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03 septiembre 2009

El informe TALIS: ¿los profesores ante el espejo? (y III)

Entramos, por fin, en el comentario del núcleo duro del informe TALIS, es decir, la visión que tienen los profesores de su práctica docente, de lo que debe ser o no ser. Aquí es donde nos caemos con todo el equipo, la dicotomía es la siguiente: o el profesor considera que su trabajo es la exposición de sus conocimientos y el del alumno el de cogerlos al vuelo o, por el contrario, el profesor ha de ir facilitando herramientas para que asimilen y sepan aplicar los conocimientos aprendidos. España e Italia están a la cola, aquí se opta por la solución fácil, ladrillo en clase y deberes para casa, que si con nosotros dio buen resultado, a ver por qué no ha de darlo con los adolescentes de internet. Los buenos resultados académicos búsquenlos en Dinamarca, Austria, Bélgica?TALIS hurga un poco más e investiga lo que pasa en las diferentes asignaturas, de forma que los más tradicionales siguen siendo los de matemáticas y lenguas extranjeras, mientras que en el otro extremo están las tecnologías, las destrezas profesionales. Nada nuevo, el Mediterráneo ya está descubierto. Por otra parte estos profesores de librillo consideran muy importante el intercambio de ideas, pero no están por la labor de la colaboración profesional, el individualismo es pecado muy común de las salas y tertulias de los centros. Lamentablemente muchos profesores se quejan del clima en el aula, del tiempo que han de dedicar a mantener el orden, se pueden atar cabos y TALIS pone de manifiesto que en los países con planteamientos constructivistas hay mejor clima escolar, más disciplina y mayor rendimiento. La conclusión es de blanco y en botella, el profesorado noruego se encuentra satisfecho con su trabajo y lo ve eficaz, el español también cree que hace un buen trabajo, pero que no es eficaz. Uno de los aspectos más llamativos del estudio es el de la evaluación del profesorado. Aquí es palabra tabú, como en Italia, Portugal e Irlanda, países en los que más del 80% del profesorado no es evaluado o no se le informa de los resultados de la evaluación. Tampoco son evaluados los centros en su conjunto, pero lo peor es que no se sabe qué se ha de evaluar. TALIS se centra sobre todo en las prácticas innovadoras, en la formación y desarrollo de los profesores y en los resultados de los alumnos. Pero evaluar por evaluar tampoco sirve de nada, TALIS dice que el profesorado quiere ver recompensas por el buen trabajo y por el esfuerzo, el 75% dice no ver ningún reconocimiento por su esfuerzo suplementario, en España no llegan al 20% los que ven algún fruto, incluso son objetivos y los que ven por el rabillo del ojo lo que hace el prójimo confiesan que sus compañeros merecerían algo más y no se les da. No es que no me lo crea, pero me da en la nariz que los encuestados no son sinceros al 100%, el funcionariado español está acostumbrado al café para todos, para el que se esfuerza como para el que cumple discretamente o para el zángano. En el momento en el que se diga que el que trabaja más ha de cobrar más, veremos lo que pasa. Ojo al parche, pues, si queremos que esto marche, hay que garantizar recursos y profesorado cualificado y reconocido, intensificar su formación, poner todos los medios para crear aulas con el personal de apoyo preciso y los cambios de actitud imprescindibles para la mejora del clima de convivencia escolar y, por fin, estimular la evaluación eficaz y justa de cuyos resultados se pudieran beneficiar todos los integrantes del sistema. No quiero terminar estos folios sin destacar una ausencia en el informntramos, por fin, en el comentario del núcleo duro del informe TALIS, es decir, la visión que tienen los profesores de su práctica docente, de lo que debe ser o no ser. Aquí es donde nos caemos con todo el equipo, la dicotomía es la siguiente: o el profesor considera que su trabajo es la exposición de sus conocimientos y el del alumno el de cogerlos al vuelo o, por el contrario, el profesor ha de ir facilitando herramientas para que asimilen y sepan aplicar los conocimientos aprendidos. España e Italia están a la cola, aquí se opta por la solución fácil, ladrillo en clase y deberes para casa, que si con nosotros dio buen resultado, a ver por qué no ha de darlo con los adolescentes de internet. Los buenos resultados académicos búsquenlos en Dinamarca, Austria, Bélgica?TALIS hurga un poco más e investiga lo que pasa en las diferentes asignaturas, de forma que los más tradicionales siguen siendo los de matemáticas y lenguas extranjeras, mientras que en el otro extremo están las tecnologías, las destrezas profesionales. Nada nuevo, el Mediterráneo ya está descubierto. Por otra parte estos profesores de librillo consideran muy importante el intercambio de ideas, pero no están por la labor de la colaboración profesional, el individualismo es pecado muy común de las salas y tertulias de los centros. Lamentablemente muchos profesores se quejan del clima en el aula, del tiempo que han de dedicar a mantener el orden, se pueden atar cabos y TALIS pone de manifiesto que en los países con planteamientos constructivistas hay mejor clima escolar, más disciplina y mayor rendimiento. La conclusión es de blanco y en botella, el profesorado noruego se encuentra satisfecho con su trabajo y lo ve eficaz, el español también cree que hace un buen trabajo, pero que no es eficaz. Uno de los aspectos más llamativos del estudio es el de la evaluación del profesorado. Aquí es palabra tabú, como en Italia, Portugal e Irlanda, países en los que más del 80% del profesorado no es evaluado o no se le informa de los resultados de la evaluación. Tampoco son evaluados los centros en su conjunto, pero lo peor es que no se sabe qué se ha de evaluar. TALIS se centra sobre todo en las prácticas innovadoras, en la formación y desarrollo de los profesores y en los resultados de los alumnos. Pero evaluar por evaluar tampoco sirve de nada, TALIS dice que el profesorado quiere ver recompensas por el buen trabajo y por el esfuerzo, el 75% dice no ver ningún reconocimiento por su esfuerzo suplementario, en España no llegan al 20% los que ven algún fruto, incluso son objetivos y los que ven por el rabillo del ojo lo que hace el prójimo confiesan que sus compañeros merecerían algo más y no se les da. No es que no me lo crea, pero me da en la nariz que los encuestados no son sinceros al 100%, el funcionariado español está acostumbrado al café para todos, para el que se esfuerza como para el que cumple discretamente o para el zángano. En el momento en el que se diga que el que trabaja más ha de cobrar más, veremos lo que pasa. Ojo al parche, pues, si queremos que esto marche, hay que garantizar recursos y profesorado cualificado y reconocido, intensificar su formación, poner todos los medios para crear aulas con el personal de apoyo preciso y los cambios de actitud imprescindibles para la mejora del clima de convivencia escolar y, por fin, estimular la evaluación eficaz y justa de cuyos resultados se pudieran beneficiar todos los integrantes del sistema. No quiero terminar estos folios sin destacar una ausencia en el informe, echo de menos una valoración de profesores y directores sobre el papel de las familias; es evidente que como decíamos al comienzo, las situaciones son variopintas, distintas culturas, religiones? pero quizá se peque de una cierta consideración de la educación como islote en la sociedade, echo de menos una valoración de profesores y directores sobre el papel de las familias; es evidente que como decíamos al comienzo, las situaciones son variopintas, distintas culturas, religiones? pero quizá se peque de una cierta consideración de la educación como islote en la sociedad

