20 julio 2006

De guisos y fronteras

Podría ser que alguno de ustedes pasase algún tiempo, unos días en el sur de España, podría ser también que alguno de ustedes hubiese llevado en su equipaje cualquier disco de cualquier grupo más o menos famoso de los que despuntan como representativos en la cultura musical de la Galicia moderna o posmoderna, con una buena solista, con profesionales a los instrumentos y con unos buenos arreglos para el directo. También podría haber ocurrido que usted, ante sus amigos andaluces, quizá ante los que por aquí vivieron años, puede ser que ante los próximos a sus amigos se le haya ocurrido a alguien pinchar ese disco, así, porque sí, sin venir a cuento, para demostrar que en la lengua del país los músicos del país hacen cosas serias, o no. ¿Qué tendría que haber pasado? Seguramente nada anormal, alguien dice que qué bien canta la chica, otro que qué bien suenan los violines y aquella gaita eléctrica, o no y, sobre todo, la melosidad de las melodías, quizá lo empalagoso de las letras, puede ser que lo rancio de los mensajes adaptados ¿Y todo para qué? pues seguramente para que alguien, quizá su anfitrión afanado en obsequiarle con un venerable arroz de verano, con sus coquinas y sus galeras, con sus gambas y su pescadito de roca, pregunte si la que canta es del famoseo vernáculo. También podría ser que otro invitado, puede ser que algún amigo de su anfitrión se acordase de la cupletista desaparecida, en ese mismísimo momento en el que se esforzaba en lavar y lavar las cañaíllas antes de cocerlas, en preparar sin tregua el sustento de tomate con su hinojo bien ponderado, que serviría de lecho y océano a las escogidas cabrillas que los comensales degustarán con gran ansia y de cuya salsa libarán casi con lujuria. Aunque parezca imposible todo va ocurriendo bajo esos sones melindrosos y poco cardiosaludables, hasta que a uno de los presentes se le ocurre hacer la pregunta de la que todos esperan la respuesta, pero que nadie se anima a hacer, que nadie se atreve a hacer ¿Esta es la Niña Pastori gallega? Por supuesto que la cantante nada tiene en su haber que la acredite para ser conocida más allá de sus fronteras geográficas ni de sus límites artísticos propios de melómanos dedicados y convencidos. (...)

No hay comentarios: