Wert no tiene quien le escriba ni Rajoy, quien le espíe

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Permítanme que tome prestado impropiamente el título de García Márquez, para usarlo y deformarlo a mi antojo y en propio interés, sin ánimo de perjudicar a su legítimo dueño, pero sí de meterle el dedo en el ojo a los dos personajes con presencia habitual en este folio.

El coronel que Gabo nos entregó en su relato de 1961 esperaba paciente y ansiosamente la llegada de un correo que le informase de que le habían reconocido una pensión por haber servido en su juventud a Aureliano Buendía.

El coronel y su esposa pierden a su hijo, se ven en la indigencia, sin más posesiones para subsistir que un gallo de pelea, cuyo destino podría ser la venta por una generosa cantidad o esperar a batirse en la lucha y obtener, con sus victorias, mayores beneficios. La pragmática esposa opta por la venta, la supervivencia, y el romántico coronel se resiste hasta responder al final del relato, desesperado ya, que comerían mierda.

La soledad, la esperanza, la realidad y la fantasía están presentes en la breve novela y me provoca darle una vuelta a la trama e imaginarme a los dos personajes mentados en el título en unas coordenadas de actualidad con ansias de que alguien les escriba o, por lo menos, les espíe.

Uno de ellos puede ser Wert, un personaje que no tiene quien le escriba, en absoluta soledad, que vive el infierno en vida con tal de no dar su brazo a torcer. Él y su colega la secretaria de Estado Montserrat Gomendio han cruzado todas las líneas rojas del insulto al discrepante, atrincherados en sus parapetos privatizadores que, aunque estén guardados por buenos vasallos, no habrá buen señor que les recompense Es cierto que han tenido que sufrir toda suerte de chanzas y vilipendios, pero es a lo que se arriesgan el arrogante y la demagoga; otros ministros se zambulleron en ciénagas tan o más peligrosas, perdieron la batalla, pero fue con dignidad y hoy pueden seguir defendiendo sus proyectos.

También es bien cierto que cuando los vientos no les sean propicios no tendrán que esperar, como el coronel, que les anuncien la llegada de un correo que reconozca sus servicios y abnegación, él tiene un buen fondo de armario para mudar aspecto y discurso y ella es la mayor millonaria del gobierno; no precisan discutir si han de vender el gallo de pelea o las joyas de la corona ni tendrán que plantearse comer mierda como el coronel; pero no me negarán que el día 24 han tenido que tragar algunos sapos y quedará grabado en su memoria; ni sus propios aliados de la patronal religiosa osaron aventar una palabra de ánimo, ni sus propias plumas a sueldo han gastado mucha tinta para hacerle el boca a boca o blandir el abanico en su rostro para que recibiesen un soplo refrescante.

Paralelamente Rajoy y la trama del espionaje también fueron actualidad. Mientras conseguía escapar de la tromba que caía con la sentencia del Tribunal de Estrasburgo se encontró inmerso en los rumores del espionaje de USA a los dirigentes europeos; toda la opinión pública occidental escandalizada por las supuestas escuchas recíprocas, Francia, Alemania, Reino Unido poniendo el grito en el cielo y Rajoy no tiene quien le espíe, solo se le ocurre invitar a café al embajador americano, si tiene un rato libre. La trama negra de la que puede presumir es la de un pobre hombre, cual guerrero del antifaz, que se cuela en la casa de Bárcenas para salvar a España.

La vida increíble y la ficción verosímil

http://www.laopinioncoruna.es/opinion/2013/10/22/vida-increible-ficcion-verosimil/774804.html

Con Manolo Vázquez Montalbán

en la memoria después de diez largos años.

Determinados acontecimientos de la vida española de estas últimas semanas nos pueden parecer increíbles; me parece increíble la actuación de ciertos alcaldes, que haciendo uso de su cargo electo se dediquen a la propaganda inconfesable, su nostalgia no me parece peligrosa, por lo menos no tanto como la del creciente populismo nacionalista de extrema derecha con corbata que triunfa en Europa, sí me parece increíble que se consienta que eso se haga desde la tribuna municipal. Tanto monta, cuando desde equivalentes foros se disculpa y exalta la violencia del terrorismo más reciente, actuante o durmiente. Sé que no se puede civilizar a nadie, si no es con la educación, pero quien quiera seguir sosteniendo la barbarie como ideal, ha de hacerlo en la intimidad de la tertulia y con auditorio voluntario.