14 febrero 2009

Educación infantil: menos lobos, Sr. Quintana

No es la primera vez que desde estas páginas se le ponen las peras al cuarto al señor vicepresidente por tirarse los faroles que se tira con sus logros en el mundo asistencial a los menos favorecidos. Hoy toca tirarle de las orejas por la educación infantil en el tramo inicial, hasta los tres años de las criaturas. Pero vayamos por partes, es culpable de muchos males, pero no de todos. Hubo tiempo ha, una Administración -la de la derecha- que consideraba que esos diminutos ciudadanos no eran sujetos del derecho a la educación, por lo tanto, si había que asistir a los más desvalidos, lo tendría que hacer la Consellería de Familia y nos encontrábamos con guarderías, un término retrofranquista usado para contentar a las madres descarriadas y trabajadoras que -malditas ellas- dejan a sus criaturas al cuidado de desconocidos y desconocidas. Con el tiempo aparecen los parvularios, los preescolares, los jardines de infancia? eufemismos que no llegan a difuminar la capacidad discriminadora del ente limpiaculos para atenuar la indolencia de las madres desnaturalizadas. Claro está que todo esto va a costa del ciudadano pagano del servicio privado, salvo casos flagrantes de beneficencia. Con el tiempo verán que este servicio privado, privadísimo, da un salto en la calidad, ya hay élites que se pueden pagar algo mejor que un almacén y nos encontramos con las famosas escuelas infantiles. Esta nueva pequeñoburguesía, en algunos casos pseudogallego hablante, precisa de un nuevo producto educativo, es necesario que los hijos de estos profesionales y funcionarios de medio pelo dispongan de un cubículo asistencial con un psicólogo-conductor de autobús y una maestra cocinera que gestionen el negocio, eso sí, con nombre del país, la escola infantil ha de llamarse en gallego y ha de ser capaz de enseñarle a los niños alguna canción en inglés, para que luego no se diga que no somos modernos, nosotros los progres. Cambio tras cambio llegamos a la situación actual, eso sí, después de cuatro años de gobierno de Quintana y el panorama que nos encontramos es algo parecido a un puzle en el que encajan piezas que van desde el bajocubierta patera o el entresuelo multiusos en el que se hacinan criaturas sin ningún control, pasando por la guardería de barrio sin ningún control de requisitos, por la escuela infantil pública, hasta el nuevo invento de las galescolas, el conejo de la chistera, estrella de la legislatura nacionalista. Pero como lo que cuentan son los números ahí van un par de ellos: tenemos más de 65.000 criaturas en esas edades, de ellos están escolarizados en las galescolas poco más de 1.900 y, si se cumplen las promesas de apertura, pueden llegar a 4.000 las plazas a disposición de la ciudadanía. Los países de nuestro entorno ofertan un tercio de plazas con respecto al censo real del potencial alumnado. Si tengo que creerme que este es un balance positivo, van a tener que usar argumentos muy convincentes y, sobre todo, van a tener que hacer un cambio muy profundo, que empiece por donde ha de empezar: la Consellería de Educación ha de tomar las riendas de la educación infantil como etapa educativa que es y que se empiecen a respetar unos requisitos mínimos de calidad.

