.es/opinion/2017/08/15/hoy-festeja-ferragosto/1208662.html
Un amigo muy descreído de todo lo divino y humano sigue conservando en su vocabulario coloquial la expresión día santo para referirse a cualquier festivo, del santoral católico o del calendario laico; si habla en confianza tanto le da decir que es día santo el 1º de mayo o el 25 de diciembre, no son días laborables.
Pues bien, por estos lares peninsulares tenemos la certeza de que a cualquier lugar que nos acerquemos, seguro encontraremos fiesta y pitanza, hoy asar sardinas, carne y criollos, freír pescadito en la feria de Málaga, vestirse de chulapos en Madrid y buscar al bombero que baje a La paloma, hacer caldereta con la vaquilla, el caso es buscar ocasión para el jolgorio, la escapada de puente o celebrar el día grande de las vacaciones que comienzan o acaban.
Muchas curiosidades encontraremos por España; pero quiero comentarles la celebración originaria que conserva su nombre en Italia, Ferragosto. Si están hoy por el país vecino olvídense de comercios tradicionales abiertos y vayan a museos y monumentos accesibles al turista.
Desde el punto de vista astronómico el 15 de agosto la estrella de la madrugada, Sirius, aparece por primera vez visible al alba, y señala el comienzo del período de descanso en las labores agrícolas. Con el tiempo el Ferragosto llega a ser una fiesta de carácter laico, acompañada de éxodos masivos propagandísticos promovidos por el fascismo con descuentos en los transportes públicos para que los pobres viesen el mar (seguro que algo les recuerda la paga del 18 de julio).
Su origen es más antiguo, parece que deriva de la frase latina feriae Augusti (reposo de Augusto), una fiesta instituida por el emperador, en el 18 antes de nuestra era, uno de los principales días de descanso, los Augustali, después de los esfuerzos realizados durante las semanas previas. Pero el antiguo Ferragosto, además pretendía que los trabajadores desearan buenos augurios a sus patrones, los albañiles fijaban una gran rama de árbol en la parte más alta del edificio que construían, llamada planta de faravóst y a cambio se acostumbraba a dar el Ferragosto, que consistía en recompensar con una remuneración en efectivo o en bienes comestibles a los trabajadores por parte de los empleadores, de modo que las familias pudieran pasar felizmente esas fechas, a ser posible comiendo palomas asadas.
Por un momento parece que las actuales relaciones laborales tienden a regresar a estos actos simbólicos y los empleados de seguridad privada de los aeropuertos, las horas extras no cobradas o los contratos y salarios esclavistas de la hostelería tendrán que esperar a que algún emperador aconseje a los empresarios que se paguen salarios decentes ya que con fuegos artificiales celebran la salida de la crisis después de haber aplicado la reforma laboral para los despidos baratos y las rebajas salariales.