También recientemente asistimos al homenaje de la iglesia católica a cientos de víctimas de la guerra. Por supuesto que cualquier organización legal puede escenificar los actos que estime oportunos de acuerdo con sus convicciones e invitar a sus miembros a asistir y participar; mas me parece increíble que oficialmente el Estado, por medio de miembros del gobierno de la nación participe en nombre de todos los ciudadanos y haya que presenciar, sin asistencia letrada, a las declaraciones del obispo Martínez Camino, portavoz de sus colegas, afirmar que el código civil español es una obra de Satanás ya que permite el matrimonio homosexual.

Sobran ejemplos y no hay que revolver para encontrar a quienes se parten el pecho diciendo que las heridas están cerradas, que lo pasado ya está pasado, que no hay que remover en las cunetas, son ciertamente increíbles, sin llegar a comprender que lo único que buscan las familias y amigos es saber dónde se encuentran unos restos perdidos.

Pero en el título prometía hablar de realidad y de ficción, dejemos lo redundante de la vida cotidiana para refugiarnos en la ficción, Vázquez Montalbán en 2002 dictó una conferencia titulada Memoria, la novela secreta en la que habló de cómo la técnica de control de la memoria colectiva se consigue sabiendo lo importante que es que el derrotado pierda su identidad y consigue influir en la memoria individual, considera que, salvo en situación histórica al límite, "es perfectamente legítimo que el escritor fabrique y manipule la memoria por cuanto la verdad en literatura está encerrada en el libro y no tiene que legitimarse fuera". En este sentido, precisó que "pocas veces el libro llega a ser bueno salvo que la verdad esté integrada en la verdad literaria".

Pero, aunque parezca inverosímil, el folio de hoy tiene como objetivo recordar una novela singular que justifica mentar la "ficción verosímil", se trata de Dientes de leche de Ignacio Martínez de Pisón, publicada hace ya cinco años, donde se nos relata la crónica social de tres generaciones inauguradas por Raffaele Cameroni, infeliz aprendiz de mercenario fascista italiano que busca fortuna en la guerra de España abandonando a su familia y que se reconstruye tras la victoria y el estraperlo en un triunfador, que sí actuará como un auténtico fascista en sus nuevas relaciones familiares ocultando su pasado a la nueva esposa, hijos y nieto. Es verdad que Martínez de Pisón apura a veces hasta el límite las reglas de la verosimilitud, siempre sale victorioso. Esa es la función del arte, que la tensión y la ternura que destilan sus páginas, aunque parezcan inverosímiles, no lo son. Como si acudiésemos a una confesión: la vida a veces es increíble y la ficción la representa verosímil.

Más demogogia con el PISA de adultos

Otra vuelta de tuerca se le da al nivel cultural del españolito de a pie con el nuevo informe que nos compara con los países de la OCDE y que casualmente sale a la luz, bombo y platillo, cuando Wert pasa por el Congreso con su ley, sin escuchar ni responder a nadie y hablando de lo que le viene en gana. Lamentable espectáculo prescindible, otro plasma haría las mismas funciones del ministro parlamentando en el Congreso.

En resumen, el informe valora los resultados de competencia lectora y habilidades matemáticas de adultos entre 16 y 65 años, con ejercicios sobre textos del Quijote o la factura de la luz. Sabemos que no vivimos en la Arcadia feliz, pero seguramente tampoco los resultados son catastróficos, y con respecto a que la culpa de todo sea de la LOGSE, discrepo de los demagogos apoyándome en los datos del informe.

Lógicamente Finlandia vuelve a ser la mejor puntuada (288-282 puntos) ante España (252-246) en las medias de ambas pruebas, pero después el mismo informe revela que los resultados son mejores entre empleados y titulados, vaya novedad: la tasa de paro para los españoles con competencias matemáticas bajas es tres veces mayor (28,0%) que la de los que tienen competencias altas (8,4%) y que el salario de los primeros es la mitad del de los segundos (68% frente a 155%). Vaya descubrimiento, los mayores que estudiaron la primaria saben menos y ganan menos que los más jóvenes y mejor formados.

Otro detalle relevante de Perogrullo: los hombres mayores logran resultados ligeramente superiores a las mujeres y la diferencia resulta más amplia en matemáticas que en comprensión lectora; en el caso de los más jóvenes, esas diferencias son poco apreciables en ambas competencias.

Como no podía ser de otra manera el informe pone de manifiesto que los adultos de más edad tienen, en general, peores resultados que los más jóvenes, y señala que en España el grupo de edad de 16 a 34 años obtiene 37 puntos más que los de 55 a 65 años, mientras que en la OCDE esta diferencia es de 27 puntos, lo que significa que España ha recuperado 10 puntos con respecto a los otros países con el paso de los años. Algo tendrá que ver la universalización de la escolarización, los niveles de gratuidad alcanzados y la mejora del nivel de vida en los últimos 35-40 años. En resumen, estamos algo peor que EEUU, al nivel de Italia y no muy lejos de Francia e Inglaterra, y comparemos los niveles de inversión, no ya de los pequeños países nórdicos, sino de los del sur de Europa.

Pregúntese usted, adulto de 45-65 años, cuántos libros leyó en la escuela o en el instituto (los pocos que llegaban a él) o si recuerda problemas matemáticos diferentes de aquellos del cálculo del caudal de los grifos o de los trenes que circulaban en dirección contraria y nunca chocaban. Podría decirles que un maestro a mediados de los 70 podría titularse convencido de que la mejor novela contemporánea era La tesis de Nancy y sin haber leído una estrofa del Arcipreste de Hita, del Quijote ya ni les cuento.

La minoría que accedía al bachillerato superior, o después al BUP o FPII, se especializaba en lo suyo, pero podían llegar, los poquitos que llegaban, a la universidad sin saber hacer un resumen o esquema o sin haber visto una estadística.

Y sin embargo muchos llegaron a ministros y conselleiros de Cultura, recuerden las anécdotas de Saramago y Ainoha Arteta.
Si algo destaca este estudio son las pocas posibilidades y el autodidactismo de los adultos mayores y el fracaso de la metodología memorística empleada con los más jóvenes. Lamentablemente aún daremos pasos atrás.

Curiosos permisos, cavernícolas y más leña en la reforma educativa

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Supongo que a estas alturas ya tendrán sobrado conocimiento de que en la Junta de Castilla-La Mancha, feudo de la señora Cospedal, se hacen los recortes preventivos en los servicios públicos, sin vergüenzas y con dolo probado. Les recuerdo simplemente que además de todos los servicios sanitarios y educativos que están sin cubrir por bajas médicas, de los repagos varios y de la cicatería a la hora de las inversiones necesarias, ahora se derrocha el dinero público convocando a todos los trabajadores de la Consejería de Agricultura a que abandonen su puesto de trabajo para ir a misa; les reproduzco el correo electrónico que recibieron los afectados:"Con motivo de la celebración de San Francisco de Asís el día 4 de octubre de 2013 se celebrará una misa especial en el monasterio de San Juan de los Reyes de Toledo a las 13.00 horas. Para todo aquel personal que quiera acudir a dicho acto podrá fichar a las 12.30 h y se concederá una dispensa de una hora y media".

No especifica en el mismo si hay que mantener servicios mínimos, si funcionará el registro, qué se les dirá a los ciudadanos que vayan a disponer alguna gestión; por supuesto este tiempo se abonará como tiempo de trabajo. No nos explicamos que el, nunca suficientemente bien ponderado, exportavoz de Aznar -Miguel Ángel Rodríguez- se despachara por las televisiones diciendo que sobran el 30% de los funcionarios. Solo falta que hagan una lista negra con los nombres de los que no vayan al acto católico y espero que hayan pasado lista en el templo, para evitar escaqueos.

Al mismo tiempo salía una curiosa cavernícola, alcaldesa de Quijorna en Madrid, montando una feria de muestras, un oulet de prendas y símbolos fascistas en un colegio, ¡y dice que no lo vio!

Después vendrá, desde la cueva vecina, monseñor Martínez Camino a decir que no le llegan las horas de religión en bachillerato, acabará pidiendo la dispensa de los alumnos a la clase de Ciencias para que vayan a la novena de turno.