08 octubre 2008

El dinero de la universidad

Llegó el cerebro de la revolución industrial en el sector textil y mandó parar, dijo que se gasta mucho y en cosas inútiles en las universidades y, sobre todo en idiomas e humanidades. El mercado y sus gurús piensan que aprender lenguas es algo que sale baratito y por lo tanto el Estado no ha de preocuparse más que de proporcionar los conocimientos mínimos a la población bachiller para que produzca mejor. El resto, los especialistas, que se formen por su cuenta, que se paguen sus estudios, que a fin de cuentas son precisos para la sociedad pero en un número muy limitadito. Los dineros públicos que se gastan en las universidades -piensan ellos- han de ser invertidos en enseñar aquellas disciplinas más caras, las medicinas, las ingenierías y esas cosas que a la universidad privada le resultan poco rentables y que le pueden costar la vida al contribuyente. Ahí sí que el esfuerzo presupuestario ha de concentrarse en formar a los mejores profesionales que sean después buenos becarios, más tarde arrastrados mileuristas y por fin, cuarentones mejor pagados continuamente en la picota. A lo mejor hay que preguntarse la razón por la cual la universidad ha de formar a tantos economistas a un coste carísimo por cabeza para llegar a ser comerciales de banca especializados en torearme para venderme hipotecas y seguros ¿Es responsabilidad del Estado o del banco de turno? No creo que la sociedad vea recompensado su esfuerzo económico, a lo mejor lo invertido en un titulado en Historia o Latín revierte con más fuerza y valor, que no precio, en la formación de jóvenes. Cuando escribo estas líneas a mi lado están traduciendo el texto anexo a las imágenes de una publicación universitaria porque su autor no sabe, lógico y natural que no sepa, pero alguien tuvo que aprender a tratar imágenes y a traducir sus textos. Sale barata la traducción, que se paga con becas de colaboración aunque sea trabajo profesional; tampoco es que se derroche el erario público. Dicho todo lo anterior también es cierto que hay que hacer un esfuerzo, mínimo, porque sale solo, para cargar las tintas contra el papanatismo localista de las tres universidades y los siete campus de las universidades gallegas en las que se repiten titulaciones sin ton ni son, sin hacer el menor esfuerzo en renovarse y adaptarse a las nuevas necesidades del alumnado. Lo estamos viendo muy clarito estos días en los que la polémica surge a raíz de las negociación de los presupuestos para el 2009 y, por lo tanto, también, de la partija que se han de llevar las universidades, el famoso y demandado 1%, los criterios de la Xunta han de ser muy precisos, han de llegar a esa cantidad para poder adaptarse al Espacio Europeo de Educación Superior (EEES), pero tendrán que ir recibiendo las cantidades en la justa medida en la que vayan haciendo sus deberes; el reto es caro y , por lo tanto, la corresponsabilidad se contrapone una vez más al chovinismo de las siglas y a los intereses creados de los mandarines.

01 octubre 2008

¿Se apuesta por la formación profesional?

Desayunábamos estos días atrás con la noticia de un joven con ciertas capacidades mermadas -¿quién las tiene todas funcionando a pleno rendimiento?- ,un joven con una minusvalía que limita lo que puede o no puede hacer, un joven que terminó la secundaria y que quiere estudiar Formación Profesional en un centro integrado. Acude al centro, allí les encantaría cumplir la norma que reserva un porcentaje de plazas para personas como él y recibe como respuesta de la administración que nanai de la china, que se busque uno de pago en que le admitan, que ellos no están para eso. Espero que hoy, a estas alturas, esté solucionado el problema, pero aún así no hay derecho a que las autoridades encargadas de la ordenación de la Formación Profesional sigan perpetrando las desfeitas que contemplamos, se siembran ciclos formativos manteniendo los criterios clientelistas de la Administración anterior por todas las comarcas de Galicia sin más orden ni concierto que la voluntad que le surja del entrecejo al alcalde de turno. Tenemos más administrativos y monitores deportivos por metro cuadrado en determinadas zonas que los que podrían absorber las empresas de la redonda en cincuenta años. Pero seguimos en las mismas, los jóvenes llegada una edad quieren irse a estudiar a la ciudad, tener una beca si la precisan, vivir en un piso de estudiantes aunque no sean universitarios, estudiar soldadura de esa supermoderna o fedellar con chips y, sobre todo, que las empresas los busquen antes de acabar el curso, como a los que estudian fontanería o cosas así. Pero no, aquí seguimos perseverando en una buena idea, que fue acabar con la antigua FP II, y conservar las buenas intenciones de entonces que ya están ampliamente superadas. Pero hay más contradicciones y, si cabe, más grandes; se sigue apostando por los chiringuitos semiclandestinos, como el que acaba de cerrar la policía, estos días en los que se estafa claramente a jóvenes inocentes, padres crédulos y a algunos claramente tramposos, allí sin titulación adecuada y con tres mil pavos por delante te suministran un título académico sin el menor control ni inspección. Ha aparecido la punta de iceberg, que escarben más y ya verán lo que aparece con la complicidad de asociaciones de empresarios, comerciantes y demás gaitas. Y aún más, siguen manteniéndose y subvencionándose los centros con ciclos formativos de grado medio y superior en los centros de buen nombre y mejor apellido, con buenas relaciones institucionales y empresariales, pero no se crean, venden garantías, pero también venden humo cuando hablan de salidas laborales. Queda por ver la novedad de los Programas de Cualificación Profesional Inicial, esa especie de saco sin fondo que pretende absorber el fracaso escolar y encauzar a la chavalada hacia el mundo laboral como en la acelerada de los años treinta, olvidando que hoy se necesita mano de obra cualificada. Pues esperen a comprobar si aparecen o no chiringuitos presuntamente escolares asociados a empresarios sin escrúpulos que se encargarán de proporcionar y abusar respectivamente de carne cualificada para barrer talleres por el morro. A todo esto, creo que el II Plan Gallego de Formación Profesional ya está encuadernado en bonito. www.lafelizgobernacion.blogspot.com

01 julio 2008

A vaca parindo...

