http://www.laopinioncoruna.es/opinion/2013/04/16/ley-embudo-jungla/712354.html
Cuando Machado describía al típico señorito andaluz, aquel vago, vividor, cínico e hipócrita, parásito donde los hubiera, lo presentaba temeroso de que volviesen los liberales y pusiesen en peligro sus prebendas históricas de conservador de pro. Los liberales de entonces eran la modernidad, el progreso, hoy son Margaret Thatcher, Ana Botella?Miran al pasado con nostalgia y observan el futuro con miedo, con prevención, provocan la ley de la selva, ven que todo se hunde y temen irse ellos a pique, como los de abajo.
Antes los chavales se citaban a la salida del colegio para solucionar a guantazos sus diferencias, insultos, burlas, motes? emulando los duelos a espada o a pistola de novelas y películas; ahora sorprende ver las incoherencias, la falta de sentido del ridículo y decencia que están demostrando bastantes cargos públicos, señoritos como Sigfrid Soria, prometiendo violencia y justicia a su medida con lenguaje inusual fuera de las broncas en las tabernas, o la diputada Fabra-de los señoritos Fabra de toda la vida, de los aeropuertos sin aviones en Castellón- que recomendaba en el hemiciclo a los parados que se jodiesen si no había 400 euros de beneficencia.
La verdad es que el cuerpo me pide ir a un juez a solicitarle que dicte orden de alejamiento de esta gente, no los quiero a 300 metros de mí.
Todos estamos al tanto de un par de situaciones alarmantes. El señor Soria se preocupa de que su burbuja esté blindada, los desahucios quiere verlos por televisión, la realidad retransmitida en diferido hace menos daño; no sé si compartirán conmigo que hubo un momento en el que los suicidios parecía que reblandecían la conciencia y los sentimientos de sus señorías, queda muy feo que en la prensa europea se pueda leer que los parados se tiran por la ventana y los banqueros no, como mucho devuelven los títulos honoríficos, nunca el dinero. ¿Coinciden en que ya empieza a haber callo y ya no importa? La insensibilidad ya roza lo inhumano y quieren mostrar como culpables a las víctimas de la especulación del suelo y de un sistema económico que funciona con la ley del embudo. Por un lado amplio y generoso entran los rescates a los bancos y por el otro salen los goteos para la beneficencia de los más necesitados, si hay suerte.
La señora Fabra también quiere mantener las distancias con las familias sin recursos, aunque sepa que ya hay necesidades elementales que están sin cobertura social, ya no solo la vivienda, la alimentación infantil deficiente es ya una realidad palpable bien localizada, ya no son los poblados de chabolas. Todos leímos que el Gobierno canario se plantea abrir los comedores escolares en verano, que otros ven necesario generalizar los desayunos, los bocadillos del recreo a cuenta del colegio y las fiambreras con la cena para llevar a casa? hay barrios con el 70% de paro, hay hambre real y hay alimentación insuficiente y deficiente por penurias económicas.
El Gobierno Feijóo tiene en cartera ahorrar en los comedores escolares, en los pocos públicos que hay, no creo que tenga que ser un servicio gratuito para todos, sí ha de ser de oferta generalizada y sí ha de cubrir las necesidades básicas, siendo sensibles con los umbrales de renta que se fijen para usar el servicio. Es la igualdad de oportunidades lo que está en juego en una sociedad que o es solidaria o no es sociedad, es la jungla.
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