No van descaminadas las últimas reformas del proyecto de LOMCE recién salido y que se discutirá en el Parlamento el 10 de octubre. En él, además de todas las lindezas y reválidas privadas que ya comentamos en este folio en su momento, encontramos novedades como por ejemplo el detalle de que el PP haya hecho desaparecer la expresión "prestación del servicio público de educación", devolviendo el articulado al borrador original de la ley, "servicio educativo". De esta forma, el PP apuesta por unos poderes públicos menos responsables, que participen en la prestación de servicio, pero que no lo garanticen. Evidentemente los que tienen la sartén por el mango del servicio privado, mayoritariamente confesional, así lo prefieren.

Por si fuera poco se insta a las administraciones educativas a que convoquen concursos para la construcción y gestión de centros concertados sobre suelo público. Es decir, una parcela que tenga la señora Botella en una buena zona de Madrid se adjudicará a sus correligionarios para que hagan el centro privado en el que todos pondremos lo que cueste el suelo, la subvención para el edificio, les damos los clientes y le pagamos los salarios, viva la libre empresa. En un barrio con vecinos de menos posibles el ayuntamiento cederá el suelo para un centro público o unos barracones prefabricados, no será rentable predicar allí, que ya se sabe que los pobres están menos necesitados de ciencia, que el catecismo ya los calma y adoctrina.

Los números nos influyen en una sociedad sedada

http://www.laopinioncoruna.es/opinion/2013/10/01/numeros-influyen-sociedad-sedada/767678.html

Vaya novedad nos cuenta el titular!, a ver a quién no le influyen los números que le escupe el cajero automático, los de la nómina recortada, los de la pensión, de la prestación por desempleo, del subsidio, de la renta mínima? A ver a quién no le incordian, si llega a entenderlos, los números del recibo de la luz?.

Pero no todo va a ser dinero, pensemos en el número 1, el de 1 niña asesinada en Santiago la semana pasada. Ha puesto los pelos de punta a una ciudadanía anestesiada que no se revuelve ni contra la nómina, ni contra el recorte de la pensión, ni contra el sablazo sanitario, hace piña instintivamente y se desahoga gritándole a un presunto asesino, descargando su ira contra él, seguramente, culpable o cómplice de un crimen atroz. Seguramente no solo es la manifestación del duelo ante la muerte de un próximo o de alguien que se siente como cercano, la niña asesinada; sino que es la propia reacción del grupo, que se reconoce como grupo, y se siente unido y solidario buscando culpables. Si los poderes públicos no los ofrecen a castigar, el problema se complica, el morbo y los carroñeros se encargan de las fogatas para que no nos separemos de la pantalla ni del móvil esperando noticias que calmen nuestra ansiedad, al tiempo que se alivia nuestra culpa por no haber puesto solución a un problema tan cercano.

Podemos hablar de más números, podemos hablar de 2 muertos, suicidas deprimidos por su miseria y sus fracasos, también vecinos nuestros. Asistimos al duelo y punto. ¿Qué diferencia hay entre 1 y 2 ?

La Directora General de Tráfico comparaba, de forma poco afortunada, los 74 muertos de Angrois con las víctimas de la carretera. Asistimos compungidos al accidente ferroviario, con razón alabamos a los vecinos que ayudaron en el primer momento, pero pasamos sin pena ni gloria, ya tenemos callo, estamos sedados cuando nos muestran las cifras de los accidentes de circulación.

Ni qué decir tiene que la violencia contra las mujeres está asumida claramente, pasamos y sabemos que pasamos a su lado como lo hacemos al ver un mendigo, a un sin techo, en la escalera de un portal, pensando que es un borracho cualquiera, que él se lo habrá buscado.

El problema se agrava si hablamos de geografía, de muertos y refugiados fuera de nuestro barrio, podemos hacer una encuesta y preguntar entre nuestros próximos cuáles son las consecuencias de la guerra en Siria ¿hay 5.000 o 100.000 muertos? ¿Se puede hacer una porra en los bares como las de los goles marcados el fin de semana? ¿Cuántos refugiados sirios hay en los países vecinos, 200.000, 2 millones? Pero, claro, eso nos queda lejos y no tenemos ningún primo afectado.

¿Qué sabemos de Kenia? Sabemos algo sobre los asaltos, rehenes y asesinados porque algún occidental andaba por allí? ¿Quién da cifras de decenas o centenas?

También, en vez de vidas, podemos hablar de millones de dólares o euros. Cuando estos días el gobierno nos hable de los presupuestos para el 2014, detengámonos algo en las cifras y en contar los ceros, podemos llevarnos sorpresas y despertar de la sedación.