Con frecuencia cuenta una amiga, profesora de Matemáticas, que en una ocasión, habiendo conseguido poner a toda la clase en situación, es decir, participando de esa especie de comunicación que se produce entre los que hablan y los que escuchan alternativamente, sin interrumpirse, un alumno tuvo la genial ocurrencia de participar en el proceso poniendo en conocimiento de los demás el siguiente pensamiento positivo y, sobre todo, profundo: "Manda carallo, a vaca parindo e eu aquí". De esa breve y escueta forma dejó sin argumentos a la profesora, dejó atónicos a sus compañeros sin saber si reaccionar jaleando la ocurrencia o reflexionar sobre el contenido del mensaje. Sin lugar a dudas lo seguro es que el adolescente del que hablamos tenía, supongo que seguirá teniendo, una escala de valores clarísima, solvente, a prueba de cualquier amenaza de soborno ideológico por parte de todo aquel que quisiese sorberle el seso con el pretexto de hacerlo ciudadano a la medida del gobierno de turno. Por otro lado, también dejaba absolutamente claro que sus intereses pasaban, y supongo que seguirán pasando, por el mismísimo centro de su ombligo y el de sus más cercanos. La economía familiar seguramente dependía en aquel momento de que la vaca sobreviviese al parto, de que fuese ternero o ternera, de que la cría fuese sana; poco valor tendría para él y para su vaca el álgebra que solucionaba problemas planteados sobre el diferente caudal de agua de dos grifos o sobre dónde y cuándo se encontrarían un par de trenes que salieron a distinta hora, de distinto sitio y no se sabe si por la misma vía. Su soledad era eso, la abstracción de la realidad presente y la concentración en la propia vida alejada de allí diez minutos a pie. Ese individualismo es comprensible, por lo tanto el alejamiento de ese estereotipo también lo es. Párense un momento a pensar cuántos, como nuestro protagonista de hoy, pasmaron estos días de fútbol compulsivo, cuántos estaban huyendo de sabe qué, escondiéndose tras la pantalla, sin importarles lo más mínimo ni colores ni naciones, ni goles ni prórrogas, ni fichas multimillonarias ni penaltis. ¿Cuántos estarían pensando aquello de: "Manda carallo, a vaca parindo e eu aquí"? ¿Crisis? ¿qué crisis? La selección española de fútbol le jorobó el Congreso a Mariano Rajoy, los dioses se conjuraron para que los titulares se solaparan. El destino deparó que la caída de las bolsas pasase desapercibida, incluso que los 200 euros del primer plazo de los fijos en nómina amortiguase el enésimo atraco del Euríbor. Todo eso lo consiguieron los mozalbetes de laboratorio que despuntaron de niños por sus cualidades antropomórficas, por tener un código genético seguramente saludable y sobre todo por estar en el momento justo en el lugar oportuno para ser transformados en deportistas de élite cuyo cuerpo robotizado cotiza en Bolsa para destilar beneficios opulentos con destino a su cuenta corriente libre de impuestos y también con destino a la de sus patrocinadores que venden los productos que nos anuncian. La verdad es que poca diferencia encuentro entre la conciencia ciudadana del chaval preocupado por su vaca y la del forofo taquicárdico por los colores de no sé qué nación.

24 junio 2008

La fuerza del titular: del bachillerato a la maternidad

Sin ánimo de intrusismo, me asomo al comentario puro y duro de lo que pudieron haber leído ustedes días atrás sobre estos dos temas. La publicación del Decreto que regulará el bachillerato en Galicia se resumió en un par de frases que trataban de las asignaturas con las que un alumno puede matricularse en el curso siguiente; parece que se reclama que el clamor popular decapite bachilleres en la plaza pública si no son capaces de aprobar los dos cursos del bachillerato en dos años. Los que necesitan el papel de fumar para todo pueden ir reflexionando sobre la realidad que les dicta dos mensajes: uno, el bachillerato ya no es la preparación para la Universidad y dos, el país, la economía precisan, todos, necesitamos alumnos y alumnas que sean capaces de superar el bachillerato en dos o en tres años para poder acceder a estudios superiores de formación profesional, acordes con sus posibilidades, habilidades, preferencias?No se trata de malgastar el dinero público, como se dice habitualmente, sino de ofrecer las oportunidades que hace años nadie podría tener para completar su formación postobligatoria. Esto ni excluye ni supone superflua la necesidad de unas rigurosas pruebas de acceso a la Universidad; han de mantenerse puesto que nada tiene que ver la investigación sobre los foraminíferos con ser entrenador de juveniles en un equipo de balonmano o con ser el responsable del estudio de una instalación eléctrica. Pero para todo eso hace falta el bachillerato, sin regalos, mas con todas las oportunidades que el sistema sea capaz de brindar sin mermar el necesario esfuerzo del alumnado.El segundo comentario tiene que ver con los titulares vertidos sobre el nombramiento de la nueva Secretaria General del PP que da el pistoletazo de salida de las elecciones del 2012 y, sobre todo, de la campaña electoral interna en su partido. Podrían haber empezado hablando de su relativamente brillante carrera como funcionaria, no es ni será la única abogada del Estado que hace carrera política; incluso le podrían tildar de trepa.Lo que menos me gusta es la mención en los titulares a su condición de madre y soltera. Me parece que es juego sucio y merecedor de todos los descalificativos que podamos atribuirle. Esta señora es madre porque le ha dado la real gana y esta señora no está casada por el mismo par de razones. Los progres de turno no tienen derecho de pernada para pontificar sobre ninguna de las dos cosas y mucho menos para intentar mostrar un distanciamiento del PP de la jerarquía católica, como se ha insinuado; que yo sepa no ha manifestado pertenecer a ninguna iglesia ni está obligada a hacerlo, otra cosa es que se preste a tal maniobra de marketing. El colmo de mi desacuerdo, casi de mi indignación, tiene que ver con un futurible que amenaza con ser certeza. Me temo que esta señora no pasa de ser otro icono electoral. Nunca podrá ser acusada de ser el símbolo de la derechona, no es Ana Botella y sus peroratas hortofrutícolas sobre los matrimonios, pero usar la vida personal como atractivo enganche electoral es tan poco ético como el templagaitismo católico de Bono o el juvenil mensaje de Aído y sus lapsus linguae.

17 junio 2008

Un par de retos con sustancia para la Consellería de Educación

El primero tiene que ver con los centros educativos sostenidos con fondos públicos, para entendernos, centros privados pagados por todos en los que los niños y las niñas, los y las adolescentes, se segregan a la hora de ejercer su derecho a la educación. Está prohibido que personas de ambos sexos estudien en la misma escuela. Diferentes tribunales de justicia se pronunciaron sobre el tema y el Tribunal Supremo acaba de poner los puntos sobre las jotas anulando una sentencia del Tribunal Superior de Castilla-La Mancha que permitía tal tropelía. Es decir, clarito y muy clarito, el Tribunal Supremo sienta doctrina diciendo que no se puede subvencionar la enseñanza segregada, que los centros sostenidos con dinero público no sólo no pueden ofertar enseñanza con discriminación sexual; sino que han de admitir a todo el alumnado que le corresponda según la legislación vigente, sea de distinto sexo, color de la piel, lugar de nacimiento, idioma, etc. Solamente los criterios establecidos legalmente servirán para asegurar la escolarización del alumnado según su domicilio, hermanos en el centro? Ahora la pelota está en el tejado de la Consellería de Educación que sabe que está subvencionando centros privados que segregan al alumnado, ese dinero hace mucha falta para sostener otros centros públicos o privados que se ajusten a la legalidad. Las irracionalidades antinaturales ha de costeárselas cada uno de su propio bolsillo; sinceramente algunas las excluiría de la ley, no puede ser; pero por lo menos que no sean gratis. El segundo, también tiene sustancia. Se trata del pacto al que han llegado el Ministerio de Educación, Política Social y Deportes y las Consejerías de Educación de las autonomías para adoptar 10 medidas que garanticen la mejora de lo que va camino de ser docena y media de sistemas educativos a su aire. Parece ser que a alguien se le enciende la lucecita y comprueba que no todo nos separa, sino que un plan de choque para evitar el abandono en la ESO es importante aquí y en Murcia, que haya que potenciar la Formación Profesional en cantidad y en calidad es prioridad para el crecimiento económico, que hay que incrementar el gasto en educación, en que titulen más alumnos en disciplinas científicas, en la educación de adultos?todo son prioridades, si quieren, ya sabidas y redundantes; pero se habló y se pactó algo más: cantidades concretas para la Educación Infantil, Galicia trincó cerca de 25 millones de euros para el año que viene. Aquí quiero yo ver a la Consellería de Educación invirtiendo esta cantidad. Por un lado, prácticamente no tiene problemas entre los 3 y los 5 años, el porcentaje es cercano a la plena escolarización salvo casos puntuales en barrios y poblaciones-dormitorio de parejas jóvenes. Donde en realidad hace falta invertir, ahora, es la primera etapa, a las criaturas menores de tres años, para garantizar su futuro éxito escolar y hacer compatible la vida laboral de sus padres con la debida atención especializada a sus hijos. ¿Dónde irán a parar esos 24.835.120 euros del 2009? ¿Se los llevará el vicepresidente Quintana para sus mandilones de Galescolas? Ya va siendo hora de que el presidente Touriño ponga un poquito de orden y diga algo tan simple como que lo educativo ha de estar en Educación. ¿Es tan difícil?

03 junio 2008

Pisa y Talis, el mito del Mepsyd

Los viejos bachilleres de letras se remueven en la silla sospechando que se les escapa una pareja de la mitología clásica; no es el amor inseparable de Dafnis y Cloe. Tampoco son semejantes a Orfeo descendiendo a los infiernos para rescatar a su amada Eurídice. Tampoco Mepsyd es ninfa ni hidra. Sean sinceros y confiesen que lo de PISA les suena a fracaso escolar, que de lo de TALIS ni por asomo les recuerda a nada y no me nieguen que muchos de ustedes se han quedado un poco pasmados ante la palabrota Mepsyd, unas siglas que sólo se refieren al Ministerio que, pese a todo, sigue regentando Mercedes Cabrera. Ya no es el viejo Ministerio de Educación, es el Ministerio de Educación, Política Social y Deporte.En principio no quería yo meterme con semejante cóctel de competencias, es más, seguramente no sería un mala idea si esas competencias fuesen acompañadas de la correspondiente dotación económica.Hace pocos días compareció la ministra ante la Comisión de Educación del Congreso de los Diputados para prometer más de lo mismo, es decir, menos cambios legislativos cuando la mayoría no dependen de su voluntad, sino de la de los consejeros de las autonomías.También quiere ampliar la escolarización. ¿Será la de 0-3 años en el Plan Educa3? ¿La que está ya en manos de ayuntamientos, en el mejor de los casos, cuando no en pisos-patera de las barriadas de las grandes ciudades? La parte alícuota que nos toca en Galicia se la lleva Quintana y sus mandilones.Lo del refuerzo de la Formación Profesional ya suena a vinilo rayado, su prestigio, su potenciación, el reciclaje de sus profesores, los centros de referencia?.no tiene ni cuatro duros para invertir en todo.Hay que evaluar el Sistema Educativo, sí, pero no nos cuenta nada del papel que ha de jugar la evaluación del profesorado dentro de la evaluación del sistema. Mucho jolgorio se ha montado con el PISA y se seguirá montando, para entretenimiento de sociólogos de mesa camilla, pero ahora quédense con otro nombrecito, el TALIS (Teaching and Learning International Survey), el que servirá par indagar, entre otros temas, en los diferentes tipos de prácticas docentes y actitudes de los profesores y las diferencias entre ellos; y que pretende medir, asimismo, los distintos tipos de liderazgo y de modelos de gestión escolar existentes en los centros educativos analizados. La muestra está compuesta por 4.000 profesores y 200 centros por país, a razón de 20 profesores por centro, a los que se suman 200 directores de centro por cada país.Ella misma ha dejado empantanada la redacción del Estatuto de la Función Pública Docente, es decir, ese código mediante el cual el profesorado tendría que ser evaluado y recompensado por sus esfuerzos y especial dedicación, simplemente -y esto se lo cuento sólo a ustedes en secreto- porque a los dirigentes catalanes del asunto este de la educación no les gustaba, querían, quieren -y se saldrán con la suya- hacerlo a su modo. El resto, ya se sabe, que se vaya buscando la vida. Este folio se me ha acabado, pero les seguiré contando más cosas.

20 mayo 2008

No le saludan por la calle

Veinte años no es nada, todo sigue igual. Sólo hace más o menos esos veinte años supe de la existencia de un sinvergüenza con los ojos saltones, la mirada sucia, la sonrisa libidinosa, el aspecto repulsivo y un actuar baboso impropio de cualquier ser humano; tal ejemplar se ganaba la vida -digamos que cobraba un sueldo- enseñando gimnasia hasta que fue denunciado por sus alumnos; sí, por sus alumnos; pero, sobre todo, por sus alumnas. La acusación fue bien simple, el individuo tenía siempre las manos dispuestas para ayudarlas, a ellas nunca a ellos, a dar volteretas, hacer pinos y demás frivolidades de la disciplina aunque no fuese menester. El proceso de la denuncia no fue fácil; clandestinamente ellos y ellas convocaron a un profesor de su confianza al que contaron, entre las lágrimas de ellas y el apoyo testimonial y sincero de ellos, lo que estaban sufriendo: sus acosos y sus humillaciones. Lo hacían con ese sentimiento de culpa propio de la educación católica, ellas eran las Evas responsables de la desgracia del género humano, las tentadoras, las culpables del pecado. Nunca podrían salir a la luz como víctimas de la violación de la que estaban siendo objeto, no podrían aparecer en sus casas, ni siquiera ante sus madres, contando que un delincuente les tocaba el culo impunemente. Lo que estaban confesando era absolutamente privado y secreto, lo negarían en cualquier otro lugar y ante cualquier otra persona. Estaban dominadas por ese sentimiento de culpa superior a cualquier deseo de venganza, a cualquier ansia de defensa. Su resignación dejaba sin salida cualquier resolución justa de la injusticia. Se negaron rotundamente a la denuncia pública, pero de alguna manera demandaban una recompensa privada, latía en ellas la necesidad de dejar de ser objetos, hoy son madres, y por esa razón buscaron ayuda. El ejemplar presunto culpable -presunto porque nunca pudo ser juzgado como se merecía- pasó por el trance de una, digamos, tensa y violenta entrevista privada con un compañero, en un despacho cerrado, tras la cual dejó de dar clase de gimnasia y al curso siguiente explicó matemáticas. Creo que ni trató de justificarse, ni de disculparse, ni de considerarse víctima de las armas de mujer; faltaría más, sabía perfectamente que su responsabilidad era notoria y que sólo le faltaba dar un paso al frente para declararse absolutamente culpable de sus actos. Sus alumnas no le saludan por la calle. Los tiempos han cambiado, pero tampoco se crean que hayan cambiado tanto, en este país tomatizado muchas mujeres siguen igualmente sumisas, no tan indefensas porque la ley las protege mejor, sino con la autoestima por los suelos, con su anhelo de ser felices amas de casa, dejando sus derechos personales al libre albedrío de cualquier energúmeno que tiene el cerebro entre las piernas. Si no nos importa que se objete de la Educación por la Ciudadanía porque en ella se habla de estas cosas, si no nos importa que un juez comprenda pero no comparta que un fulano mande a su mujer al otro barrio, va a ser mejor apagar la luz y cerrar la puerta.

13 mayo 2008

Pasaremos un rato con Pancho Álvarez-Fontenla

    Ahora podría decir todo lo que pienso, lo que nunca me dejaron saber: fui niño entre alambradas, (...) me asomaba a la vida, puse mi libertad encima de mis años. [José Manuel Caballero Bonald, ´Pliegos de cordel´]
No hace muchos meses leía en estas mismas páginas un artículo que hablaba de un personaje conocido en esta Universidad; al tercer párrafo estaba convencido de estar ante una necrológica y que el autor lloraba con sentimiento; sin prestar más atención también di por difunto al prócer causante de la laudatio, pero a los dos días me lo crucé por la calle vivito y coleando, ¡sólo se había jubilado! y el cronista se había pasado de frenada. Por lo tanto este folio sólo tiene la intención que dejar bien claro que Pancho está vivito y coleando, que aún va a dar guerra después de su jubilación. Por otro lado tampoco creo que a este profesor de Matemáticas que llegó el 75 a la Normal de La Coruña le presten mucho los panegíricos ni que haya estado esperando a su jubilación para que se le reconozcan sus méritos y dedicaciones exclusivas. Para algunos Pancho es el que les aprobó, honoris causa, para poder ir de maestros a pisar tojos por Galicia adelante. Para muchos es quien les abrió la cabeza para entender cómo se enseña? Para todos es el referente en la Universidad de La Coruña, organizando Orballo, frente al rector instalado en el poder con todos los parabienes y prebendas del mandarinato oficial. La memoria histórica está de moda sobre todo entre los que no la tienen y han de inventársela porque el 68 luchaban en las barricadas de la London School of Economics y durante la transición se afanaban duramente para conseguir un máster en Harvard; siempre pensando que un Audi oficial les estaba esperando. Mientras tanto, Pancho sí estuvo en marzo del 68 en Santiago, sí organizó el nacimiento Comisiones Obreras en la enseñanza? Hace más de dos años en estas mismas páginas dediqué un martes a los que no habían sido llamados a las puertas del poder del nuevo gobierno de la autonomía, decía algo así como que se pasaba frío si se dormía con los pies fuera del DOG. Eran los momentos en los que, si reconocías que no estabas en ninguna lista de nominados para ninguna Dirección General, es que eras un residuo de quirófano, políticamente hablando, claro. Me llamaron cosas bastante feas. Me consta que muchos, quizá Pancho también, ¿por qué no?, fueron llamados mucho tiempo antes, en los primeros ochenta, a las mieles de la moqueta del poder y no acudieron, por diferentes motivos, la integridad y la coherencia tuvieron algo que ver. La fidelidad a las personas y a las ideas es fluctuante, el que esté libre de pecado que tire la primera piedra, todos tenemos momentos de debilidad, pero a Pancho se le quiere y se le demostrará en la cena homenaje que le organiza Comisiones Obreras el próximo viernes, día 23, sin nostalgias y con la mirada en clave de futuro que "tenemos mucho que hablar, compañero".

15 abril 2008

Del bachillerato y sus alrededores

Seguro que cualquiera de ustedes coincidió hace unos días con algún compañero de bachillerato. Del bachillerato de verdad para algunos, o del polivalente para los más jóvenes. Con él habrá echado una lagrimita o unas risas forzadas por la copa, que hablaron de lo que pudo haber sido y no fue o de que mira tú donde está éste que no mató una mosca en su vida. Al día siguiente te preguntas si en realidad aquella opción que hiciste -o te hicieron hacer- de letras, ciencias, puras, mixtas o mediopensionistas a los catorce añitos fue tan importante para tu futuro o en realidad lo que importó fueron otras cosas, las amistades que conservas a distancia o las imágenes de los profesores o los castigos o los suspensos o los enemigos para toda la vida. Supongo que usted habrá hecho el bachillerato, el de verdad, en los viejos recreos, los fines de semana, en los pasillos, en los baños o en los billares más cercanos. Por lo tanto siempre les enmiendo la plana a los que dicen que el espacio -lugar, provincia- en el que se viven las experiencias, en este caso el bachillerato, tiene muy poca importancia, lo que en realidad importan son las personas con las que vives en Lugo o en Palencia. Estos días merodea por los claustros la reforma del contenido del nuevo bachillerato, están revueltos por las horas que se asignan a cada materia y los colectivos supuestamente representantes de cada una de ellas se convierten en lobby para presionar a la Administración, a los sindicatos, a los colegios profesionales, a los decanos de las facultades, a cualquiera que pueda incidir en el ¿qué hay de lo mío? Para los que no estén en la pomada les cuento que su retoño de 16 añitos puede empezar la dichosa etapa teniendo más horas de religión que de educación física y eso no hay santo que lo mueva, eso está pactado y repactado entre Zapatero y el Vaticano. No nos engañemos, mandan los de siempre, las sotanas, que Vázquez lo dejó muy clarito estos días; también con el nuevo Gobierno, aunque tengamos a una señora de ministra de los ejércitos. No puede haber obispas ni cardenalas ¿Está claro? Volvemos a clase, sus descendientes tendrán una nueva asignatura obligatoria, Ciencias para el Mundo Contemporáneo, que tiene como objetivo que, aunque estudien Derecho, salgan barnizados, y con las herramientas suficientes, de cultura científica, por lo menos convencidos de que tener ADN no tiene nada que ver con el examen del carné de conducir. Pues bien, alguna de estas horas de clase está en juego, como lo están las de Historia o las de Filosofía. Busquemos prioridades, que hay que mojarse, la religión no hay quien la toque, los hábitos de vida saludable que proporciona el ejercicio físico o se crean y consolidan durante la ESO o no hay nada que hacer en el bachillerato. ¿Quién le pone el cascabel al gato? Lo más triste es que los profesores no son capaces de quitarse el caparazón corporativo, en muy pocos casos sincero, que trata de proteger su estatus, sus posibilidades de promoción o de empleo y abusan de la demagogia, del ombliguismo. Quizá depurando contenidos hoy inútiles en todas las asignaturas podríamos llegar a conseguir algo más que un parche.

08 abril 2008

La lengua en las oposiciones

Las leyes, las normas siguen contradiciendo a la realidad, porque la realidad es terca y tozuda. Los reglamentos que desarrollan las leyes seguramente están bien pensados para ser bien utilizados y, a veces son más importantes que las propias leyes; ya decía Romanones aquello de hagan ustedes las leyes y déjenme a mí los reglamentos. No sé si son las leyes o los reglamentos, o los que los aplican, los que dejan a los asesinos de niñas en la calle y se les tienen años y años sin que nadie se preocupe de echarles el guante hasta que les pillen sin seguro en el coche o a 130 por la autopista.Esta semana volvió a ponerse de actualidad en la prensa el tema de las leyes, los reglamentos y la lengua por un par de detallitos de nada. No me refiero ahora a la alegre disputa entre los gurús de la normalización monolingüe con los idealistas malintencionados que persiguen armonías bilingüistas que también persiguen el monolingüismo.El campo de batalla desde hace tiempo está en la escuela, en los medios de comunicación y en los letreros de las 43.000 tiendas, ahora más subvencionados. No me mola nadita la cantidad de pasta gansa de mis impuestos que se puede llevar, por ejemplo, El Corte Inglés, Zara o cualquier otra gran marca de pingües beneficios a espuertas por rotular de una forma u otra. No sólo me parece injusto, sino inútil. Sus mercadotécnicos saben de sobra cómo y en qué lengua les resulta más rentable. Aquí todo quisque se compra las lentejas donde las encuentra mejores y más baratas independientemente de que el dependiente o la balda de la estantería recen una lengua u otra.El otro tema de actualidad ha sido la presentación del borrador de las oposiciones para ser profesor en Galicia. Los belgas que quieran presentarse a las mismas han de demostrar su competencia lingüística en castellano y en gallego, un español con DNI de Badajoz ha demostrar que sabe gallego y uno con DNI de Lalín ha de demostrar que sabe tanto gallego como el belga; les aseguro que ninguna de todas esas pruebas sirven para nada, ninguna garantiza que el que las supere sea capaz de dar una clase de nada, simplemente sirve para que el belga o el de Badajoz no vengan. Si esto es hacer país, que me borren. Yo quiero aquí al mejor, al que más sepa y al que mejor se le entienda.La novedad de este año consiste en que además el candidato tendrá que redactar y defender su programación didáctica en gallego, por narices y porque lo dice la Ley de Función Pública. Esta prueba seguramente sirve para demostrar que el candidato es un buen burócrata, que tiene quien le haga una buena traducción y que puede ver lamentablemente disminuidas sus potencialidades docentes ante el tribunal. Se puede perder un buen profesional porque no se le permita expresarse como mejor sepa y no me cabe duda de que ese buen profesional en ejercicio de sus funciones se haría entender de forma impecable ante su alumnado. La ley va por un lado, la realidad va a su bola y, a la larga, siempre gana la realidad, porque es la sociedad la que la transforma, no estas leyes.

19 febrero 2008

¿Estudias o trabajas?

Oigo, leo y me pasmo sin contemplaciones ante las continuas ofertas que demandan que se cumpla la ley; hace semanas que me hago eco de frivolidades ofrecidas a diestro y siniestro. Pero estos últimos días están sobrepasando la escala esa de los terremotos que nunca sé escribir bien. Está bien que digan que hombres y mujeres han de cobrar lo mismo por trabajar en el mismo puesto, que todos tienen derecho al agua en el grifo o que no se les mutilen los genitales, todo está regulado por leyes que se han de cumplir, sí o sí. Pero hay alguna norma que afecta a pocos y que los caporales de ambos partidos aún no han puesto en el candelero, quizá porque sólo afecta a los jóvenes o porque perjudica seriamente a los patronos. Titulo el folio con aquella vieja pregunta que dicen se hacía en los viejos bailes o discotecas para intentar ligar, la verdad es que a nadie oí decirla ni que nadie la hubiese escuchado. Pero es muy cierto que muchos jóvenes se ven en la encrucijada de hacerse la pregunta; no saben si estudian o trabajan o si hacen las dos cosas gratis o si las hacen en la economía sumergida. Teóricamente son estudiantes de los últimos cursos, son recién titulados o son titulados que aún no tienen experiencia en su oficio; se les ofertan puestos de trabajo, sí, curro puro y duro, no puestos de formación, no puestos de prácticas, sino horarios y responsabilidades que corresponderían desempeñar a trabajadores en activo, con su salario de convenio colectivo, con su seguridad social, sus trienios...pero el pícaro empresario sabe que utilizando cualquier subterfugio legal es capaz de usufructuar a la chavalada capaz y formada para que le haga el trabajo de un señor cuarentón que disfruta de sus vacaciones. Abran cualquier periódico que traiga ofertas de trabajo y podrán encontrarse con cosas asombrosas; a modo de ejemplo pueden leer que se buscan becarios que respondan como jefes de recursos humanos, responsables de cadenas de montaje, cazatalentos y todo lo que puedan imaginar; les cuento por ejemplo que las dos mayores empresas privadas de Galicia, la una que se dedica a hacer coches y la otra a fabricar ropa a todo trapo, ambas, buscan sin cesar becarios exigiendo currículos propios de un máster, ofrecen compensaciones económicas -que no salarios- ridículas, reclaman dedicaciones esclavistas y no aceptan para el puesto a nadie que no sea capaz de desempeñar un puesto cuyo perfil sería adecuado para un profesional de dilatada experiencia. Es decir, buscan mano de obra, buena, cualificada, sumisa y barata; algo que nuestras escuelas de formación profesional y nuestras universidades producen sin cesar. Pero claro, siempre tiene que haber quien vea la botella medio vacía. ¿Dónde iban a encontrar cobijo y experiencia laboral estos jovenzuelos sin que la oferta de las multinacionales les amparase? ¿Qué pasa? ¿Qué no saben que hay que ser humildes y respetuosos? ¿No saben que todos empezamos de aprendices? ¿Acaso ignoran que hay que barrer talleres? ¿Ya quieren ganar mil euros desde el primer día? ¿Es que nadie se va a dar cuenta de que es por su bien? Las leyes, en este caso, también existen, sólo hay que prometer cumplirlas.